Siento que la cama se mueve, acurruco la cara en la almohada y me vuelvo a dormir, ignorando la luz del sol que se cuela por la rendija entre las cortinas. La cama se mueve de nuevo. Estoy lista para ignorar eso también, hasta que un suave par de labios encuentran mi sien por encima de las sábanas. Una voz suave susurra en tu oído.
-Buenos días bebe.
Una sonrisa somnolienta tira de mi boca. Ruedo en la cama para quedar frente a él, frotandome los ojos, todavía incapaz de abrirlos por completo.
Sus dedos acarician mi piel donde mi camisa se había subido, exponiendo mi ombligo.-Hice café. ¿Bajas? -Me susurro, mis ojos finalmente se adaptan para captar un vistazo de su rostro justo cuando él se inclina para darme un beso de buenos días en la nariz. Su frente toca la mia. -¿Qué fue eso?
Sonrío para mi misma, aprovechando esta oportunidad para envolver mis brazos alrededor de él. Miss ojos siguen fijos en los suyos mientras lo empujo hacia la cama, cayendo sobre su pecho mientras intercambiasmos posiciones. Un débil "¡Uf!" escapa de sus labios.
-Cinco minutos más. -Digo, claramente esta vez, con la cara enterrada en su cuello. El calor de su cuerpo se fusiona con el mio. Alcanzando la temperatura justa mientras respiro su olor, el mismo que impregna las sábanas. Una pequeña risa vibra en su pecho justo cuando estoy cerrando los ojos de nuevo. Sus brazos curvándose a tu alrededor.
-Tan linda~.
Es complaciente, aunque no sin dejar que sus dedos desciendan por mi espalda hasta llegar a mi trasero, apretando suavemente antes de dejar que sus palmas descansen allí. Sus pulgares siguen trazando círculos sobre el dobladillo de mi ropa interior. Respiro en su hombro, complacida mientras amasa mi trasero.
Aunque no puedo ver su rostro, sé que está sonriendo al sentir que me retuerzo bajo su toque. El calor se acumula en mi intestino, viajando más abajo con cada pequeña caricia de sus manos. Me pregunto si la sensación es mutua. Muevo mis caderas contra él. El movimiento de sus dedos confirma mi sospecha.
-Nena... -Muevo mis caderas de nuevo, esta vez con más confianza. Su respiración se entrecorta en respuesta, sus manos completamente inmóviles ahora. -Nena. Sabes que nunca te movería bajo ninguna otra circunstancia. Pero tendré una erección si sigues haciendo eso. - Me levantas para mirarlo fijamente, mi cabello cae en cascada a cada lado de mi cara.
-Shh. -Me inclino para presionar mis labios contra los suyos, a la vez que muevo mis caderas una vez más.
El beso oculta un gruñido bajo dentro de su garganta mientras me jala hacia su pecho nuevamente, cambiando las posiciones.
-Mc...~ -Murmura en mis labios. No puedo responder mientras él presiona sus labios contra los míos, borrando todos y cada uno de los pensamientos de mi mente, solo queda una dulce voz en el fondo de mi garganta, que dejo escapar en el beso.
Mis manos se levantan para agarrar su rostro, pero él se desliza de mi agarre, sus labios bajan por mi barbilla y trazan mi mandíbula, sus manos ahuecan mis senos en el camino hacia abajo. Echo la cabeza hacia atrás, permitiendo un mejor acceso para que sus labios mordisqueen mi clavícula.
Levanto las piernas mientras él me quita las bragas. Sus dedos delgados masajean mis pantorrillas, mis muslos, mis caderas... Me estremeco con los ligeros toques en mi piel, acercándolo cada vez más a mi, anhelando su toque donde más lo necesito.
Tal vez leyó mi mente, o simplemente no pudo esperar, Zen se agacha entre mis piernas, levantándolas para descansar sobre sus hombros. Su boca traza besos arriba y abajo de mis muslos, provocando jadeos de placer en mi garganta cuando él se acerca a mi entrepierna, y gemidos desesperados cuando se retira, moviéndose para besarme el ombligo.
-Zen~ Tócame... -Suplico, dejando escapar un grito de placer cuando él atrapa la piel sensible de mi muslo entre sus dientes, justo antes de lamerla. Su respiración enfría el punto de mi muslo donde el contorno de su mordedura comienza a enrojecerse. Jadeo, tomado por sorpresa cuando coloca un suave beso en la punta de mi coño, todo se vuelve borroso por un momento.
Mis dedos se aferran a las sábanas, preparándose para lo que está por venir. Su lengua lame la longitud de mi coño y vuelve a trazar el camino. Me estremezco ante las atenciones, una descarga eléctrica recorre todo mi cuerpo. Lo hace una vez más, lentamente, deteniéndose para colocar besos sobre mi clítoris. Necesito toda mi fuerza para evitar que mis caderas sigan la sensación, haciéndome gemir bajo su toque. Mis ojos rodando en mi cabeza, ya ebrios del calor que invade todos mis sentidos.
-Zen~ no te burles de mí~ -Me quejo, mis ojos cerrándose por la frustración. Su dedo índice y el dedo medio se deslizan hacia adentro y abren mis labios internos, dando paso a su lengua para que rodee mi entrada antes de que deambule por el interior.
Sus labios se curvan con cada sonido que dejo escapar, instándolo a seguir adelante. Un zumbido bajo en la parte posterior de su garganta es mi única indicación de que te escuchó. Mi cabeza se hunde en la almohada. Su nombre en mis labios mezclado con los gemidos dentro de mi garganta, sale como una serie de respiraciones irregulares y maullidos cuando obedece. Mis manos vagan por su cabello, mechones plateados cayendo en cascada entre mis dedos.-Zen- ¡Ah! Voy a- -Mis entrañas se tensan a su alrededor, las pulsaciones de mi placer implorando más de esa estimulación. Sus suaves labios se cierran a mi alrededor, sus manos me sostienen por las caderas y, si no fuera por sus hombros sosteniéndolos, mis piernas ya se habrían rendido.
Es demasiado, mis dedos se enroscan dentro de su cabello mientras él aumenta el ritmo, la lengua se mueve para acariciar la piel sensible debajo de mi clítoris. Y demasiado bueno .
Un jadeo entrecortado escapa de mi garganta, mi orgasmo me inunda con una ola de placer, mi espalda se arquea porque ya no puedes contener la voz. Zen me lame para limpiarme mientras la emoción inicial se desvanece, sus propios suspiros de placer provocan pequeñas descargas de placer cuando recupero el aliento.
Mis piernas cayendo a los costados, entumecidas.Sin embargo, él me mira, exhalando como si fuera él quien tuviera el orgasmo. Quiero sentarte y tomarlo entre mis brazos, regañarlo por verse tan lindo mientras me come afuera. Pero mi cuerpo no responde. Parece entender demasiado bien, ya que es él quien viene hacia mí, su frente toca la mia y sonríe.
-La mejor comida del día~ -Parpadeo hacia él, mi voz aún no llega a mi. -Oh, y... -Comienza, sus brazos me envuelven mientras me levanta -Cinco minutos más.
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One Shots -𝑀𝓎𝓈𝓉𝒾𝒸 𝑀𝑒𝓈𝓈𝑒𝓃𝑔𝑒𝓇 +18
Fanfiction☆~ One shots con los personajes de Mysticmessenger. ☆~ Los personajes NO me pertenecen, son propiedad del juego otome Mystic messenger. (Cheritz) ☆~ Puede contener spoilers de algunas rutas.