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[[Si pudiera pedir un deseo

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[[Si pudiera pedir un deseo...]]

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El dulce aroma del invierno había llegado, y con el, el fuerte frío que Rosé amaba, claro que; era la mujer mas friolenta del mundo. Su vida, había cambiado en menos de cinco meses, se había alejado de todos por completo, de sus amigas...y de su mejor amigo, su número ya no era el mismo, solo sus Padres y Jungkook sabían su número. Después de todo, si se iba alejar, tenía que hacerlo en serio y desgraciadamente, ellos eran parte de ella y Tae; no quería saber nada de el y gracias a Dios, no supo más de el, desde que se había ido.

Colocó leña en su chimenea, vivían alejados de la cuidad, cerca del villedo de sus Padres, ellos habían tenido esa hermosa casa de dos niveles en alquiler y para su suerte, estaba desocupada al ellos llegar. Se calentó sus manos y suspiró, había deseado tanto estar así, Jungkook era lo que tanto espero de Tae. Y ella sin pedirlo, se lo entregó; el era tan bueno con ella, que era casi irreal...paso tanto tiempo en las sombras, creyendo que jamás encontraría una salida a su miseria, solo viendo pasar el tiempo frente a ella...

Su mente divago y recordó con pesar, cuándo Tae se había vuelto distante y sus caricias habían cambiado a gritos. La primera vez...que el intentó colocarle una mano encima.

-. Señorita Roseanne, usted es muy hermosa, de verás, es un deleite para mi verla.- Uno de los tantos socios de su esposo, siempre era tan halagador con ella, se sonrojó y el sonrió, tenía cuarenta años, pero se veía jóven. - Usted, solo reciba los cumplidos que tanto merece.- Le dijo, para que se sintiera tranquila, a una poca distancia su esposo los veía, realmente alterado. Odiaba que ella siempre anduviera hablando con sus amigos, desde ese momento Tae, había decidido jamás volverla a sacar y que solo se mantuviera en su casa, como siempre debía estar; para solo el verla.

La madrugada había llegado y ella ingresó a su casa, cansada se había quitado sus tacones, entonces Tae habló: - Eres igual que todas las perras, siempre buscando atención de otros.- Escupió y quitó su sacó para pasar a su lado y empujarla, no era la primera vez que le decía así. Se giró hacía el y enojada lo encaro.

-. Por lo menos, ellos hacen lo que tu no, y créeme que disfruto tanto eso.- Sonrió y entonces el la había empujado y tomado fuertemente de sus delgados brazos, un dolor atravesó su estómago y lo tomó con dolor.

-. Repítelo, te cerrare la boca de una vez y las piernas de paso, para que no veas a nadie más que a mi.- Sus lágrimas cayeron y lo empujó lejos; sintiendo náuseas.

-. ¡Ya callate!- Había gritado, entonces el hizo algo que ella no esperó. Su mano estaba alzada, frente a ella, sus ojos miraron la mano que estaba apunto de caer, pero el; se detuvó. Tragó duró y lentamente bajó la mano.- No lo puedo creer, pero sabes, me esperó eso y más, de ti.- Se giró dispuesta a irse, pero entonces un sangrado corrió en sus piernas, sintió como algo había salido de ella, entonces lo miró...ahí en el suelo, era tan pequeño, tan indefenso...ella lo había ocultado, tenía dos meses ya...pero el ya no estaba.

[[SWEET LIES]] ☆ROSEKOOK ☆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora