SHREK (FANFIC)

CAPÍTULO 1

                        EL MENSAJE

La vida de casados de Shrek y Fiona junto a sus hijos andaba bien. El pantano había crecido, ya que las platas secas que habían a los alrededores se transformaron en un montón de flores hermosas.

Tenían una pequeña rutina, la cuál era despertarse, comer, jugar un poco y luego dormir.

Un día de esos, la convivencia y paz de los ogros fue interrumpida por unas trompetas.

Shrek salió a ver de qué se trataba. Y no era nada más ni menos que un carruaje del reino de Muy Muy Lejano, el cual traía un mensaje muy importante para esta pareja.

Uno de los guardias se bajó, y leyó el extenso pergamino que tenía entre sus manos. Decía:

"Queridos Shrek y Fiona, necesitamos de su ayuda. El reino está siendo invadido por una nueva amenaza. Una hechicera está transformando a todo el pueblo en animales y plantas. Incluido en monstruos. No tarden en llegar".

Atte: El rey y reina de Muy Muy Lejano.

Al oír esto, los ogros decidieron regresar al interior de su casa, a discutir el tema.

—Fiona, no estoy seguro de ir —con una cara de preocupación.

—Shrek, mi madre y mi primo necesitan de nuestra ayuda —con una cara seria.

—Lo sé. Pero es arriesgarnos.

—Lo tenemos que hacer, porque eso hubiera querido que hagamos mi padre.

—Pero ¿Quién cuidara de nuestros hijos? .

—Los podemos llevar, y mi madre los podrá cuidar.

—Bueno si eso quieres —con una sonrisa—. Entonces alistaré las cosas.

Tan pronto como lo dijo. El ogro acomodó todas sus cosas en el carruaje en forma de cebolla. La princesa puso en un baúl todos los juguetes de sus hijos, ya que los pequeños ogro eran muy juguetones, y durante el viaje estarían distraídos.

Después de terminar con las cosas que necesitaban. Emprendieron el viaje al reino.

Para Shrek era difícil manejar un carruaje, porque la mayoría de las veces, un chófer con experiencia en carrozas lo hacía por él.

El ogro tenía algo de dificultad al tener equilibrio mientras estaba sentado.

En el interior de la carroza, los bebés ogro estaban demasiados inquietos. Fiona les dió todos sus juguetes, pero ellos ya se aburrieron de estos. A lo que la princesa les entregó unos libros para colorear que ella misma había hecho en el pantano.

En ese momento una gran brisa vino del cielo. El ogro al sentir eso, inclino su mirada arriba. Y se llevó la sorpresa de que era Burro junto a su esposa dragona y sus hijos híbridos, quien estaba camino a visitarlos.

Entonces Shrek gritó para que lo escuchará.

—Burro, ¿Como has estado?

—Shrek ¡¿Eres tú?!

—¡Claro que si amigo! —riéndose.

—Estaba viniendo a visitarte —con una gran sonrisa—. ¿Pero a dónde te diriges?

—Me dirijo al reino de Muy Muy Lejano.

—¿Otra vez?. No que pásate malos momentos ahí.

—Lo tengo que hacer por Fiona y los reyes.

—¿Donde está la princesa?

—Esta dentro de carruaje. No creo que te escuché, porque mis hijos son muy ruidosos.

—Bueno. ¿Será que te puedo acompañar?

—Claro, no necesitas decirlo.

—Bueno entonces vamos.

La dragona cambio de dirección hacia el reino.

Estos dos amigos se habían encontrado después de mucho tiempo, ya que no se habían visto desde que derrotaron a Rumpelstilskin.