Anhelado

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Sus ojos cafés se abrieron lentamente por la luz increíblemente blanca, parpadeo un par de veces hasta que se acostumbró a la luz incandescente, miro la ventana un momento buscando ubicar el lugar donde se encontraba, sintió un mareo la cual la hizo sentarse un momento.

- ¿Alex te encuentras bien? - Alex intentaba ubicarse donde se encontraba, la blancura del lugar y el olor a medicamentos le indicaba que se encontraba en el cuarto de algún hospital, Vázquez la miraba con preocupación

- ¿Qué hago aquí? - Pregunto colocando su mano en su rostro intentando que su cabeza no diera vueltas.

Miro como Vázquez se mantuvo en silencio un momento antes de dar una respuesta, estaba un tanto abatida al decir la verdad, estaba preocupada por su amiga, no espero que su consejo de descubrir la verdad la pusiera tan mal, al no recibir respuesta alzo la ceja esperando que continuara.

- Tuviste una crisis...- Alex la miro atentamente procesando la información. - No entiendo que sucedió, estaba trabajando cuando de repente me llamo Walter diciéndome que estabas muy alterada, inmediatamente te trajo aquí, te dieron un tranquilizante y...

Dejo de escucharla al sentir como su cabeza dolía, intento recordar cómo es que llego aquí cuando los recuerdos del parque la inundaron haciendo que las lagrimas rodaran por sus mejillas, sus puños se cerraron en torno a la sabana mientras sus labios temblaban.

- Soy una persona horrible. - Soltó abrumada mirando hacia abajo. - Conozco a Sam, realmente la conozco...incluso tuvimos una hija. - Sus ojos se llenaron de lagrimas de nuevo al recordar a su pequeña...su hija

- Eso no es posible.-. Su respiración paro al escuchar a su amiga, estaba incrédula por la información recién escuchada. - ¿Acaso ya recuerdas? - La pelirroja negó con la cabeza

- La bebe que trae, tiene muchos rasgos míos, mis ojos. - Cerro los puños de nuevo, demonios sintió algo verdaderamente fuerte jalar de ella, un tipo de lazo que la unía a la pequeña, no era simplemente por sus ojos. - Ella no me dijo nada sobre nuestra hija porque sabía que yo negaría la maternidad de la pequeña pensando que era otra forma de chantajearme. - Llevo de nueva cuenta su mano a su mejilla tratando de mitigar su llanto. - Soy una persona horrible.

- Dios mío. - Murmuro la castaña. - ¿Tu padre y Maggie sabrán de esto?

- Lo dudo. - Contesto enseguida. - Tal vez solo sabia sobre Samantha, yo seguramente empecé a salir con ella para molestarlo, pero ahora...- Cerro los puños, no podía creer que hiciera algo tan ruin, jugar con una persona simplemente por beneficio. - Tenemos una hija y no pude escuchar si quiera su lado, la desprecie e incluso me burle de ella. - Se encogió de hombros de repente sintiéndose cada vez más pesada. - ¿Por qué lo hice? No quiere que me acerque a la niña. - Sintió sus manos convertirse en puños. - Yo debería cuidarla, debería ser su mamá de verdad. - Volvió a llorar sintiendo como su amiga la abrazaba.

- Tranquila...tenemos que aclarar todo. – Alex negó una vez mas con la cabeza

- Necesito que todo esto termine, necesito hablar con mi padre y con Maggie, ella necesita saber con qué tipo de persona esta casada...pero sobre todo necesito conocerme a mí misma. - No podía seguir viviendo en una mentira, iba a hacer las cosas bien a partir de ahora.

En otro lugar se encontraba una castaña con los puños cerrados, no podía dejar que Alex se acercara a su pequeña, ella era su todo y no iba a dejar que la ilusionara para después fingir que no la conocía y despreciarla, la miro dormir ajena al drama que los adultos tenían.

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⏰ Última actualización: Jan 12, 2023 ⏰

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