Arrogancia

🍁🌸💨 HEIKAZUSCARA 🍁🌸💨

Rutina de dos Alfas y un Omega

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Despertar era lo primordial para cada uno de ellos, sin despertar ¿Cómo iniciarían una rutina?

El primero siempre era el Omega

No es como si fuese a voluntad, simplemente se despertaba por un mal hábito de sueño en el cual dormía hasta tarde y despertaba apenas el sol iluminaba la habitación

Aunque el despertar no era lo difícil, lo complicado recaía en como salir del abrazo en dónde sus dos alfas le presionaban contra si mismos. Cuando dormía a espaldas del alfa dominante, era sencillo escapar o escabullirse del abrazo, solo bastaba con alzar un poco su cuerpo para que ambos alfas soltaran su agarré y le permitieran salir; sin embargo, caso contrario cuando dormía con el rostro pegado al pecho del alfa dominante, pues él mismo era inconsciente de cuan poderosa era su feromona cuando dormía y cuan dificil era ceder ante el instinto de abandonar a su pareja, el otro alfa seguía el instinto del superior y tampoco aflojaba el agarre

En fin, milagrosamente fue sencillo en esa ocasión

El Omega beso la frente de sus dos esposos y salió de la cama en dirección al baño en dónde iniciaría su rutina de limpieza facial. Primero recogió su cabello con su diadema favorita, segundos después encendió su celular y llamo a su madre para conversar con ella mientras ambos seguian la misma rutina

- Buenos días, querido - la primera en desearle un buen día era su madre, algo en lo que sus esposos estaban en desacuerdo pero era inevitable - Te ves terrible ¿no te dejaron dormir?

- Más bien es al revés - sonrió y regulo el agua

Mientras el Omega conversaba con su madre y procedía con su rutina diaria, el alfa dominante abría sus ojos

Si bien ambos eran alfas de alto rango, se diferenciaban por el poder de sus feromonas y el tono de su voz de mando, normalmente se tiene una competencia muda para conocer quien es el dominante, pero en su caso fue decidido por un acuerdo mutuo y evidente superioridad del albino. Cuando el dominante despertó, le siguió el alfa menor, quien se removió en la cama fastidiado por tener que regresar pronto al trabajo

- ¿Debemos ir..? - estaba cansado de tener que levantarse temprano. Si no fuese por qué tenían un horario ajustado, dormiría todo el día acompañado de su Omega y su esposo Alfa

- Rindete - caso contrario del albino, quien nunca despertaba de mal humor o cansancio, como si fuese una batería andante - Buen día, Heizou - beso su mejilla y salió de la cama

- No es bueno - el pelirrojo volvió a cubrirse con la frazada provocando una sonrisa en los labios del albino

Ni bien dió un paso cerca del baño y se sintió embriagado por la fragancia de su Omega. Despertar temprano tenía sus ventajas, siendo que su pareja tenía un mal carácter era extraño sentir sus feromonas puras libres de intenciones dominantes, y solo se podía sentir en las mañanas cuando hablaba con su madre

Ingreso al baño viendo a su esposo secar su rostro con una toalla y a su suegra haciendo lo mismo al otro lado de la pantalla. Paso por detrás del Omega y rodeo su cintura con ambos brazos escuchando el ronroneó instintivo del jóven y, con clara satisfacción, hablo en su oído: - Buen día, Kuni