Desde siempre ha sido así.
Algunos humanos nacen con más suerte que otros, puede tocarte una familia rica o puedes nacer siendo un bio-potenciado con habilidades especiales. Yo no tuve mucha suerte que digamos...
Mi madre vivió en la calle desde antes de que naciera, nunca me llegó a contar nada sobre mi familia ni de porqué estábamos así, solo era una realidad que parecía estar impuesta por Dios.
Mi madre solía quedarse en la calle de siempre pidiendo limosna mientras yo disfrutaba de un privilegio que no creía merecer: Rinku, mi mejor amigo, él también era pobre, además de huérfano, así que técnicamente estaba peor que yo, pero siempre podías ver a Rin con una sonrisa en la cara, tenía un gran corazón...
Rin y yo solíamos ir a un rincón de la calle a jugar con una pelota de espuma que robamos de un basurero, eran buenos tiempos. Rin siempre decía que alegrara la cara, que mi madre recauda todo el dinero posible por mi futuro, para poder ir a la escuela... Recuerdo que en esos tiempos me hacía bastante ilusión eso de hacer amigos y aprender cosas nuevas, pero supongo que era solo una de las causas de la circunstancias de mi vida. Rin soñaba con ser un héroe vigilante, un bio con grandes poderes que ayuda a la gente desde las sombras, algo claramente ilegal, pero yo no soy quien para juzgar eso... Nunca pudimos hacernos la prueba para saber si éramos o no bios así que todo dependía de la suerte, y esa suerte me sonrió un dia.
Una vez mientras esperaba a Rin en el río, traté de coger una piedra para tirarla al agua y, fíjate que sorpresa, esta piedra se tornó de un color dorado ¿Era oro? Estaba confuso así que probé con otra roca, intenté pensar en transformarla en oro e inesperadamente funcionó, claro, el pequeño niño pobre tuvo la mala idea de pensar que su vida mejoraría y trató de agarrar todas las piedras posibles y transformarlas en oro, solo quedaba rezar porque todo eso fuese real y no oro falso.
Fui corriendo con todo el oro que pude en mis manos hacia mi madre, ella solo me sonrió y negó con la cabeza.-Michael, paciencia, no sabes cuánto me alegro que hayas sido bendecido con ese poder, pero el mundo no es tan sencillo, y no permitirá que salgamos de esta situación de esta manera... nada debería ser tan fácil mi pequeño... vuelve al rio, Rinku te esta esperando ¿no?
No tenía sentido, me derrumbé en el suelo, ¿como alguien podía ser tan... Estúpido?, no entendía la lógica detrás de no aceptar dinero solo porque no te has esforzado en conseguirlo, parecía un regalo de Dios, el dios que siempre nos dio de lado y ella simplemente rechazó la única salida que decidió darnos, así que decidí hacerlo yo mismo.
Corrí al mercado de venta de oro más cercano, mi madre no intentó detenerme y tonto de mí, no pensé en que ver a un niño tan obviamente pobre con tanto oro en las manos despertaría algún escepticismo, por si acaso, el vendedor decidió llamar a la policía, la cual me preguntó de donde conseguí ese oro, y como si no pudiese dejar de cometer un fallo tras otro, expliqué que era un Bio y que había sido bendecido con el don de transformar lo que tocase en oro a voluntad.
Nada más acabar mi explicación, me esposaron y me dejaron inconsciente, desperté en el rincón donde estaba mi madre, sentía un gran peso en mis manos. Mi madre me dijo que la policía, decidió quitarnos el dinero porque lo que había hecho no era legal y debía pagar una multa con todo lo que habíamos recaudado, además pusieron en mis manos unos guantes que sellaron mi poder, me explicó (de la manera en que se lo puedes explicar a un chaval de 12 años sin estudios) que mi poder era un "peligro para la economía del país"...Irónicamente a dia de hoy se que todo eso era mentira, nunca vendí nada y por tanto nunca cometí ningún delito, además, el oro podría haberse analizado en 5 segundos y sabrían que era un objeto manipulado por una habilidad bio...
Aun con todo eso en ese momento el pequeño yo se dió cuenta del error que había cometido, nunca podría quitarme esos guantes y nunca podríamos salir de nuestra situación de pobreza extrema y todo porque fuí un imbécil que no asumió desde el principio su situación...
Semanas después decidí dar un paseo para despejarme, por el camino me encontré con Rin, no nos veíamos desde el incidente, pero aún así yo no estaba en condiciones de hablar demasiado.
-hey, ¿a que viene esa cara tan seria?
Yo solo hice una mueca con la boca mientras seguía andando y él me trataba de acompañar.
- ¿Y esos guantes? ¿Los robaste? Parecen pesados
Paré en seco y, con la mirada más fría que jamás dediqué a una persona, le respondí
- ¿para qué debería robar? ¿Para regocijarme de mi pobreza? ¿Para asumir que nunca podré conseguir el dinero suficiente para sostenerme?
Rinku, tu quieres ser un vigilante ¿verdad? Un heroe que ayuda a los necesitados y quiere hacer de este mundo un lugar mejor...
Entonces...¿Porque no hemos visto nunca ninguno?
¿porque ninguno se digna a salvar a la gente como nosotros?
Exacto... porque no existen... y eso es porque no existe la gente tan buena...Rinku quedó en shock no se si porque tenía miedo de mi expresión o por mi reflexión, pero yo simplemente le aparté de mi camino y continúe con mi paseo.
Después de tranquilizarme un poco, volví a lo que jamás podría llamar casa, el rincón donde vivíamos... y juro por todo lo que soy que jamás borraré de mi mente lo que presencié en ese momento...¿Sabes lo que es darte cuenta de que todos te odian? Yo lo comprendí cuando vi a mi madre embarrada en su propia sangre, con las prendas rotas y a uno de esos putos policías dándole patadas.
Heh... ¿A esto ha llegado este mundo eh? La rabia se apoderaba de todo mi ser e hice lo único en lo que podía pensar...
Grité hasta que mis cuerdas vocales se desgarraron y salté sobre ese desgraciado, estampé su cara contra el suelo, pude ver su cobarde expresión de terror y jure a lo que se supone que nos esta protegiendo que ese cabrón no iba a salir con vida de esta, ni el, ni nadie... le miré con desprecio y despues de escupirle en la cara me dispuse a apretar su garganta, mi madre gritaba que parase pero eso solo me alentaba más a seguir y seguir.
¡Dios santo, cómo lo gozaba!
Pronto mis guantes empezaron a sentirse más y más fríos, notaba como sus colores cambiaban a un deslumbrante dorado, color que se extendía de mis manos al cuello del idiota, que a su vez de expandía lentamente por el suelo, la pared y todo a mi alrededor. Yo solo podía gritar y desear que todo acabase...Y decidí que todo acabaría...
Después de convertir a ese hombre en una hermosa estatua me acerqué a mi madre, ella me miraba con lágrimas en los ojos, estaba asustada pero demasiado débil como para hacer nada.
Me acerqué a ella y le di un abrazo...
Miré como mi madre también se estaba volviendo dorada y cómo me decía su última voluntad... yo no escuchaba nada... simplemente susurré
-Voy a acabar con esto mamá... te lo juro
Me levanté y tragué saliva para intentar hidratar un poco mi boca... Qué más da, no bebía agua desde la mañana anterior, resultó que por los gritos algunos vecinos fueron a ver lo que pasaba, pero también fueron consumidos por el oro... De hecho, la mitad de la calle estaba consumida en oro... Ahí pensé... si Dios no estaba de mi lado, entonces yo sería mi propio dios...Toqué una pared y ande lentamente esparciendo mi dorado elixir por todo el pueblo, no pude escuchar ni un solo grito... en mi mente simplemente sonaba una voz que decía que hay veces en las que cuando no tienes suerte, tienes que crearla tú mismo, y ser el que se proclame el rey...
todo principio debe tener un fin... y quien traiga ese fin es a quien deben seguir... A mi...
...
...
...
El oro se expandía tras de mí mientras corría del sitio, Crucé la calle lo más rápido que pude pero parecía eterna, algo se cruzó conmigo y tropecé, por suerte, el oro paró ahí mismo. ¿Que acababa de pasar? Miré al causante de mi tropiezo, aquella pelota de espuma... Mierda, Michael... ¿Habrá conseguido huir? Debo encontrarle, debo decirle que... A pesar de todo, sigue siendo mi amigo...

ESTÁS LEYENDO
Leftovers Remains
Acción¡Bienvenidos a Deadjoy! una preciosa metrópolis anarquica y abandonada en alaska. vivimos en el siglo XXI en un mundo donde algunas personas nacen con superpoderes, esto da a pie a que existan super criminales y por ende daría a pie a que existan lo...