Alpha War - Binwoo [ADAPTACIÓN]

Capítulo 5

"Sé que intentas mantenerte cerca, pero se te está escapando de las yemas de los dedos. Sé que intentas mantenerte cerca. Sí, no hay nada que pueda decir. No puedes retener mi corazón nunca más y estoy esperando que tus brazos caigan..."

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You Can't Hold My Heart
(MONSTA X)

☾

La casa de sus tíos siempre había sido un terreno bañado por la sombra, los grandes líderes Lee habían vivido en ese lugar desde que sus abuelos tenían memoria y aunque el lugar era tremendamente respetado por él, Dongmin no podía evitar seguir notando aquel escalofrío en su cuerpo cada vez que cruzaba la entrada.

Tras la estilizada verja de metal pintada de blanco, un jardín repleto de manzanos se extendía varios metros hasta las escaleras que llevaban a la entrada de la casa. Dongmin recordaba haber jugado con Dahee allí cuando ambos eran niños, les gustaba escalar las ramas y mordisquear las manzanas verdes más tiernas mientras parloteaban. La zona donde el verde de la naturaleza se presentaba con gracia, era probablemente la única parte que le gustaba de la residencia que los líderes de su familia utilizaban. Le parecía casi un milagro que el incendio no hubiese llegado hasta esa parte de la montaña.

La casa de los líderes Lee era realmente grande, con un recibidor en el que dos escaleras se abrían a los costados para dar paso a un enorme salón donde las cortinas azul cobalto caían con gracia sobre la galería de cristal, dejando pasar tan solo aquellos rayos de sol que eran necesarios durante el verano y siendo abiertas en el invierno con el objetivo de iluminar la casa con las grandes cristaleras que iban desde el suelo hasta el alto techo. Cuando era pequeño Dongmin solía sentirse impresionado al mirar hacía arriba, pues las enormes lámparas de diamantina creaban hilos de luz alrededor de las paredes de la gran sala. Ahora que era adulto, la belleza de esos detalles continuaba impresionandolo aunque no de la misma forma que años atrás.

El suelo de mármol rosado, los muebles antiguos o las amplias lámparas que colgaban del alto techo lograban que la estancia pareciese mucho más regia de lo que en realidad era a esas alturas. Y es que el paso de los líderes y el gusto de cada uno de ellos por la decoración había quedado grabado en cada ladrillo. La residencia ahora estaba en manos de su prima, y Dongmin confiaba en que ella podría apartar de las paredes esas imágenes que enfriaban el ambiente de la casa.

Tras los incendios los Lee se habían visto obligados a desprenderse de muchos objetos de valor para obtener el dinero suficiente para replantar. Sin embargo los suelos quemados seguían sin ser fértiles y la gente comenzaba a impacientarse en su manada. Y aún con todos los carísimos cuadros, inalcanzables lámparas y suelos de mármol se mantenían tan intactos como su tío había decidido. El sitio desprendía frío en muchos aspectos, ciertamente la temperatura era mucho más baja en el interior de la estancia, por lo que Dongmin se apuró a ponerse la chaqueta vaquera antes de caminar. Incluso si en el bosque las altas temperaturas del verano lo hacían tener sed, allí su piel se había erizado ante el frescor del amplio salón de invitados.