Eres un reto

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Me despierto con el sonido del despertador,abajo se escuchan ruidos de tazas y cubiertos.
Me estiro y decido ir a darme una ducha.
Pequeños recuerdos de anoche vienen a mi mente,no estuvo nada mal la fiesta.
Al principio no me gusto la idea de mudarnos a Raven,fue todo tan rápido que no pude asimilarlo.
Mamá dijo que era lo mejor,que nos vendría bien un poco de aire fresco.
No pude negarme ante su idea,ella es todo lo que tengo,además de Adam.
Daría mi vida por ellos,mi madre siempre estuvo a mi lado en los mejores y peores momentos de mi vida.
Siempre fue una luz en mi vida,sobre todo en los momentos que él estaba con nosotros.
De solo pensarlo siento una rabia que no puedo contener,muchos dicen que me parezco a el pero jamás seré como él.
Acá estamos a salvo y aunque me cueste lo hago por ella.

Entro en la cocina y mi  madre me recibe con su sonrisa típica,mientras me sirve sus wafles especiales.
Hablamos un poco de la escuela y le pregunto si esta nerviosa por su primer día en el buffet.
Mamá es una gran abogada,lo había dejado cuando era pequeño.
Pero ahora vuelve a retomar lo que tanto amaba.
Después de un abrazo,me despido de ella y me subo a mi auto.
Mientras manejó se me cruzan unos ojos azules,quien diría que podría ser tan divertido sacar de quicio a esa chica.
Recuerdo el primer día de clases cuando la encontré tan concentrada observandome,su cara lo fue todo una mezcla de verguenza y enojo.
Anoche al llevarla a su casa no estuvo nada mal, me sentí cómodo ante sus  preguntas curiosas.
Hace mucho no sentía tanta curiosidad  por alguien,no voy a mentirles estuve con varias chicas.
Pero ninguna me llamo la atención y me reto tanto como ella.
Quizás seas eso Summer un reto que quiero ganar.
Eres más de lo que muestras, de eso estoy seguro y voy a descubrirte.

Estacionó mi auto y en la entrada me encuentro con Adam, es mi mejor amigo desde que éramos unos niños.
Recuerdo la tarde que lo conocí,tenía 6  años era un niño miedoso entrando a su primer clase.
Nadie me hablaba así que estaba solo en un rincón,cuando apareció Eddie el niño típico grande que molesta a los más pequeños.
En todo colegio siempre hay un Eddie,estaba mirando al suelo pensando que con eso me haría invisible para el.
Pero no, se acercó y me quitó mi auto de la suerte.

En ese momento quise ser valiente y decirle que era mío,pero era solo un niño cobarde llorando.
En ese instante  se acercó a el Adam,mostrándose muy valiente y rudo.
Le exigió  que me devolviera mi juguete,recuerdo verlo tan grande esa tarde, se convirtió en mi héroe y mi mejor amigo.
Me enseñó a ser valiente,éramos hermanos sin tener la misma sangre.

Quien diría que ahora somos los chicos rudos del lugar,quienes se roban todas las miradas de las chicas.
La gente nos mira con admiración  y otros con cierto temor.

Recorremos el pasillo ante la mirada de todos,Alison y sus subditas nos comen con la mirada.
Pero a mi solo me interesa una,la veo unos casilleros adelante del mío.
Esta hablando con su amiga,de algo interesante porque veo la cara de sorpresa que pone Hanna,así se llama la loca de su amiga.
Esa chica si que tiene energía siempre está  gritando.
Paso a su lado y nuestras miradas se conectan,le tiro una sonrisa de lado mientras ella me da una mirada mordaz de vuelta.
Recuerdo que tiene mi chaqueta de cuero favorita y sonrio sabiendo que tenga una perfecta excusa para verla.

DificilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora