[[SWEET LIES]] ☆ROSEKOOK ☆

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[[En las memorias]]
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La vida de Jungkook jamás fue perfecta, su pasado traía fuertes escenas, de parte de su padre, quien solo fue un mal padre. Y no solo un mal padre, si no que también, un mal esposo; su madre fue una mujer muy dulce y delicada, siempre llena de amor para el, pero todo eso se esfumaba cuando su padre aparecía en las noches; sus recuerdos siempre lo torturaban, al ver a su padre pelear una y otra vez con su Madre por falta de comida y por las mujeres que el descaradamente llevaba a su hogar y se acostaba con ellas en la sala, cocina.

Su madre, siempre lloraba en la cocina, mientras tenía dos trabajos, hacía limpieza en casas por la mañana y tarde; en la noche, se la pasaba en un supermarket; solo tenía leves recuerdos donde su madre le hablaba con amor y besaba su rostro, dándole mimos.

Pero, todo eso era borroso, se iba perdiendo poco a poco, deseo tanto estar más con su madre y poder haberla disfrutado aún más, ese calor que solo ella le daba, se había perdido; la falta que le hacía, lo llevó a estar con mujeres mas grandes que el, siempre buscándo ese calor, que a tan joven edad, se le había arrebatado. Tenía tan solo ocho años, cuándo la vio morir en una camilla, a causa de un cáncer terminal, uno que ya no tenía cura. La visitaba siempre, y le llevaba su comida preferida, también coloreaba sobre sus piernas, y ella lo veía feliz, de tenerlo a su lado.

-. Jungkook...- habló, y el pequeño alzó su cabecita, sonriendo ampliamente.

-. Si Mami.- Contestó, y se acercó más a ella, para abrazarla, el dulce aroma que ella soltaba, calmaba sus temores, Jungkook amaba demasiado a su Madre.

-. Prometeme, que tendrás a una mujer en tu vida, aún mejor que yo.- Jungkook, movió su cabeza a un lado, sin comprender, pero luego hizo gesto de asco.

-. No Mami, tu eres mi única Mami.- Asintió y abrazó a su madre.

-. Jungkook. - Se rió y acarició su cabello.- Créeme que no siempre querrás estar con Mamá. - Jungkook negó.

-. Yo, siempre quiero estar con mi Mami. No quiero a nadie más. - Sonrió ampliamenteal escuchar aquello, y besó su mejilla regordeta.

-. Pero, algún día, si te casas...que sea alguien aún mejor que Mamá. ¿Me lo prometes? - Jungkook lo pensó y asintió.

-. Esta bien Mami, te lo prometo.-

Después de eso, bajó del regazo de su madre, pues ella dormía y salió de su habitación para ir a su casa, pero al estar afuera, choco con un pequeño cuerpo. Sus crayones se desparramaron y el hizo puchero, sin embargo, la otra persona también se agachó para ayudarle.

Levantó su rostro y no podía creer lo que veía, era un Ángel; el pequeño Jungkook, jamás le había atraído a otra persona del sexo opuesto y al ver aquella niña, con su cabello largo y negro, los ojos más bellos, incluso más que su Mamita, no pudo dejar de verla.