capítulo 2

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Eidan

Despierto y lo primero que siento es que me duele la cabeza. Intento moverme pero no puedo, tengo a tres mujeres encima una morena otra pelinegra y una rubia.

¡JODER! Ayer si fue una noche loca.

Busco mi movil pero no lo encuentro. Salgo de la cama consumo cuidado de no despertar a ninguna de las mujeres y me pongo unos pantalones para luego salir del aquel cuarto.

Bajo las escaleras llego a lo que creó que es la sala. Lo primero que veo son vasos y bebidas enramadas en el suelo. Sigo analizando y mis ojos llegan hasta los muebles donde hay personas desnudas.

Que carajos paso ayer.

Para empezar ¿donde mierda estoy? ¿como llegue aquí?¿Que día es hoy?

Busco con la mirada un rostro familiar entre todos los presentes. Hasta que hallo a Nate mi mejor amigo es cabron de mierda. Se supone que el me cuidaría de no hacer algún desmadre, aun que en realidad no me arrepiento de hacerlo.

- Nate despierta

Le doy una cachetada fuerte pero Nate no reacciona. Lo quería hacer por las buenas pero creo que tocara por las malas. Lo empuje con brusquedad hasta que callo al suelo de golpe.

Desperto de inmediato y miro a todos lados desorientado para luego preguntar.

- ¿Que paso?

- Enserio que esa será tu única pregunta, ¿que paso? carajo Nate pensé que serias más original

- En donde mierda estamos Eidan

- ¿Enserio me preguntas a mi? Soy la persona menos indicada para esa pregunta ni siquiera se que día es hoy

Nate se levantó y cogio unos pantalones que estaban en uno de los muebles y se los puso.

En ese mismo instante la puerta fue abierta con brusquedad. Dejando ver a personas encapuchados con armas y chalecos antibalas con el signo de APDG y otros con MAF.

Algunos comenzaron a subir por las escaleras, otros despertaron a todos los que estaban allí y los arrodillaron y nos obligaron hacer lo mismo.

- ¿Quién de ustedes es Eidan Leblanc?

Pregunto una voz femenina

Alze la mirada y creo que le di a entender que era yo.

Se quito la capucha dejando ver a una mujer con el cabello castaño y unos potentes y raros ojos grises.

- Levantate - ordenó

¿Quien carajos era ella? y lo más importante ¿Como se atreve a hablarme así?

- ¿Quién eres tu? - pregunte amenazante

Ella solo me levanta con brusquedad y me trata de llevar hacia fuera.

- ¿Que estas sorda? te hice una pregunta - dije otra ves con mi vosz amenazante y tampoco hubo respuesta.

Ya estamos fuera me suelta y Giro para encararla.

¿Esta enana que se cree que puede intimidarme o dominarme a mi?

- Mira no se de donde eres o de donde habras salido creo que te estas confundiendo de persona

- Eidan Leblanc Astor hijo único, tienes veintiuno años eres heredero de la empresa de hoteles más grande de el país no eres para nada un ejemplo a seguir ya que siempre estas en fiestas, carreras ilegales y clubes -  firme con voz segura

¿Esta mujer quien era?

- ¿Quién eres?

- No te importa saberlo ahora camina

Volvió a darme un pequeño empujón para que caminara pero aun así no lo hice.

- A mi nadie me ordena y menos una mujer como tu - hable con voz seria - Yo no moveré un solo músculo por el echo de que me lo hayas orden...

No termine mi protesta.

La mujer me golpeó las pelotas y caí de rodillas de inmediato. Cogio mi cabello en una de sus manos para luego tirar de él hacia tras para que la mirara a la cara.

- Escuchame bien, tu a mi no me hablas así y mucho menos me amenazes, lo único que tienes permitido es mueve tu puto culo a la camioneta si no quieres que te lleve a rastras hasta ahí - hablo con voz seria y fría

¿Pero quien se cree para decir eso?

Me levante de allí y llegue hasta la camioneta con ella a mis espaldas.

La puerta se habría dejando ver a ¿mi padre?

- Eidan - dijo con voz seria

- ¿Papá? - pregunte extrañado - ¿Que haces aquí?

Puso su típica cara de irritado y hastiado así qué decidi no darle importancia.

- Sabes que olvídalo mejor dile a la esta mujer que esto fue un error

- Me podrías explicar que mierda haces aquien en el medio de la nada y porqué hace dos días no respondes mis llamadas y mis mensajes.

¿Llamada? ¿mensajes? de que habla. Nisiquiera se donde esta mi móvil

- Mi móvil se perdió y no se donde esta ni siquiera se que día es hoy - dije con simpliza y eso pareció molestarle

- ¡JODER!- grito

En ese momento me doy cuenta que se le acabo la paciencia.

- ¡TE EH DADO TODO Y HASTA EL SOL DE HOY NO TE A ECHO FALTA NADA. LO UNICO QUE PIDO DE TI ES QUE SEAS RESPONSABLE PARA QUE TE QUEDES CON LA EMPRESA. YA NO SE NI QUE MIERDA HACER CONTIGO ME TIENES A PUNTO DE UN PUTO Y JODIDO INFARTO!

Volvió a gritar y esta ves se veía furioso pero me daba igual.

- Te iras a la Alemania entraras a un entrenamiento básico militar - sentencia

- ¿Que?

Esta loco si piensa que iré Alemania para tomar un entrenamiento básico militar.

- Esta decidido te iras hoy mismo con la teniente Jones - dijo con seriedad señalando

Ni loco iré con ella

- No soy un niño de cinco años papá

- Haciendo este berrinche y tu irresponsabilidad si lo pareces

Esto tenía que ser una jodida broma.

- Sube - demando la castaña

Pense en contra decirla y decirle que no subiría a la camioneta. Pero estaba ya tan jodido que opte seguir su orden. Subí sin refutar ni decir nada y mi padre baja de la camioneta y eso me hace fruncir el ceño.

- Espero que le des su merecido Jones

- Eso haré señor Leblanc

¿Que carajos queria?¿torturarme?

La teniente entró a la camioneta y tomó asiento enfrente de mi. No la había podido observar con de tenimiento hasta ahora.

Tiene una cabellera castaña, su piel pálida, curvas bien puestas en los lugares correctos, pero lo más que resalta en ella son sus ojos ese gris potente y misteriosos.

El lío de Hela                           (Bilogia Líos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora