Las cartas que nunca pudiste leer.

Carta#2

25 de diciembre del 2021…

Diez días desde que vi por última vez tu cuerpo, desde que lloré hasta quedarme vacía al ver como un carro fúnebre se llevaba mi vida con tu cuerpo. No he salido de casa desde entonces, la soledad es mi única compañía y no me interesa cambiarla.

Hoy decidí visitar a mi madre, la pobre está rota, sabes cuánto te amaba. Lloramos abrazadas mientras nos acordamos de los momentos que vivimos juntos. Mi padre me culpa aunque ya ha entendido que yo no tuve que ver, se podría decir que era la persona que más te quiso después de mí. Mi hermana estuvo leyéndome algunas revistas de psicología y aconsejándome que la soledad no me hace nada bien, que me compre un perro o que busque alguna sustitución, pero nunca nadie logrará sustituirte.

Volví a la casa temprano, a volver a encerrarme en mi habitación de recuerdos. Las personas dicen que me voy a volver loca y que no es normal escribir cartas a personas que no están vivas, pero expresar mis sentimientos me hace bien, aunque sea a una hoja de papel.

Hoy es navidad, recuerdo la última que pasamos juntos, fuimos a comer a casa de mis padres, estabas tan feliz y verte feliz me ponía el doble de contenta, tu hermosa sonrisa era mi mayor alegría. Pero lo más triste no es solamente porque es navidad, sino porque además es tu cumpleaños y también se cumpliría otro año más desde que vi tus ojitos por primera vez, esa carita de la que me enamoré a primera vista, mi mayor regalo de navidad fue conocerte ese día y mi mayor tristeza fue perderte 11 días antes de nuestro noveno año juntos.

Te extraño mucho mi príncipe y te amo aún más.