Cartas a Julieta

Capítulo 06 Carta desde el fondo de mi corazón

No fui con él, Julieta. No fui con Hashirama. Sus ojos estaban tan llenos de confianza. Le prometí que huiríamos junto porque mis padres no los aprueban, pero lo dejé, esperándome debajo de nuestro árbol. Esperándome, preguntándose donde estoy. Estoy en Verona ahora, regreso a Londres en la mañana y tengo tanto miedo. Por favor, Julieta dime que debo hacer. Mi corazón está roto, y no tengo a nadie más con quien hablar.

Con cariño, Mito

Así termina de leer Sakura la carta escrita por Mito, con un nudo en la garganta viendo a sus nuevas amigas.

¿Estuvo ahí todos estos años? -pregunto Shizune escéptica, lo que Sakura solo asiente con la cabeza.

Creo que ella volvió a buscar a su verdadero amor -dijo Mei románticamente.

Y tuvieron diez hijos y hacen el amor ardientemente cada noche -añadió Kurenai, haciendo que todas rieran.

Solo que él está clavo, gordo y ella tiene que hacer todo -dijo Shizune irónicamente y sonriendo.

¡Shizune! -reprocharon todas mientras se reían.

O tal vez, se quedó en Londres, se casó con un duque y vivieron muy felices como yo -dijo Mei mientras Sakura se reía.

Pero tu esposo es un contador -comentó Shizune.

Nadie es perfecto -añadió Mei y todas rieron.

Apuesto que, cuando hace el amor con el duque... Piensa en su primer amor, Hashirama -comento Kurenai otra hipótesis.

Tsunade estaba callada, pero pensativa. Saura quería decir algo esperando consultarle algo, ya que no era una secretaria de Julieta y no sabía si lo que quería hacer estaba bien.

Tsunade, tengo que responder -comentó Sakura mirando a Tsunade esperanzada.

Tsunade miro a los ojos de todas las secretarias buscando una respuesta.

Entonces, contéstale -dijo y le extendió a Sakura una hoja de papel.

Así las secretarias y Saura se pusieron a escribir la respuesta a Mito mientras las demás respondían las cartas. Sakura rogaba que Mito no haya cambiado su dirección. Una por una se fueron despidiendo de Sakura y al final solo quedaron ella y Tsunade.

Buenas noches, Sakura, espero que Mito reciba tu carta -dijo Tsunade.

Yo también lo espero, descansa Tsunade -le respondió Sakura.

Al termina Sakura dejo la carta para Mito en la canasta adjunto con los demás sobres que al día siguiente irían hacia el buzón de correo, se encamino a descansar y ver a Sasori.

Hola -dijo Sakura entrando a la habitación viendo que Sasori estaba muy concentrado leyendo unos papeles.

Hola -respondió él sonriendo.

Siento llegar tarde -dijo ella con cara de pena.

No te preocupes, tranquila, ¿Qué tal tu día? -dijo mientras se levantaba para abrazar a Sakura y darle un sonoro beso.

De hecho, fue excelente -dijo ella refiriéndose a su gran descubrimiento- ¿Qué tal la madre de Tsunade?

Es una mujer sorprendente, maravilloso, es increíble, es muy instintiva, no cocina con receta, lo hace por puro instinto y me invito a cocinar de nuevo -dijo Sasori emocionado.

¿Enserio? -pregunto Sakura mientras se servía vino en copas y le pasaba una a él.

Sí, pero habla tú, lo siento no deje que me contaras tu día Saku -se disculpó Sasori.

Tuve un día muy impresionante -dijo Saura con una sonrisa- Me tocó responder una carta que fue escrita hace cincuenta años -contó ella todavía muy emocionada- Tal vez la persona nunca reciba la carta, pero se siente muy bien escribir

Sí, tienes que pasar más tiempo con ella -dijo él bebiendo y Sakura lo miro con cara que acaba de decir- Porque es tu pasión ¿No? -comentó sonriendo cariñosamente- Y porque caería de maravilla -mientras Sakura seguía con la cara de ¿Por qué dices eso? Cosa que Sasori notó- Es que recibí una llamada del Sr. Morini y me invito a una increíble subasta de vinos que habrá en Livorno

Aja, ¿Livorno? -pregunto Sakura suspicazmente.

Sí, sí, sí, es super exclusiva y no sé si me permitirán entrar -comento mirando a Sakura pidiéndole permiso, pero la mente de Sakura solo se decía que estuviera tranquila- Solo me iría por un día o dos, pero si quieres consigo dos entradas, aunque es muy difícil

Ok, una subasta de vinos en Livorno -dijo corroborar lo que escucho mientras Sasori terminaba su copa.

Sí, suena horrible ¿No? -dijo él tratando de averiguar qué es lo que pensaba, pues quizás comenzaría una pelea- Es una mala idea. Ahora me siento mal porque te voy a extrañar cielo -dijo con lastima, mientras Sakura se desconcertó más al escuchar que su prometido ya tenía por sentado que sí iría ala dichosa subasta. Sakura solo pudo contar hasta diez y respirar para calmarse, ya que sabía que era una oportunidad para él, así que solo pudo sonreírle.