cuatro

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Dylan tacha en su calendario otro día, sonríe feliz al saber que mañana su papi Chris va a volver.

Los días con su papá Zab había sido divertido, lo había llevado al zoológico, al parque y ahora estaban a punto de salir por un batido.

-Dy, es hora de irnos-el pequeño castaño deja el calendario en su cama y baja de la misma.

Corriendo se dirige hacia su papá Zabdiel el cuál le sonríe cuando ve la emoción de su hijo.

-¿Podemos comprar un pastel?

-¿Pastel? ¿Por qué queres comprar un pastel Dy?

-Para papi Chris-contesta como si fuera lo más obvio-. Vamos a darle la bienvenida.

-¿Aquí?-vuelve a preguntar recibiendo una afirmación por parte de su hijo.

Salen del departamento, suben al ascensor.

-Tú vas a cocinar y luego vamos a darle el pastel-habla-. Y así papi Chris va a estar feliz.

Zabdiel sonríe ante la ocurrencia de su hijo-. Si es lo que mi campeón quiere.

Dylan sonríe y sale del ascensor junto a su papá, caminan hacia el auto y suben en él.

-Papá Zab-habla el pequeño rizado-. ¿Puedo tener un hermanito?

Zabdiel carraspea-. ¿Por qué queres un hermanito?

-Mis amigos tienen un hermanito y yo quiero uno.

Zabdiel sonríe-. ¿Qué tal una mascota?

-¿Un perrito?-pregunta emocionado.

-Estaba pensado en un gatito.

Dylan piensa un poco-. ¿Va a quedarse contigo?

-Vas a visitarlo todo el tiempo.

-Esta bien pero aun quiero un hermanito- el boricua ríe y estaciona frente a la cafetería.

Baja del auto, abre la puerta trasera, Dylan desabrocha el cinturón y con ayuda del rubio baja del auto.

-¡Tío Rich!-exclama emocionado el menor y corre hacia el dominicano.

El moreno lo toma en sus brazos y lo carga haciendo reír al rizado.

-¡Pequeño Christopher!-se burla y Dylan le saca la lengua.

Zabdiel se acerca y los tres caminan ingresando a la cafetería, elijen una mesa cerca de la televisión.

Una señora se acerca a tomar sus órdenes y Dylan comienza a jugar en el teléfono de su tío Richard.

-¿Qué tal tu semana?

-Todo de maravilla Rich, amo pasar tiempo con mi hijo-comenta mientras sonríe al ver a Dylan.

-El representante de Tomas volvió a llamarme-comenta.

-Rich...

-Sería buena publicidad y ganarías mucho dinero-habla.

-¿Pelea o exposición?

Sus órdenes llegan y Dylan sonríe, Zabdiel corta los waffles de su hijo y mira a Richard-. Pelea.

-¿Cuándo?

-En seis meses en Los Angeles.

Mira a Dylan y suelta un suspiro-. Tengo que pensarlo Rich.

El dominicano asiente y deja el tema ahí.

-Necesito ir al baño-habla el menor-. Puedo ir solo papá Zab.

Solo por élDonde viven las historias. Descúbrelo ahora