➯ Spreen y Juan se odian pero Juan, cansado de no poder superar a su ex esposo/esposa, tendrá que trabajar junto a Spreen para conseguir "encontrar el amor" sin saber aún que su verdadero amor estaba frente a sus ojos.✧✧
Pov: Juan Juan se encontraba camino hacia el restaurante "pollo feliz" ya que ese día tendría una cita con una chica del pueblo verde, Spreen fue quien organizó la cita y lo único que le había dicho a Juan sobre aquella chica es que ya la conocía y que probablemente no le agradase la cita, pero aún así Juan aceptó ir por curiosidad de saber sobre quien se trataba.
Al llegar al restaurante abrió lentamente las puertas para encontrarse con personas comiendo y charlando tranquilamente, pero hubo una persona que llamó su atención, allí se encontraba la chica con la que tendría una cita y en cuanto la vio supo que debió haber rechazado la cita y seguir el consejo de Spreen, la chica era Ari, no es que Juan la odiará pero últimamente ella lo había estado acosando e intento incluso hacerle un amarre, Ari era una buena chica y muy amable pero claramente tenía una obsesión con el. De repente sintió como una mano tocaba ligeramente su hombro haciéndolo salir de sus pensamientos.
Volteó su mirada hacia atrás un poco para ver de quien se trataba y en cuanto lo vio se abalanzó sobre el dándole un abrazo, aquel chico era Spreen quien de inmediato correspondió el abrazo poniendo lentamente sus manos sobre las caderas de aquel hechicero y acercándolo más hacia el, —¿que pasa boludo?— pregunto Spreen al ver el estado de Juan, —Ya sabes todo lo que Ari me hizo— dijo Juan mientras se alejaba un poco terminando el abrazo, —Anda a la cita y si necesitas algo o quieres ayuda me avisas— dijo Spreen, luego de esas palabras Juan se dirigió hasta la mesa en donde se encontraba su cita.
Al llegar donde se encontraba Ari, la saludo amablemente mientras tomaba asiento frente a ella, —Hola Juan— Dijo una muy emocionada Ari, —Hola Ari, ¿Que tal?— Contestó Juan para luego tomar el menu de aquel restaurante entre sus manos, —Muy bien, oye no sabia que eras amigo de Spreen— Mencionó aquella chica de cabellos rubios, —No soy su amigo, el simplemente me está ayudando a conseguir pareja pero puedo asegurarte que el me odia y yo a él— Aclaro Juan mientras miraba extrañado a Ari, —Pero cuando el entro al restaurante te dio un abrazo, no?— Interrogo Ari, Juan no entendía a que se refería, si claro se habían abrazado pero eso para el era algo completamente normal, —eres la única persona a la cual he visto que le correspondiera un abrazo— Continuo la chica mientras tomaba el menú y empezaba a leerlo, Juan sabia que Ari tenía razón, el nunca había visto a Spreen abrazar a nadie ya que siempre se aleja o empuja a las personas que intentan darle afecto, pero no pudo seguir pensando ya que su amigo Mariana, quien trabajaba en aquel restaurante llegó para poder pedir su orden. . . . . Pov: Spreen Spreen se encontraba en su oficina esperando a Juan, el cual ya había terminado su cita con Ari, ella se fue a casa pero no sin antes darle su numero a Juan lo cual lo hizo sentir un poco extraño, el solo pensar en Juan saliendo con Ari le traía un sentimiento raro pero un sonido lo hizo volver al mundo real, estaban tocando su puerta y seguramente era aquel chico de gafas el cual estaba esperando, así que se puso de pie rápidamente y camino para poder abrir la puerta y encontrarse con Juan.
—¿somos amigos?— fue lo primero que escucho en cuanto vio a Juan el cual se notaba un poco confundido, Spreen no sabia que responder ante esa pregunta ya que se supone que el odia al hechicero pero en verdad no era así aunque, ¿de verdad lo consideraba un amigo?, —pues si tu quieres podemos ser amigos, nose que decirte boludo— Contesto un poco nervioso por cual fuera a ser la respuesta del contrario, —Bien, ahora somos amigos— fue lo ultimo que dijo Juan antes de colocar sus manos delicadamente sobre el cuello de Spreen, el cual rodeó las caderas del contrario con uno de sus brazos mientras que con su mano libre cerraba lentamente la puerta detrás de ellos para luego ahora si colocar ambos brazos rodeando la cintura del mayor envolviéndolo en un cálido abrazo.
Pov: Juan Juan se sentía seguro en ese abrazo y se sentía en paz, se apartó un poco para poder ver a Spreen a los ojos pero aún sin terminar el abrazo, observo cada parte del rostro del contrario, observo sus ojos color negro los cuales no se apreciaban del todo por las gafas oscuras que llevaba, observo sus orejas tan suaves, observo su nariz tan perfecta y luego se detuvo para observar sus labios, esos labios que por alguna razón en este momento tanto quería probar, estaba tan ocupado observando el rostro de Spreen que no se dio cuenta en que momento se había acercado tanto hacia el, estaban frente a frente mientras sentían sus respiraciones mezclándose igual que la última vez aunque esta vez Juan estaba despierto, se acercaba cada vez más a Spreen hasta que sus labios rozaron haciéndolo volver a la realidad y dándose cuenta de lo que estaba sucediendo, se alejó un poco de Spreen pero aún manteniendo el abrazo.
Pov: Spreen —lo siento— dijo Juan en un susurro casi inaudible, Spreen no podía creer que estuvieron a punto de besarse y el hecho de que Juan fuera quien se acercara a él primero le fue suficiente razón como para mandar todo a la mierda, apretó más su agarre en las caderas del contrario atrayéndolo hacia el para luego juntar sus labios en un dulce beso el cual Juan correspondió en seguida.
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