15.: Jimin?:.

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Todos se sorprendieron bastante al verlo llegar, solo, tan lindo como siempre, pero solo, camino sin ánimo hasta la barra donde se acomodó para pedir algo de beber, tendría que estar bien entonado para hacer el show solo.

-Taehyung, hijo de tu putísima madre, de puro caliente me abandonaste- se quejó suspirando, trataba de estar tranquilo, pero su entrecejo mostraba lo irritado que se sentía.

-Qué cara traes Chandra- habló el joven que estaba esta noche a cargo del bar- y Kanu?-

-Ni me nombres a ese traidor- 

-Oh, se pelaron?-

-No, pero ganas no me faltan- el chico sonrió.

-Que te sirvo para que pases la rabia chico guapo?-

-Algo fuerte, por favor- el barman asintió y comenzó a preparar algo que fuera capaz de quitarle la rabieta al encantador chico sentado frente a él.

-Aquí está, disfrutado Chandra-

-Gracias- comenzó a beber mirando a su alrededor, cuál depredador buscando a su próxima presa, miro por todo el lugar y todos le parecían tan comunes, en su inconsciente buscaba a alguien parecido a Yoongi ojalá y de preferencia él - ya basta, corazón, te va a hacer sufrir otra vez que no entiendes- se dijo antes de dar un largo sorbo a su bebida.

Cuando la música comenzó, Jimin ya tenía al menos 4 tragos en el cuerpo, bailaba más suelto que de costumbre llamando más la atención, siendo los socios y amigos de kahn los más interesados en él, que no le perdían detalle alguno a las sensuales curvas del pelinegro.

 -Hasta cuándo nos harás esperar kahn- relamía sus labios mirando al menor moverse, esa sensualidad tan natural tenía al Hindú bastante loco.

-Dame un par de días más, en cuanto logre que firme el contrato, el muchacho será tuyo amigo mío-

-Si tú lo dices- enfocó su vista en el baile que el menor estaba mostrando, y su mente comenzó a imaginar muchos escenarios donde podía poner ese hermoso cuerpo de preferencia desnudo.

Eran casi las 12 de la noche cuando Yoongi apareció en el bar, había llegado mucho antes, pero no quiso entrar de inmediato, la idea no era poner nervioso al pelinegro, sí que le diera un poco de gusto verlo, camino entre la gente evitando mirarlo, aunque a mitad de camino se le hizo imposible, el menor estaba desatado bailando, no había parte de su cuerpo que no se moviera.

Se obligó a seguir su camino a la barra y desde allí darse el deleite de verlo, se sentía bastante excitado con solo verlo, solo dios sabía lo que pasaría, si el menor aceptaba pasar otra vez la noche con él, posiblemente haría lo que su amigo, cogerlo día y noche hasta que le jurara serle fiel el resto de su vida, se había enculado ya no había duda.

La música cambió a una más lenta y fue el momento que Chandra aprovecho para ir por algo de beber, muchos se le acercaron con la idea de invitarle algo, pero él solo los rechazaba, motivo, los vasos ya estaban servidos y eso no era buena señal, quien sabe qué droga tendrían así que solo pasaba de ellos.

-Dame algo que me quite la sed, pero que me mantenga ebrio!- grito al chico que solo sonrió al verlo, era raro ver a Chandra así, mezcla entre molesto y borracho.

-De inmediato- se sentó y esperó paciente su bebida.

-Y la calentura como te la quitas?- sintió la descarga desde sus pies hasta su cabeza al oír aquella voz, misma que le había estado susurrando al oído la noche anterior, mil obscenidades que le fue cumpliendo con el pasar de las horas- como te la piensas quitar Chandra- 

El chico del bar le dejó el cóctel, y miró risueño a quien estaba tras su espalda, y sin decir nada solo se fue a atender a los demás, tomó el vaso con toda la sensualidad que tenía disponible y lo bebió de la misma forma, pasando su lengua por sus labios cuando acabó, quitando los restos del licor.

-No sé, supongo buscaré quien me ayude con eso- tenía el corazón latiéndole a mil por hora, la sola presencia del mayor lo ponía, es estado idiota, sumado al alcohol en su cuerpo, eso se triplicaba, sintió aquella gran mano tocar su cintura desnuda, y el calor lo envolvió de golpe, mordiendo su labio inferior.

–Qué dices si te ayudo- aquel aliento caliente chocando contra la sensible piel de su cuello, lo obligó a cerrar los ojos, disfrutando aquella oleada de sensaciones que aparecen en él.

Dejo un beso, y disfruto del rico aroma que despedía aquella zona, misma que a pesar del sudor no era desagradable, el menor parecía cada vez más irreal, bien lo sabía él y el resto que no despegaba sus ojos con la mueca de molestia plasmada en ellos por su cercanía, el único al que chandra dejaba estar así de cerca, si solo supieran lo cerca que ha estado de él, de seguro no creerían.

-Yo Digo que...-

-Chandra puedo hablar contigo un momento?- Kahn llegó cortando el ambiente algo íntimo que se había generado entre ellos- solo será un momento- de forma inconsciente Jimin busco la mirada de Yoongi quien solo sonrió y asintió, él lo esperaba, claro que si, de él no se iría de ese lugar.

-Claro señor Kahn- se levantó y dio unos pasos tras kahn, miró una última vez a Yoongi quien sonreía de la forma más boba posible viendo al menos caminar otro deleite visual más con aquella ropa puesta, sonrió, volvió su atención al más mayor que estaba parado en la entrada del pasillo que llevaba a su oficina.

Algo se alojó en el pecho de Yoongi al ver a Jimin entrar a aquel lugar, una molestia misma que se acrecienta cuando dos gorilas se pararon afuera custodiando, se sentó en el mismo lugar donde había estado su capricho antes y espero, miraba cada tanto al pasillo aquel viendo que los dos hombres seguían donde mismo.

Y fue solo un segundo, uno en donde la mayoría que bailaba se fue a la barra a pedir de beber que Yoongi perdió visión de aquel lugar, cuando el mar de gente se alejó, noto que los gorilas no estaban, y más aún el tipo, aquel que había venido por Jimin salía junto con otro sujeto.

Esperó unos segundos a que el menor saliera, pero nada, y el malestar en su pecho se intensificó, se levantó rápido y antes que el tipo aquel se perdiera entre la gente lo encaró.

-Donde está Chandra!?-lo tomó del brazo y lo miró directo a los ojos, Kahn miro a Yoongi y sonrió.

-Se fue, se sintió mal y lo mandé con Wonho para su casa- imposible, pensó Yoongi él no perdió de vista la entrada de ese lugar y él menos jamás salió- si me disculpas tengo gente que atender, disfruta el espectáculo- siguió su camino dejando a Yoongi con un pesar incómodo en el pecho, sacó su móvil y buscó el número de Kook, algo no cuadraba en la historia del viejo aquel.

-Kook pásame a Tae algo paso con Jimin- porque no importaba cómo fuera el de ese lugar se iría con el menor, en segundos el móvil fue arrebatado de las manos de Jungkook.

~Que le paso a Jimin, gato!?-

-EL tipo ese que administra el lugar se lo llevo...-

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*Bollywood Bar*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora