Capítulo 10 - Concurso De Príncipes

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Un nuevo día llegó, pero esta vez no parecía ser rutinario, Jisung lo había planeado con antelación y estaba muy emocionado al respecto.

Lily le sugirió que almorzaran juntos y Jisung no tuvo ningún problema en aceptar, en especial porque la rubia le había comentado que estuvo horneando postres y le gustaría que él sea el primero en probarlos.

Por otra parte, al terminar la escuela debía ir a la biblioteca para recibir la sorpresa de Félix, no tenía pistas sobre que era, lo cual lo entusiasmaba aún más La primera clase por la mañana era de química, a Jisung no le disgustaba ni le parecía aburrida, de hecho incluso podría decirse que había muchos ejercicios que le resultaban divertidos.

Oye Seugmin — El mayor susurró, distrayendo al contrario de su concentración en la clase.

¿Qué crees que Felix esté preparando para mí? — Después de unos días conviviendo juntos, ya era común que Jisung le comentase al peli negro sobre su vida, aunque este no lo quiera.

¿Yo porque tendría que saberlo? — Respondió rápido mientras volvía a su escritura.

—- Vamos, si tú pudieses regalarme algo, ¿Qué sería? — Volvió a preguntar, siendo aún más insistente.

Nuevos amigos — Seugmin respondió riéndose por lo bajo.

No seas cruel, dimeeeee — El pequeño le dio un ligero golpecito e hizo un berrinche como un niño.

Aún estamos en clase no hagas tanto ruido — El peli negro miró al profesor que por suerte estaba distraído — Si me viese en la obligación de darte un regalo, primeramente tengo que conocerte un poco mejor y tener en cuenta tus preferencias, pero por ahora no lo sé

Eso es aburrido — Jisung se recostó en la mesa haciendo un puchero, siempre Seugmin se comportaba demasiado serio con él.

El menor, al ver la actitud infantil, tuvo que ceder a sus caprichos — Te regalaría un peluche, supongo, son lindos y tú también lo eres

Al escucharlo Han se levantó emocionado y lo miró directamente con una sonrisa — ¿Crees que soy lindo?

Es la única razón por la que soporto que seas tan ruidoso — Contestó Seugmin con sinceridad y volvió a lo suyo Jisung no sabía si era un cumplido o una ofensa, pero sea como sea, obtuvo lo que quería y se sintió bien, por lo que dejaría al menor tranquilo, lo quedaba de la clase.

La mañana pasó lentamente y el pequeño chico se sentía cada vez más impaciente, deseaba reunirse con Lilly para al menos distraerse un poco y cuando por fin llegó la hora de almuerzo, Jisung salió de su salón encontrándose con la linda chica en la puerta.

Ya estás aquí Ji, ¿Cómo estás? – Lo saludo muy dulcemente.

¡Muy bien! Gracias por venir por mí — El mayor agradeció y se dirigió con la rubia al lugar donde siempre almorzaban, ese momento fue un tanto incómodo, pues los demás estudiantes murmuraban con envidia sobre Lilly.

Ambos salieron de la escuela, y una vez llegaron a "Flor de Lirio" se sentaron en aquella hermosa banca, aprovechando la comodidad, la chica sacó del interior de su mochila una lonchera llena de postres, y en cuanto Jisung percibió aquella repostería, sus ojos comenzaron a brillar.

Lilly sonrió dulcemente notando la emoción del contrario — Oye Ji, ¿Cómo lograste que los chicos te dejaran estar a solas conmigo? — Preguntó la rubia curiosa al no ver ni rastro de sus mayores.

Jisung dejó de mirar la lonchera y agitó su cabeza — Bueno, en realidad yo también estoy sorprendido, solo les pregunté y aceptaron naturalmente, verás hoy en la mañana...

Jisung Es Perfecto ➻ Minsung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora