un buen recuerdo

0 0 0
                                    

                           Capítulo XXXIV
                        Mi amada familia.

Narra meliza:

Los días iban pasando, en el medio varias discusiones sin importancia con mis primos, aunque en esos días no hable en ningún momento con mis padres, este era el último día e íbamos a desayunar todos juntos.

Nadie hablaba, todos estaban más ocupados comiendo o tratando de no iniciar una pelea, Angus parecía estar de muy buen humor esa mañana, tanto que la sonrisa que tenía no se borraba de su cara con el pasar de los minutos.

Ninguno sabía el motivo de la felicidad repentina del mayor, pero tampoco ninguno se atrevía a hablar, hasta que mi tío Héctor se atrevió.

Héctor: abuelo, ¿Podemos saber el motivo de tu felicidad? -- dijo tratando de sonar amable --

Angus: bueno, planeaba hablarlo en privado, pero me gustaría que Meliza pase las vacaciones conmigo, planeo hacer un viaje por varios países del mundo y necesito un acompañante -- dijo con una sonrisa de oreja a oreja -- me he divertido mucho con la compañía de meliza, así que me gustaría que ella viajará conmigo -- dijo para finalmente verme a ti -- ¿Tu que dices?.

Antes de que pudiera responder, mi madre muy enojada hablo primero, parecía no estar de buen humor hoy.

Jessica: ¡NO!, Meliza es muy pequeña para viajar por el mundo, aparte tiene estudios que atender y una familia a la cual ver, no puede ir -- dijo enojada --

Angus: lamento informarte Jessica, que no pedí la opinión de ustedes, sino la de meliza -- dijo con total sinceridad --

La mirada penetrante de mi madre se clavo en mi, aparte de todas las miradas de esa mesa, me quede helada sin saber que responder, mire a mi madre, la cual no parecía muy contenta, pero mi respuesta fue un rotundo SI, hacía tiempo que quería viajar más y no solo quedarme en casa.

Luego de eso el desayuno siguió como estaba antes, solo que ahora la mirada de ira de mi madre estaba plantada en mi y no parecía que quisiera darme un abrazo y un beso en la frente.

El primero en irse fue Kenny, que tenía que volver cuanto antes a su escuela para poder estudiar para los próximos exámenes que tenía, luego fue Alexandro seguido por kenner, luego de mucha incomodidad, me levanté de la mesa al mismo tiempo que Marcus para irnos juntos, no quería estar sola con mi madre, aún que a su ves se había levantado valentin, el cual se fue sin siquiera despedirse.

Luego de que ambos nos despedimos de los que quedaban en la mesa nos fuimos caminando juntos hasta donde estaban nuestras habitaciones.

Marcus: parece que tu madre anda algo alterada -- dijo mientras volteaba a ver hacia atrás --

Meliza: lo se, pero parece que solo quiere que esté en casa aburrida estudiando -- dije molesta -- no es lindo para mí estar encerrada todo el verano, con visitas muy de ves en cuando de solo uno de mis amigos.

Marcus: tu padre tampoco parece contento, nos esta mirando algo.. enojado por así decirlo -- dijo para voltear a verme asustado -- ¿Y si creen que soy una mala influencia? -- dijo exagerando su tono de voz --

Meliza: es verdad que eres una mala influencia -- dije con una sonrisa --

Marcus: si lo se, pero no quiero que ellos lo sepan -- dijo mientras se cruzaba de brazos -- por cierto, ¿Que harás cuando llegues? -- dijo con un tono voz curioso --

Le estaba por responder, pero ví a Valentín que parecía estar hablando con un vidrio que estaba tirado por ahí, me quedé quieta mirándolo hasta que ví una cara en dicho vidrio.

♡ amor de Adolescentes En Hogwarts ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora