Detras de la sonrisa

440 87 6
                                    

...

Williams Shakespeare  decía que es más fácil obtener lo que se desea con una sonrisa que con la punta de la espada. En el caso de Pete su sonrisa podría conquistar un continente completo,  y hasta el mundo. Era como si todo comenzaba y terminaba cuando él sonreía. Ver su sonrisa era mi cosa favorita en el mundo. Aunque no siempre Pete utilizaba la sonrisa para resolver los problemas.

Pete tenía diferentes tipos de sonrisas, cuando estaba nervioso o se sentía tímido sonreía y soltaba una risita, cuando estaba cansado o triste sonreía pero su sonrisa no llegaba a sus ojos, cuando estaba feliz se podían ver sus hoyuelos y  sus ojitos se ponían chiquitos casi cerrandolos por completo, luego estaba la sonrisa de enojo, solo curvaba un poco los labios hacia arriba y en sus ojos casi se podía ver un fuego.
                       
Pete no era una persona que se enojaba frecuentemente o con facilidad, a menos que se tratara de mí,  siempre que algo me involucraba Pete parecía no tener ni un ápice de paciencia. Gracias al cielo nunca me ha dedicado una de esas sonrisas. Para mí solo eran las felices o las tímidas.

Cuando esa parte de la personalidad de Pete sale no le recomendaría a nadie que este ni a diez metros de la escena.  Es como si detrás de esa hermosa sonrisa se esconde alguien con el que no te deberías meter.

No recuerdo cuando fue la última vez que vi esa sonrisa en el hermoso rostro de mi Pete, hasta este momento.  Estamos en una parte poco concurrida de la universidad,  frente a mí se encontraban Pete y uno de mis compañeros de curso a quien le estaba sangrando la nariz, este me pedía perdón por no haberme ayudado con el proyecto.

-¡Oi, Pete! - saco un pañuelo de mi bolsillo y trato de presionar su nariz para que no siga sangrando, pero Pete me quita el pañuelo y se lo pasa al chico que lo toma de inmediato - Love, we've already talked about it!

El chico permanece con la cabeza agachada. Debería levantar la para que pare el sangrado.

-Cielo, tu compañero y yo solo tuvimos una pequeña platica, ¿verdad? - dice colocando una de sus manos sobre el hombro del chico - Vamos, cuéntale a Vegas lo que me dijiste hace un rato,  come on!

Levanta su rostro pero todavía desvía la mirada,  ya le he dicho a Pete que este tipo de cosas no son necesarias,  pero el insiste en que no está bien que las personas se aprovechen de quien solo está tratando de ser amable.

- Lamento haber dicho que eras tan tonto que sería fácil aprovecharse de ti. - Veo como Pete aprieta un poco más el agarre en su hombro - También lamento haber inventado que mi abuela murió para que tú hicieras todo el trabajo solo.

Siento pena por el chico, esto es algo que le había perdonado hace días, pero debí imaginar que para Pete no sería así. 

- Si me hubieras dicho la verdadera razón por la que no podías hacer el trabajo yo hubiera entendido,  no está bien que mientas sobre algo tan serio,  la próxima vez solo se honesto ¿sí? - Pete lo suerta y se coloca a mi lado - Ya todo está en el pasado no te preocupes,  y perdón por mí novio, él no quiso lastimarte,  déjame saber si quieres que te acompañe al hospital para que traten tu herida. 

El chico nego con la cabeza, levanta la mirada hacia Pete quien le hace una  seña indicándole que ya puede irse, no duda ni por un segundo, camina tan rápido que está casi corriendo. Dirijo mi vista a mi novio que ya está frente a mí haciendo un puchero,  se ve tan lindo que quiero morder sus mejillas, con él no tengo que contenerme así que eso hago.

-Cielo, ¿por qué me muerdes? - acaricia el lugar donde le di una pequeña mordida. - Eso no hará que me arrepienta de haberle partido la cara a ese imbécil.

- Ese es tu castigo por causar este alboroto,  creí que ya habíamos quedado en que no harías nada. - Pete solo vuelve a hacer otro puchero. 

- No, tú quedaste en que yo no haría nada, ya sabes que estás cosas no las puedo dejar pasar. - toma mi mano y la coloca en su mejilla - Love, nunca trataría de cambiar como tratas a los demás, amo como quieres ayudar sin esperar nada a cambio, pero entiende que yo no puedo ver como las personas se siguen aprovechando una y otra vez de tu buena voluntad, tú sigue siendo así de lindo con los demás y déjame a mí encargarme de las personas que no sepan agradecerte correctamente.

-Como el Yin y yang- Digo porque sé que a esto es que él se refiere,  Pete siempre dice que así somos nosotros, simplemente nos complementamos de manera tal que si a uno le falta algo el otro puede cubrirlo sin ningún problema. A match made in heaven. - No es justo, sabes que si me hablas así no podré regañarte. 

- jejeje, entonces no lo hagas y mejor dame un besito, te extrañé.  - empieza a dejar besos cortos en la palma de la mano que tenía sosteniendo su mejilla. - Necesito recargar mi batería. 

Empiezo a dejar besos por toda su cara. Beso su frente,  luego su nariz para continuar con sus mejillas y terminar en sus labios. Pete me sonríe y siente que toda la carga y el estrés del día deja mi cuerpo. 










                                                           

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

                                                            ......

Petricor (Vegaspete) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora