Chucky bueno.

Parte tres.

Llegamos a la habitación y Jake me sentó en un mueble, él se puso a buscar unas cosas en su mochila y yo me quedé observando, sacó un trapo y unas caja de curitas y se acercó nuevamente a mi.

– Ahora voy a limpiarte – dijo.

Empezó a frotar el trapo con mucho cuidado y delicadeza en mi cara, pasándolo por mi nariz y mi boca, me dolía un poco el contacto pero era soportable.

– Oye gracias por lo que hiciste allá, salvaste mi vida– dijo mientras me sonreía – Te volviste mi héroe.

– Solo hice lo que debía hacer – dije.

– ¿Y que sentiste cuando lo mataste?– preguntó.

– Entendí lo que vine a hacer – respondí.

El me sonrió y sacó una curita de la caja, eran curitas de Batman, que bonitas. Me puso la curita en una herida que tenía en mi mano y dio palmaditas en ella.

– Ya estás listo chico maravilla – dijo.

Me causó gracia que él dijera eso, así que le seguí el juego.

– ¡Santo hematoma Batman! El guasón me dió uno bueno– dije jugando yo también.

Su cara cambió  de alegre a triste, pasó lo mismo que con Lexy ¿Será que dije algo malo?

– ¿Dónde más te duele?– preguntó, pero su voz ya no era dulce como antes.

– Aquí – dije apuntando mi pecho y estómago.

– Bien – dijo.

Él sacó una botella de agua de su mochila y me la puso en el estómago, la botella estaba fría y eso me confortó un poco, pero Jake se alejó de mí y se fue a su cama.

– Jake – dije.

Pero él no me respondió, simplemente se dio la vuelta dándome la espalda.

– Jake... ¿Estás enojado conmigo?–

– No – respondió cortante.

Eso me pone muy triste, hace un momento Jake dijo que me quería ¿Por qué se porta así conmigo?

– Jake... Lo siento – dije bajando la mirada.

Él se volteó a verme, parecía confundido.

–¿Por qué?– preguntó.

– Creo que dije algo que te molestó – respondí.

– No, solo... Olvídalo – dijo.

Pero él seguía portándose raro conmigo, no se acercó a mi nuevamente y eso hizo que yo me desanimara mucho. De repente tocaron la puerta y Jake abrió, eran Lexy y Nadine.

–¡Pequeño bebé!– dijo Nadine corriendo hacia mí.

Ella me abrazó y plantó un beso en mi mejilla, también me gusta Nadine, es muy amable y cariñosa.

– Trevor no está – dijo Lexy.

Me pregunto quién será Trevor, no quise poner mucha atención a lo que Jake y Lexy estaban diciendo, solo escuché cuando Jake dijo que los salvé del grandote.

– Tranquilo bebé, ese hombre malo no volverá a lastimarte – dijo Nadine.

Ella volvió a abrazarme, sus abrazos eran más amorosos que los de Jake, mientras Lexy y Jake seguían hablando de quién sabe qué yo me quedé con Nadine.