𝐒𝐇𝐄𝐋𝐓𝐄𝐑 𝐀𝐓 𝐃𝐄𝐀𝐓𝐇 || Rooney sobrevivió, ni siquiera ella sabía cómo, lo único que en lo que no dudaba era que, en las peores situaciones la comida de gato no era tan mala como decían y eso ha Buddy, no le gustaba.
Aparentemente encontra...
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ERA el último bocado del estofado que Rooney tenía en su plato y parecía que se la cayera el mundo encima. Le pareció tan delicioso que Carol, se volvió su nueva persona favorita. Detrás del gato, estaba claro.
Buddy a su lado comía otro trozo de cerdo que la mujer le había dado.
Ro había añorado tanto una buena comida caliente que al tragarse el primer bocado volvió a lo que parecía ser normal hace unos años, cuando su pequeño hermano le tiraba la comida y ella se lo devolvía poniéndosela en los zapatos.
La verdad es que no quería volver ahí, estaba bien así, tenía a un gato que le hacía más compañía que cualquier otra persona en toda su vida.
— Has tragado más que una foca, novata—alzó la mirada y se encontró con la de tez morena con una pequeña sonrisa—. Parece que el gato no te traía unas buenas presas.
Michonne quería conocer más de Rooney, si quería quedarse aquí debería obedecer, saber y crear nuevas leyes que harían que todo eso funcionara. La chica se limpió las mejillas con su manga, quitando los restos de comida casi inexistentes.
— ¿Todo este sitio es vuestro?
Miró a todos lados viendo que había vida, habían hasta niños pequeños, que juraba no haber visto uno desde su hermano. Al menos vivo.
Tenían animales, hortalizas, hospedaje. Parecía un vecindario normal y corriente. Un lugar perfecto para hacer trastadas.
Michonne sonrió enseñándole los dientes, se apoyó en su cintura y levantó una mano.
— Te lo enseño, si quieres.
Rooney abrió su boca, con alegría. Agarró a su planta verde y Buddy se subió a su hombro.
La de tez morena le dio un tour por todo el recinto, le enseñó el módulo donde habitaban ellos y todo lo que podía ir o no ir. Mientras paseaban, Michonne le presentó a Beth, una chica que parecía una muñeca de porcelana y a Judith, la hija del Sheriff, una bebé bastante mona a su parecer.
