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Se quedó quieto, inmóvil... Totalmente estático.

Soltó un suspiro sonoro e imploro a la tierra que se lo tragara y lo escupiera en un lugar lo suficientemente alejado como para pasar su vergüenza alejado de la humanidad o de cualquiera que se atreviera a reírse de la situación.

El olor volvió a invadir sus fosas nasales y de nuevo otra orcajada salió de su boca.

- Jungkook - volvió a llamar YoonGi y el mencionado pudo escuchar como su amigo se acercaba aún más a él. - ¿Estás borracho?

La pregunta quedó en el aire y Jeon quiso que fuera eso, quiso estar de nuevo bajo los efectos del alcohol y no embarrado de mierda de perro.

Otra orcajada salió de su boca y agradeció no haber probado bocado en todo el día.

- Ven dame la mano, voy a levantarte.

- No, espera no toques mi...

Fue demasiado tarde, YoonGi se agachó y estrecho su mano con la del azabache y tan pronto como la tomo con fuerza y decisión, la soltó sin más al sentir la extraña textura.

Min miro su mano ahora manchada de un color café extraño y la llevo a su nariz para olfatearlo notando el olor putrefacto que olía casi ha podrido.

Soltó una gran orcajada y termino vomitando en los arbustos de su vecino.

Sin importar si tenía la playera manchada o no, Jungkook se levantó enseguida y se acercó a su amigo preocupado.

- ¿YoonGi estás bien?

El olor que desprendía Jungkook llegó hasta YoonGi quien a pesar de haber terminado de vomitar soltó otra orcajada.

El peli menta se intentó alejar de Jungkook, pero muy tonto fue su esfuerzo porque el azabache le seguía preguntando si se encontraba bien.

La situación era extraña, cómica y hasta cierto punto caótica, cualquiera que pasara por la calle y viera esa escena pensaría que aquellos jóvenes estarían jugando aun si era todo lo contrario.

- ¡Basta, apestas! - fue lo único que pudo decir YoonGi antes de soltar otra orcajada.

Jungkook se miró así mismo y pareciera como si se hubiera hecho consiente la situación en la que estaba.

Ahora fue el quién soltó orcajadas.

YoonGi tomo aire a una distancia considerable, intento regular su respiración y cuando finalmente lo hizo vio a su amigo casi moribundo que intentaba vomitar.

Intento pensar en algo rápido y no tuvo otra opción más que decir lo siguiente.

- Quítate la ropa.

Jungkook no lo escucho, estaba lo suficientemente ocupado intentando retener la respiración para no vomitarse.

- Jungkook quítate la ropa.

Nada.

- ¡Jeon, quítate la ropa joder!

Jungkook se estuvo quieto y entonces finalmente reaccionó, de forma cuidadosa, intentando no mancharse fue quitando su playera a modo que finalmente se desasiera de ella y pudo respirar cuando está quedó en el pasto verde lejos de él y su nariz.

Respiro tranquilo, con el pecho expuesto al igual que su torzo dejando ver su abdomen un poco marcado y la blanquecina piel a luz del sol aún con una que otra marca del encuentro que tuvo con su mejor amigo.

YoonGi se sonrojó, pero pronto se le pasó al recordar el rastro de mierda que seguía en su mano.

Soltó un suspiro y camino directo a su casa.

F•R•E•N•D•S (Yoonkook) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora