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Ayer me salté las clases que me quedaban y Ryujin no se movió de mi lado en ningún momento, pensé que sería extraño e incómodo pero no lo fue, a cierto punto me sentía bien a su lado, cuando no se comportaba como una idiota.

Hoy ya estaba en la escuela en mi última clase; Artes. Esta clase la compartía con ese grupo de mierda, yo sola, sin la compañía de mis amigas. Una pena ya que es mi clase favorita, quería participar pero sabía que a la mínima palabra que saliera de mi boca iban a estallar en risas de burla o dirían comentarios que no quiero escuchar, así que mejor me lo ahorro. Hoy tengo que ir a la casa de Ryujin, al menos iba con Rosé.

Ya había terminado todas mis clases y las chicas ya se estaban yendo, se fueron con Lisa y nos ofreció llevarnos pero confiamos en que Shin va a aparecer, ahora sólo quedábamos la rubia y yo.

— "___, creo que no va a aparecer, nos tocará irnos caminando hacía su casa" — empezó la más alta.

— "Deberías cuidar lo que dices Rosa, yo nunca incumplo" — apareció Ryujin detrás de nosotras. Nos volteamos a verla, se encontraba cruzada de manos, estaba bien vestida, con unos shorts negros y un camisón del mismo color, se veía atractiva. Cuándo no.

— "No me llamo Rosa, mi nombre es Rosé" — dijo Rosé suavemente, aún no entendía como mi amiga podía ser tan amable con la chica que le jaló los cabellos, hay humanos muy buenos en este mundo.

— "¿Te pregunté? No me interesas tú ni tú estupido e insignificante nombre. Y tú Park deja de mirarme así y vámonos, mi hermana debe estar por acá"—empezó a caminar en dirección al estacionamiento y nosotras la seguimos. Esperen, ¿Shin tenía una hermana?

— "¿Tienes hermana? No sabía" — comenté.

— "¿Por qué te lo diría?" — buen punto.

Llegamos al estacionamiento y había una chica un poco mayor, rubia y alta, usaba una camiseta sin mangas, era muy atractiva igual.

— "Hola preciosas"— dijo aquella chica guiñándonos un ojo pero no pudo hacer más porque Ryujin le jaló el pelo. — "Ehh, cálmate"

— "Cálmate tú, que son menores. ¿Por qué tardaste tanto Jeongyeon?" — dijo Ryujin mientras se cruzaba de brazos.

— "Ni que fueran ilegales. Y no te importa, estaba arreglando unos asuntos con una chica en el vestidor"

— "Ya veo"— dijo la hermana menor.

Nos montamos al auto, era bien lindo, todo de color blanco por afuera y dentro, olía riquísimo desde adentro y se encontraba bien limpio, vi algunas fotos de la tal Jeongyeon colgadas en su espejo, vaya que se ama a si misma. Metió la llave y arrancamos en dirección a la casa de las Shin. Miré a Rosé a ver si estaba incómoda igual que yo y me hizo una mueca, no queríamos estar aquí pero todo por el trabajo y la calificación.

Se había hecho un silencio en el vehículo hasta que la hermana de Ryujin lo rompe. — "Ryuu, ¿no me presentarás a tus amiguitas?" — dijo sonriendo coquetamente.

— "No son mis amigas y no"

— "Que pesada. Hola chicas lindas, soy Jeongyeon, el gusto es de ustedes por estar conociendo a tremendo bombón y de paso estar en mi auto. No muchas logran eso" — Rosé y yo nos sonrojamos de pies a cabeza, esa chica si era atrevida, me ponía los pelos de punta.

— "Ya cállate Jeong, llévanos a casa en silencio y sin decir tantas estupideces" — dijo Shin para luego seguir viendo por la ventana, su perfil era muy lindo, aunque no lograba ver mucho ya que estaba sentada en el puesto de acompañante mientras que yo estaba atrás junto a Rosé, quien iba a la derecha observando la ventana también pensativa.

El resto del camino fue en silencio y pronto llegamos rápido a una linda casa blanca bien cuidada, nos estacionamos al frente y nos bajamos las tres menores, Jeong dijo que nos adelantemos ya que tenía que hacer algo.

Ryujin fue quien entró primero después de que la llave que esta misma había puesto habría abierto la gran puerta de madera, Rosé y yo entramos detrás de ella viendo los adentros de la casa, un pasillo pequeño con la justa decoración para luego ver las escaleras de fondo y una bonita sala a la derecha, supongo que la cocina está más escondida pero viendo cómo es todo, ha de ser muy linda de igual manera. Ryujin empezó a subir las escaleras con nosotras detrás de ella, una vez arriba entró al primer cuarto que se veía.

— "Bueno, ya están acá, esta es mi habitación, ahora pónganse a hacer el proyecto, yo iré a buscar algo de comer para mí" — nos ordenó una vez dentro de la habitación, era normal, tenía una cama grande, de seguro dormía bien cómoda, unas mesas de dormir, un tocador, el armario etc, también tenía una mesa para estudiar junto a libros y una gran computadora, nos sentamos allí.

— "¿Y tú no planeas hacer algo?"— dije comenzando a enojarme.

— "Mmm"— hizo como que lo pensó apoyando su mano en su barbilla. — "¿De verdad piensas que haré algo?" — carcajeó mientras se iba.

Miré a Rosé y le susurré "¿Y ahora que hacemos?" pero sólo me respondió encogiéndose de hombros. No tenía caso pelear. Sacamos nuestros libros y empezamos a hacer el proyecto de Ciencias.



























Al cabo de un rato ya casi teníamos todo listo, nos faltaba mi parte y la de Shin, habíamos terminado la de Rosé y ya íbamos por la mía, nos quedaba poco de igual manera ya que la de Rosita era la más difícil, después de esto solo nos quedaría hacer las maquetas que nos pidieron pero eso ya era individual aunque se presentaban juntas. Estábamos concentradas buscando información cuando el celular de Rosé suena.

— "Apaga eso Rosa" — dijo Ryujin desde la cama mientras comía fresas que se había servido en un bowl, por obvias razones, no nos ofreció. No sabe tratar a sus invitadas.

Rosé rodó los ojos mientras contestaba. — "¿Buenas? Oh, hola" — se quedó confundida unos segundos mientras asentía. — "¿Ahora? Está bien, ya voy" — y colgó. Luego me miró con pena. — "__... me tengo que ir. Mi mamá me necesita para algo. Perdón, de verdad no te quiero dejar con Shin"

— "Ni que me la vaya a comer" — soltó Ryujin desde lejos rodando los ojos, de verdad le fastidiaba tal rubia.

— "No te preocupes Rosie, ve, yo terminó esto, igual ya terminaste tu parte. Anda tranquila" — dije ignorando las palabras de Ryujin. Rosé asintió y recogió sus cosas, luego de eso salió de la habitación no sin antes despedirse de mi y pedirme perdón de nuevo.

Ahora tengo que sobrevivir de Shin sola en su casa.














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Jugada Sucia ( Ryujin y tú )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora