𝙏𝙚𝙣: 𝙎𝙤 𝘼𝙢𝙚𝙧𝙞𝙘𝙖𝙣

12 0 0
                                    

Esto no era justo. Para nada.

Heeseung se la pasaba todo el día diciéndole lo bonita que es usando su ropa. Después de su conversación, todo era más cercano y salían casi todos los fines a citas.

Los fans le habían tomado varias fotos pero no le interesaba. ¡Incluso fueron a una cita doble con Olivia y Luis!

Dios y cuando se tomaban de la mano al caminar, podría jurar que el infierno podría ser frío. Y era tan detallista y dulce.

—¡No es justo! ¡No tiene derecho a hacerme sentir así!

Caminaba de lado a otro estresada. Olivia, Conan y Kyujin estaban divertidos al verla así.

—¿Así cómo?—preguntó la australiana—¿Enamorada?

—¡No!—tomó su cabello entre sus manos y luego sobó su cara con desespero—No sé, tal vez ¡Es que es tan bueno conmigo así de la nada!

—¿De qué manera?—esta vez Olivia interrumpió.

—Se ríe de mis chistes tontos y me da flores y me dice "eres tan americana"de una manera tan cariñosa—explicó—y parece sacado de un poema perfecto romántico. ¡Y juro que cuando me mira le brillan los ojos y no puedo parar de hablar de él todo el rato que aburro a la gente y siento que podría casarme con él sí sigue.

—Por Dios, estás enamorada de él—Conan rió.

—Claro que no.

—Claro que sí.

—¿Sí?—preguntó y los tres asintieron.

—Te brillan los ojos y cuando sonríes—Kyujin buscó una palabra par describir todo—No sé te vez tan...feliz y tan cómoda.

Ese era el problema. Los fans y su carrera, ella quería llegar a la cima y ser exitosa, pero si su relación interviene en sus planes no quiere ponerse a escoger.

Él siempre le dijo que quería una vida simple pero Hannah no. Le gustaba su ritmo, esa vida apresurada y de fama era lo que ella quería.

Solución.

Ignorarlo. Dos días.

Dos horribles y solitarios días. El hecho de sentirse algo decaída sin él no era bueno, su felicidad no podía depender de una persona. Pero se sentía tan bien.

—Odio esto.

Murmuró enojada y su alarma sonó. Sábado 8 de la mañana tenían que comenzar con los preparativos de la quinceañera.

Kaori ya estaba con el peinado hecho cuando llegó al salón. Le pusieron unas extensiones para que el peinado saliera y pusieron la corona con toques rojos. En lo que maquillaban, las demás comenzaron a alistarse también.

—Te ves preciosa mi niña—la abrazó con fuerza, algo emocional de verla crecer. Todos lo estaban.

Mucho se habían enterado dela celebración y se esperaba que fuera la fiesta del año con lo mucho que Suki se había esforzado.

Salieron del local y sin darse cuenta ya habían pasado 4 horas para alistarse. El hermano mayor de Kaori llegó y las chicas no pudieron evitar pensar en lo lindo que era.

Se cambió a su vestido y comenzaron a llegar las damitas y sus ¿Cómo era la palabra que dijo Suki? ¿Chambelanes? Lo que sea, sus amigos y eso.

Hannah miró llegar a Heeseung y su grupo y automáticamente se concentró en acomodar otras cosas para que no se den cuenta de que estaba ahí.

—Hola.

Se quedó quieta—Oh, llegaron, que bueno nos vemos.

Trató de salir huyendo pero él tomó su mano y la paró. —¿Podrías dejar de ignorarme?

—¿Ignorarte? No te estoy ignorando—rió nerviosa—Bueno ahora sí te voy a ignorar, pero no te lo tomes personal, estoy muy ocupada.

—¿Ignorando mis llamada y mensaje?—se le veía molesto—entiendo que puedas tener días malos y ocupado, pero me preocupé cuando no respondías, no hice nada malo para que te enojes?

—No estoy enojada.

—Entonces dime la razón, porqué si no es esa no sé cuál será—se cruzó de brazos.

No estoy enojada, solo creo que me estoy enamorando de ti. Creo que te amo y eso me aterra porque queremos vidas diferentes y no quiero que salgamos lastimado y no quiero que pases la barrera que justamente creé para que esto no pasara porque me vuelves loca. No hay forma de decirle esto a alguien sin que salga asustado.

—Eso creí—asintió ante el silencio y se fue con el resto. Hannah hizo una pataleta y se cruzó de brazos. ¿Por qué todo es tan complicado?

—Wow.

Kaori salió con el vestido ya puesto y todos se habían quedado boquiabiertos. El vestido rojo era brillante y perfecto.

Al sentir esa incomodidad entre Eunchae y Kaori las dejaron solas. Los invitados comenzaron a llegar y Hannah estaba recibiéndolos.

La ceremonia comenzó. Hicieron toda la tradición, bailó con su hermano y al llegar el baile padre e hija, Kaori se quedó ahí esperando. La mesa de su familia habían dos sillas vacías. Su hermano mayor salió en busca de sus progenitores.

El rostro de la joven, lleno de lágrimas rompió su corazón. Hannah se paró y con una sonrisa, la abrazó para bailar—Te tengo. 

Las demás se unieron menos Maia, que el doctor le recomendó no agitarse mucho, ni estar parada mucho rato. Heeseung se acercó y los dejaron bailando. Luego de todo la emotiva escena el dj cambió a otro tipo de música y el centro de baile se llenó. 

—Gracias por todo lo que hacen por Kao—Haruki se sentó junto a ella, dándole un mojito—Me alegra que tenga una familia cuando yo no estoy.

—No te preocupes, haría todo por ella—sonrió al ver a la cumpleañera riendo con sus amigos. La iba a proteger hasta el día que se muera, no iba a dejar que nadie le haga daño. 

—¿Bailamos?—el joven le extendió la mano y Hannah asintió. Pudo sentir esa pesada mirada sobre ella y no tuvo que voltear para saber quién era. El dj parecía estar en su contra, porque puso Shape of you. Era una coreagrafía que habían armado del aburrimiento y fue inevitable. 

Bailar juntos era cómo una explosión de la química que había. Al parecer a Heeseung se le pasó el enojo y sonrieron. Terminaron abrazados, cambió la música a una más latina y el chico habló. 

—Podemos pasar un buen rato ¿no?—estaban tan cerca que esa tensión volvió—Si deseas despúes podemos enamorarnos. 

—Paso a paso—sonrió—si no la cagamos, de eso estoy segura. 

<3

Si le hubieran dicho que conocería a un chico insoportable y lindo, que al final del día terminaría entre sus sábanas, mirándolo dormir tan pacíficamente. Se hubiera cagada de risa.

Pero ahora, mientras acariciaba su cabello mientras Heeseung estaba abrazándola, era un sentimiento extraño. Imposible. 

No podía. Le aterraba y gustaba el hecho que estaba comenzando a quererlo...o amarlo.

Esto no podía estar pasando.

Se había enamorado.



𝐌𝐢𝐝𝐧𝐢𝐠𝐡𝐭 𝐑𝐚𝐢𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora