like i like you

115 34 5
                                    

El número al que intenta llamar se encuentra fuera de línea, deje un mensaje después del tono.

Luego de escuchar la voz programada por quinta vez una maldición brotó de sus labios, observó la pantalla con desdén que reflejaba el número de teléfono de Hoseok y sus múltiples intentos por dar con él, no lo veía hace dos días, apenas mantenían una conversación de más de tres palabras, incluso su mensaje enviado en la noche de ayer no había recibido respuesta, sentía que se volvía loco intentando descubrir que había pasado antes y después de la última vez que se vieron, qué fue lo que le hizo merecedor de este silencioso castigo, hasta se las arreglaba para no estar en casa cuando Jungkook decidía pasar a visitarlo.

El horrible vacío en el fondo de su estómago se hacía más grande con el paso de las horas, Hoseok no era del tipo que dejaba tirado a los demás sin una razón aparente y no era por ser presuntuoso porque realmente estaba seguro de eso, las veces que lo vió alejarse siempre traían consigo un por qué, no sólo de la noche a la mañana y menos con Jungkook.

Lo extrañaba, pensó mientras le daba el último trago a su cerveza finalmente consciente del ruido a sus espaldas, inundó sus pulmones con una larga bocanada de aire antes de ingresar en el club que estaba mucho más lleno ahora, en su camino a la barra notó varias miradas coquetas, teniendo en cuenta de que tal vez sea otra noche solitaria y aburrida podría conseguir alguien que le haga compañía, si su humor mejoraba claro, como estaba iba a terminar echando a cualquiera antes de que empiece la diversión. Encontró un asiento libre y pidió un mojito decidido a tener algo más fuerte que lo dejara lo suficientemente zumbado para no darle más vueltas al asunto, no estaba consiguiendo nada con eso más que sentirse miserable al respecto, sólo había peleado con él una vez en su vida y ni siquiera habían tardado en arreglar las cosas más de veinticuatro horas.

Esta vez ni siquiera hubo confrontación y simplemente tuvo que enfrentarse a una semana entera de migajas, viéndolo de lejos, intentando acercarse en vano, no le gustaba la sensación de perdida
que se estaba colando en su sistema.

Tomó un trago de la bebida dejando que el rico líquido ardiera por su garganta todo el camino hacía su estómago, sabía que tenía que tomar al menos cuatro de aquellos para sentirse al menos mareado, no solía emborracharse rápido, la gente lo comparaba con un barril enorme y de acero, su aguante podía ser sorprendente.

Mientras seguía allí un par de tipos se acercaron y tomaron asientos cercanos a los suyos, a su lado específicamente, no es que se sintiera atraído a ellos o tuvieran algo interesante, más bien era la conversación que mantenían, podía escucharla sin problemas puesto que necesitaban alzar la voz para escuchar al otro sobre la estruendosa música. Al principio decidió que iba a ignorarlos, hasta que las cosas tomaron un rumbo que amenazaba con hacer a su sangre arder, odiaba a esa clase de bastardos.

"En realidad no creo que Dan tenga problemas en dejarnos jugar con su conquista, el pobre chico esta tan borracho" comentó un rubio alto pero escuálido, bebía directamente de una botella de vodka y su mirada puesta en un punto justo en la pista de baile.

"No es que pueda detenernos tampoco, el idiota nos tiene miedo. Además mira a ese bombón, algo me dice que necesita ser bien usado, parece un jodido dios del sexo vestido así" el estómago de Jungkook se apretó y ni siquiera fue por la bebida, era el asco puro que estas personas le estaban provocando, ni siquiera les importaba recibir algún consentimiento, no, iban a tomar algo que no les pertenecía y con un carajo, no iba a dejar pasar eso.

Guiándose por las miradas de aquellos dos, finalmente dió con la persona a la que iban dirigidas las palabras morbosas y desvergonzadas, le costó un poco adaptar su vista a las cambiantes luces que iluminaban la multitud danzante y... Joder, el mundo podía ser malditamente pequeño a veces.

Un hombre que le doblaba el tamaño lo sostenía por detrás, fuertes brazos apretando la cintura delgada, la cabeza de Hoseok caía sobre el hombro de aquel mientras este dejaba besos en el costado de su cuello, cuando vislumbró una mano metiéndose bajo su camisa negra Jungkook ya se había dirigido en largas zancadas hacía él. Su mano salió disparada tomándolo del antebrazo hasta tenerlo contra su cuerpo, el tipo se sacudió en confusión y levantó la mirada con la intención de reclamarle pero lo que sea que haya visto en su rostro, fue suficiente para hacer que se tragara sus palabras y finalmente desapareciera entre la masa de gente, menudo cobarde.

Gruñó mientras tiraba de un muy torpe Hoseok, sólo se detuvo para pagar lo que consumió y así finalmente marcharse, los restos de alcohol o nicotina que había ingerido en la noche se desvanecieron, dejando en su lugar una persistente cantidad de furia y protección que no dejaba lugar para nada más, necesitaba llevarlo a casa, cuidarlo y alejar cualquier imbécil que planee aprovecharse de él, sólo recordar al par le hacía desear volver hacía el interior, encontrarlos y descargar cada ápice de su frustración en ellos hasta drenarse.

Justo cuando finalmente llegaron al estacionamiento, Hoseok se soltó de su agarre, lo vió tambalearse y fruncir sus ceño mientras lo veía con pupilas dilatadas.

"Vine solo, no necesito una niñera" soltó tras un breve silencio, las palabras arrastradas sólo hicieron más evidente su estado, Jungkook sonrió sin gracia.

"Si piensas eso, estas muy equivocado Jung, no pienso dejarte de esta manera aquí, nos vamos" sin esperar más respuestas, metió su mano en el bolsillo trasero del pantalón extrayendo las llaves de su moto, cerrando sus dedos sobre la delicada muñeca y de nuevo él se resistió, tuvo que contenerse para no gruñir en desaprobación, en ese momento desearía que Hoseok no se comportara como un niño.

"¡No! No puedes aparecer aquí y alejarme de la diversión sólo porque se te antoja, pareces mi padre y sabes que lo odio" Continuó forcejeando con la gran mano que lo sostenía, en su lugar Jungkook lo tiró de improvisto contra su pecho, y sabes que lo odio.

Lo odio.

Te odio.

Incluso ante la feroz ola de infelicidad que lo envolvió, encontró la forma de calmarse brindando una tensa mirada a quién se la devolvía con obstinación, lo vió abrir su boca de nuevo pero fue más rápido.

"¿Sabías que dos imbéciles estaban planeando abusar de ti? ¡Mírate! Ni siquiera puedes sostenerte a ti mismo, puede que sea desagradable para ti mi presencia, pero me importas, cuando estés a salvo te prometo que dejaré de ser un puto entrometido en tu vida" soltó las palabras con más fuerza de las que habría querido, lo vió encogerse y parecer perdido un momento, aunque era seguro que no había entendido todo lo que estaba diciendo, fue suficiente para calmarlo y acercarlo hasta la gran harley davidson que los esperaba al final de la cola de autos.

Sin más palabras de por medio, puso su casco sobre la cabeza castaña de Hoseok y le ayudó a subirse, luego hizo lo mismo ordenandole que se sostuviera de su cintura y para su sorpresa, lo hizo. Posteriormente hizo avanzar a la poderosa motocicleta sobre el asfalto iluminado, el viento soplando su cabello, ayudando a calmar una parte de sus emociones.

Lástima que no fue suficiente para cubrir el daño en su pecho.

𝖫𝖾𝗍 𝗒𝗈𝗎 𝖻𝗋𝖾𝖺𝗄 𝗆𝗒 𝗁𝖾𝖺𝗋𝗍 𝖺𝗀𝖺𝗂𝗇 | 𝗝𝗝𝗞 + 𝗛𝗦𝗞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora