22

2.4K 203 8
                                    

Porchay sentía la tensión en el aire, se preguntó si sólo el la sentía porque Macau conversaba tan casual con su ex esposo, miro los platillos frente a él sin saber exactamente qué hacer, ¿Como es que se le había olvidado como servir la comida?

Froto su cabeza pues empezaba que sentir migraña, una aspirina necesitaba una aspirina, pero primero tenía que servir.

¿Donde estaba la maldita vajilla? Lo había olvidado.

Busco en la alacena hasta que dio con la vajilla de porcelana blanca que había comprado con Macau la navidad pasada para acción de gracias.

Los coloco en el comedor en orden junto con los cubiertos y una botella de vino que Macau había comprado para la noche. Esa noche era especial para Macau por fin después de tanto tiempo y trabajo duro, había pasado de ser un simple empleado a director de edición de la compañía, ¿Pero tenía que ser justamente la compañía de su ex?, ¿Como es que no se había dado cuenta antes?

Era su culpa porque no hablaban mucho de trabajo y se dio cuenta de la falta de comunicación entre los dos, casi cuatro años juntos y nuca había profundizado esos temas.

Sus ojos se cruzaron con los de Game pudo notar que el chico también estaba incómodo y no decía ni una palabra ni trataba de integrarse a la platica de Macau y Kim.

Y por un momento sintió compasión del chico, esto no debía de ser fácil para ninguno de los dos.

Pero eso no evitaba que siguiera sintiendo rencor por el chico que le arrebato a su esposo.

Dios, sentía tanta envidia, el chico era guapo, joven, alto, tenía piel bonita y el se sentía insignificante y viejo.

—Tu esposo es muy guapo — Dijo Kim obteniendo la mirada de Porchay y Game al mismo tiempo, los dos de forma molesta.

—Lo se — Respondió Macau sintiéndose orgulloso —Aunque todavía no es mi esposo, tal vez pronto — Dijo con ojos soñadores, que obligaron a Porchay a apartar la mirada
sonrojado.

—Ya veo — Contesto Kim.
Porchay noto el tono de burla en su voz como si se sintiera triunfante de la situación.

—Si lo haremos pronto — Respondió Porchay mordiéndose la lengua, ¿Que estaba haciendo?, era su orgullo el que hablaba no el.

Pero cuando miro a Macau esperanzado se sintió como la peor mierda. Definitivamente odiaba a Kim por hacerlo hacer cosas que el no quería.

El resto de la cena definitivamente no era como el se lo había imaginado en la mañana, no podía unirse a la conversación, no podía mirar a ninguno de los presentes a los ojos, menos a Macau.

Y cuando Macau alago a Game después de que este le dijera que era fotógrafo y Macau dijera que conocía su trabajo y le encantaba se reprimió para no hacer una escena de celos.

Game ya le había quitado a Kim no podía quitarle a Macau.

—Perdón no me siento bien — Declaró mirando a Macau —Te espero en el cuarto — Luego le dio un beso fugaz en los labios.

—¿Quieres que llame al medico? —Preguntó Macau preocupado pasando su mano por la frente de Porchay verificando que no tuviera fiebre.

Porchay negó con la cabeza y formó una sonrisa —Estoy bien, solo necesito acostarme, no se preocupen por mi, fue un gusto conocerlos — Hizo una reverencia y se marchó.

—Fue un gusto volver a verte Chay — Dijo Kim sin importarle la sorpresa en la mirada de Macau.

—¿Ustedes se conocen? — Preguntó Macau.

—SI —¡NO! — Respondieron al mismo tiempo.

—¿Explícate? — Preguntó de nuevo Macau esta vez viendo a Porchay.

—Es mi ex esposo — Contesto Kim.

—Supongo que se acabó la cena — Game se levantó tratando de destensar el ambiente, Kim, Macau y Porchay se veían con ojos furiosos. Soltó un suspiro
y tomo a Kim del brazo, hizo una reverencia por ambos y se despidió con un —"Fue un gusto"

Macau paso a Porchay de largo y se encerró en la habitación azotando la puerta, Porchay tuvo un debate mental en entrar o largarse.

Opto por la última no queriendo molestar a Macau. ¿Porque se sentía tan miserable?

INFIELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora