Arte y forma

1.2K 116 18
                                    


Y puede que todo este enrevesado tema del amor platónica sea una obra de arte creada por nosotros mismos, donde tomamos prestadas las bases de la creación de esculturas, o de cuadros.

Vamos dando forma poco a poco, como si se tratase de una masilla blanda de arcilla de la que poco a poco, mediante imágenes, lenguaje, pensamientos, deseos, sensaciones e ideas, creamos nuestra propia y simple obra de arte, guardándola en los rincones de nuestra mente. La tanteamos, la esbozamos y la probamos una y otra vez hasta que conseguimos el resultado que esperamos.

¿Es el cantante al que visitas en su concierto, la persona que cuenta chistes graciosos en tus paseos por la playa? ¿Realmente sabe dar la vuelta a las tortitas en el aire mientras tararea shut up and dance? ¿Es cierto que te abraza cada instante que lo necesitas? ¿Qué te sorprende cada tarde con un ramo de rosas en su mano?

¿Es así esa persona realmente o es un producto de tus deseosas ideas susurrándote lo que buscas?

Pues al final el amor platónico es la idea que has creado de esa persona, que te mantiene cuerdo durante los momentos en los que decías no volver a creer, pero que en algún momento sabes que debes abandonar.

No lo conoces en realidad, no entablas una conversación profunda con él, pero aún así lo amas, aún así te enamoras perdidamente sin siquiera saber a qué huele el perfume que se aplica cada mañana.

Te enamoras de la idea de.

Sientes predilección por las ideas creadas, esas mismas ideas que tú has fabricado y organizado para convertirse en la personalidad que has ligado a ese cantante.

Todas ellas nacen de ti. Te has enamorado de tus ideas.

Por lo tanto, ¿Quiere decir esto que te enamoras de ti mismo?

Si has sido capaz de crear la idea de amor perfecto, disfrutando con cada pensamiento y cada sensación imaginada, quiere decir que, escondido en tu interior, esa idea, ese amor perfecto, es real y sobre todo posible.

Esa capacidad de amar está dentro de ti, pues lo que esperas vivir, las playas que deseas visitar de su mano, es lo que tú mismo estás dispuesto a dar.

La idea del amor es tu idea del amor, por lo que, respondiendo la pregunta anterior:

Efectivamente, al crear cada una de esos pequeños pensamientos, te enamoras un poco más de ti mismo y de tu propia idea de amar.

Tu amor propio, es en efecto, el amor de tu vida ¿Y qué hay más bello que amarse a uno mismo?

la belleza del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora