— Me niego rotundamente. — se negó Peggy ante la orden de la profesora.
Lo que sucede es que, aquí hay una rivalidad. Peggy y Dottie compiten por tener las mejores calificaciones de la escuela, o bueno, de su salón.
Es el último año, así que ambas están compitiendo aún peor que los años anteriores.
El día de hoy la maestra seleccionó los miembros para el trabajo grupal, tanto Dottie como Peggy se miraron unas a otras cuando no fueron mencionadas para los dúos. Por parte de ambas les daba igual si su grupo fuera conformado por el menos aplicado de la clase, de igual menra harían todo el trabajo ellas porque si lo dejan a la merced de los demás integrantes no resultaría ser el mejor proyecto.
La profesora Miriam al pronunciar el nombre de Dottie y Peggy como miembros del último grupo fue lo peor que pudieron escuchar los oidos de Peggy, ella no se había dado cuenta ni mucho menos Dottie de los otros integrantes y por eso la reacción, pero Dottie no se quedó atrás, ella tampoco quería hacerlo con Peggy.
— Disculpe maestra Miriam, pero creo que... creo que no se percató que mi compañera Margaret y yo nunca trabajamos en "equipo" — hizo comillas con los dedos. — ni lo haremos nunca.
Dottie se niega a llamar Peggy a Margaret la mayoría de las personas la llaman así por un aprecio o por que simplemente todos la llaman así, pero para Dottie llamarla Peggy sería como darle acceso a cualquier cosa que disponga hacer Peggy. Por otro lado, Peggy la llama de igual manera a Dottie, por su nombre completo Dorothy o a veces Underwood cuando Peggy la llama por su apellido ella lo hace de la misma manera, la llama Carter.
— Maestra Miriam, no puedo creer lo que voy a decir pero... en esta oportunidad Underwood tiene toda la razón del mundo.
— ¡BASTA! — La maestra Miriam gritó golpeando su pupitre con un puño al momento de ponerse de pie. — Me tienen hasta aquí — señaló su frente — siempre es lo mismo con ustedes, siempre están peleando por los primeros puestos, nunca quieren trabajar en equipo. Por ustedes tuvimos que premiar 2 puestos como el primer lugar. ¿Ven hasta donde pueden llegan para que la institución haga esos cambios? Pero yo no los voy a permitir.
— Maestra, lamento interrumpir... — interrumpió Dottie.
— Maestra, nosotras lo lamentamos pero no queremos trabaja-
— ¡DIJE QUE BASTA! — Nunca había gritado de esa manera Miriam.
Todos se quedaron helados en el salón, Peggy y Dottie por primera vez en su vida se asustaron de tal manera.
— Yo no les estoy preguntando si ustedes quieren hacer el grupo juntas, ¡Les estoy dando una orden!. — se acercó a Dottie y a Peggy que estaban sentadas a la par porque amabas querían estar lo suficientemente cerca a la pizarra para poder prestar la máxima atención a cada clase. — Así que, más les vale que para el día asignado traigan su trabajo hecho y quiero que sea el mejor porque ustedes son las mejores estudiantes de todo el colegio ¿Entendido? — miró a Peggy primero y luego a Dottie con esos ojos que podrían matarte si fueran capaces de hacerlo.
— Sí, por supuesto. — soltó Dottie.
— Definitivamente, va a ser el mejor. — Soltó Peggy.
Tocó la campana de salida, toda la clase se había ido en esa discusión que tuvieron entre la maestra, Peggy y Dottie. Los demás compañeros agradecieron por el tiempo perdido pero ambas no estaban para nada agradecidas.
— Los demás pueden salir. — todos comenzaron a salir y la profesora continuó. — Espero que sea así porque si no es así, yo las repruebo en conducta.
Amabas querían hablar pero la maestra Miriam las calló con el dedo índice en señal que no dijeran absolutamente nada.
