Nuestra historia...

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- te amo tanto...

- te juro que si algún día nos separamos te volveré a buscar, y si llego a morir, reencarnaré y te seguiré buscando.

- y yo te juro que volveré a tí.

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- bright.

- hola...

- te ves... hermoso. - el menor se sintió tímido con el cumplido.

- gracias, tú también te ves bien.

- vamos papá.

- Ren, no te desesperes tanto.

- ¡ya quiero ver mi regalo!

- está bien, vamos.

La pareja y el niño iban juntos a un nuevo centro comercial, era el cumpleaños número 7 del pequeño y fueron todos a celebrarlo.

- ¡Phi Dylan! - el niño corrió abrazar al mayor.

- hola mi niño, !feliz cumpleaños!

- ¡gracias!

El niño saludó a las demás personas que lo acompañaban en su día con mucho cariño.

- amor, más tarde podemos... - el más alto preguntaba a bright pícaramente.

Llevaban varios días sin estar juntos debido a que no podían hacerlo con el niño en casa, ya él estaba más grande y entendía mucho.

- sí - bright respondía con una sonrisa igualmente sensual - dylan cuidará de Ren.

Se acercaron y se dieron un corto beso.

- Nani, bright, están cordialmente invitados a mi matrimonio. - Dylan se levantó y le dio la tarjeta de invitación a la pareja.

- ¡Felicidades! - bright estaba muy feliz al ver a su amigo tan feliz.

- gracias chicos.

Luego de aquella noticia todos disfrutaron del cumpleaños con alegría.
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- bright...

- ¿Hmm?

- también invité a...

- hmm... lo imaginé.

- ¿No te molesta?

- no... él es tu amigo, no puedo ni voy a alejarte de él.

- ¿No han vuelto a hablar?

- no... desde la última vez no supe más de él.

El rubio no sabía si era buena idea decirle lo que sabía.

- hmm, a veces me pregunta por tí...

- ¿Sí?

- ajá... yo sé que ahora estás con Nani pero... creo que debes saber algo.

- no... no digas nada del tema, tú acabas de decirlo, ahora estoy con Nani, ha pasado un año desde la última vez que lo ví, no puedo seguir más así.

- lo entiendo.

- eres un buen amigo dylan, win fue alguien muy importante en mi vida pero ya se acabó.

- ¿Realmente se acabó?

El castaño sabía que no, sabía que siempre habría algo que los uniría.

- sí, ya acabó.

...Pero quería seguir con su vida.

- está bien amigo.

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