Shadow - MALEC

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— Amor tienes las manos frías — se quejó el pelinegro al sentir las manos de su novio tocar su torso sin pena alguna.

— Entonces calientalas, ¿quieres? — susurró cerca de su oído mientras lo abrazaba e inhalaba profundamente su suave aroma.

El contrario sonrió divertido y despacio se dió la vuelta quedando frente al castaño — Es lindo poder dormir junto a ti

— Tu eres más lindo — besó con dulzura su frente y suspiró profundamente — No sabes lo que daría por despertar así cada día — susurró triste.

— ¿Qué nos está deteniendo? hay que hacerlo — suplicó en un lindo puchero que demandaba atención.

— ¿Tú crees? — sonrió tocando su mejilla, pequeña y rosada debido al calor que había entre ambos — ¿Y si te cansas de mí algún día?

Vió al contrario fruncir el ceño molesto — Nunca podría cansarme de ti, espero que lo sepas — con cuidado subió al regazo de su novio y se sentó en su abdomen bajo — No soporto más esto

— Amor, pero fui tu idea — acomodó ligeramente el cabello del contrario — Ya sabes ... estar de acuerdo con ellos.

Alec se removió un poco sobre su novio pensando en lo siguiente que diría, su novio tenía razón. Estaba a punto de hablar cuando sintió al menor removerse bajo él y cerrar los ojos de golpe — ... Magnus? ¿Te sientes bien? — se agachó y miró asustado al castaño.

— S-si, solo... ahh — abrió ligeramente su boca — deja de moverte así, aún estás encima de mi — miró desde abajo a Alec y pudo notar una sonrisa maliciosa en su rostro. oh no

— ¿Te refieres a hacer esto? — movió lentamente su cadera creando un vaivén con intención de molestar al menor — ¿Se siente bien amor?

— Y-ya Alec — gimió bajito intentando detener el movimiento — No me hagas ...esto — sintió una mano traviesa recorriendo la piel cerca de su entrepierna.

Alec estaba decidido a ir más allá cuando su celular sonó en la mesita de noche, asustando a ambos. Que buena suerte

Dejo un beso en el rostro sonrojado de su novio y bajó de él. Tomó su celular y sin pensarlo presionó el botón rojo volviendo a dejarlo en su lugar.

Su madre estaba equivocada si creía que volvería