La vida rosa // ZeeNunew Omegaverse

Baile Rosa parte 1

Habían ganado. Habían ganado la maldita final. El campo estallo en gritos y festejos. La gente coreaba y cantaba.

Tutor corrió a abrazarlo.

En las gradas Love abrazaba fuertemente a su madre, la cual lloraba emocionada. Yim a su lado los aplaudía con los ojos brillosos.

El equipo levanto al entrenador en el aire y Zee sonreía tanto que su cara comenzaba a dolerle.

Entonces lo vió.

Nunew saltaba eufórico con todos los animadores. Su falda azul se levantaba y dejaba a la vista su lindos muslos y sus largas piernas. Piernas que se acercaban.

Nunew estaba corriendo hacia él. Como en sus mas anhelados sueños.

Al principio, Zee sólo se quedo quieto, procesando lo que veía, pero cuando tuvo al omega lo suficientemente cerca y pudo sentir su dulce esencia, reaccionó.

Tiro su casco al piso y corrió los últimos metros que los separaban.

Nunew salto a sus brazos y enredo sus piernas en la cintura del mas alto.

— Necesito que digas que es mentira lo que dijo Mark — rogó el castaño tomando su rostro, su pequeña nariz de botón chocando con la del mayor — Dilo, alfa.

Zee miró desde los labios rosados hasta sus ojos llenos de lagrimas.

Lo amaba tanto.

— Es mentira, omega. Jamas haría algo así, solo intentaba protegerte. Lo siento, soy un idiota... tendría que haber hablado contigo... perdóname por favor...

— Cállate, alfa tonto — dijo Nunew cuando el rizado comenzó a balbucear sin sentido y lo besó.

Los pequeños brazos del omega envolvieron su cuello y Zee llevo sus manos a la cintura del castaño.

El beso comenzó suave en contraste con el clima que se vivía en el campo. Los dulces labios del omega acariciaban lentamente los contrarios.

Mi omega.

Gruño su alfa cuando sintió las dulces feromonas de Nunew. Algunos rastros de su celo se hacían notar, mareando al rizado.

El alfa acaricio uno de sus muslos y Nunew se estremeció.

— Zee... — se quejó sobre su boca y lo volvió a besar, mas profundo esta vez.

— Amor... — susurró embelesado Zee, su corazón martillaba y sus manos le picaban. Quería tocar mas, quería sentir mas.

— Bueno... — se escuchó que tosían incómodamente detrás de ellos — Odio interrumpirlos pero tenemos que recibir nuestro trofeo, Zee.

El rizado giró hacia su amigo, el cual trataba de mirar a a cualquier otro lado y no a las manos de el en los muslos expuestos de Nunew.

— Esta bien — dijo Zee aclarándose la garganta.

Depositó un pequeño beso en los labios de su omega e intento separarse pero Nunew gimoteó.

— No.

Tan bonito.

Tutor rió, negando con la cabeza y murmurando algo así como "el amor los vuelve idiotas" y trotó lejos de ellos cuando el equipo se juntó en uno de los costados del campo.

— Tengo que irme — murmuró Zee rozando su nariz con la del omega dulcemente — Por favor...

Si el castaño seguía mirándolo de esa forma, mientras se aferraba a él, probablemente mandaría todo a la mierda y se iría con su omega a festejar.