13 de Marzo de 1978
Daniel perseguía el bondí en aquella mañana nublada.
Era su primer día en el nuevo colegio y ya estaba llegando tarde.
Encima su madre lo iba a matar si se enteraba, desde un principio ella no quería que vaya solo por la calle o en el colectivo. Pero Daniel, con 16 años, ya estaba grande para poder manejarse solo en la calle.
"Es peligroso estos meses hijo, no confío mucho"
Despues de horas tranquilizando a su madre, la convenció para que el pueda ir por su cuenta.Y tras varios minutos de correr sin parar, alcanzó el colectivo, agotado, subió al transporte y pagó el boleto, sacando de su billetera el dinero.
Para su suerte, el colectivo no estaba muy ocupado, habiendo asientos de sobra, se sentó en el mas cercano a la puerta de bajada, tampoco se iba a complicar con eso, ya era suficiente con lo mal que arrancó el día.━━━━━━ ◦ ❖ ◦ ━━━━━━
Agustín no hacía mas que jugar con una moneda, entre sus dedos, pasandosela de mano a mano, tirandola para arriba para despues agarrarla, era, se podría decir, su pasatiempo favorito.
Hoy había llegado muy temprano al colegio, mas temprano que el portero, incluso, asi que no tuvo mas remedio que quedarse esperando en la puerta para entrar.
Como si fuera poco, parecía que se aproximaba una lluvia, ya que había varias nubes tapando el cielo y las rafagas de viento cada vez eran mas frecuentes, solo quedaba rezar para que el portero llegue y le abra la puerta.[...]
Casi una hora despues, ya estaba en el salón correspondiente a su clase, todavía no había nadie de sus nuevos compañeros, asi que aprovechó para elegir su asiento con libertad.
Una vez dejó su mochila en su lugar, se quedó sentado, esperando a que alguien hiciera acto de presencia en el salón, aunque no conocía a nadie, supuestamente le iba a hacer bien conocer gente y hacer amigos nuevos, solamente eso lo convenció de cambiarse de colegio, cuando en realidad, estaba seguro de que sus padres querían pagar menos por la educación de su hijo y por eso lo cambiaron, aunque a el no le molestaba.Poco a poco, muy, muy poco a poco fueron llegando los demas alumnos, la mayoría se sentaron atras, algunos empezaron a hablar entre ellos, mientras que otros simplemente escondían su cabeza entre sus brazos apoyados en el banco, tratando de descansar un poco mas antes del inicio de la clase.
El no era de esos que llegaban con sueño por dormir poco, al contrario, siempre lograba manejar su horario de sueño de buena forma, a veces hasta el se sorprendía, porque tampoco era de acostarse a las 7 de la tarde, dormir 10 horas y despertar a las 5 de la mañana, pero siempre despertaba en horario y sin problemas.Escuchó el fuerte sonido de un timbre, avisando que ya era hora del inicio de clases, nadie se sentó junto a él ahora que lo notaba, y capaz que era hasta mejor, no conocía a nadie, capaz le caía mal y no quería darle malas impresiones a sus nuevos compañeros desde el primer día.
Una señora de unos ¿50? Años entró al salón, probablemente la maestra de lo que sea que vaya a tener clase ahora mismo, porque sí, tampoco se sabía su horario.━━━━━━ ◦ ❖ ◦ ━━━━━━
Por lo visto, estaban teniendo clase de Historia, asi lo dijo la profesora que había entrado al salón hace ya 30 minutos.
Estaban viendo lo que parecía que veían todos los años, el imperio Romano, de cabeza a pie, completito y desde cero.
Varios alumnos luchaban contra si mismos para no cerrar los ojos, otros tomaban nota de las palabras de la profesora de vez en cuando, y otros.. Ni siquiera sabía lo que hacían, pero nada relacionado con lo que explicaba la profesora seguramente.
De repente, tomando a todos por sorpresa, la puerta se abrió, un chico asomó su cabeza analizando el salón.-¿Se le ofrece algo?- Preguntó de mala gana la profesora, mirando con cierta molestia a quien acababa de interrumpir su clase
- Ehm, si, disculpeme por llegar tarde
Dijo el que, según lo que entendió Agustín, era un alumno mas del curso que llego tarde, y por lo visto los demas veían algo interesante en lo que ocurría, ya que el salón se llenó de murmullos y pequeñas risas causadas por lo ocurrido.
Para ser sinceros, Agustín no le encontraba la gracia, simplemente una persona que tuvo alguna demora para venir al colegio, tampoco más.-Ah, usted es un descarado, hace 30 minutos empecé la clase- Le dijo con ira la profesora
Y parece ser que todos se sintieron intimidados, ya que en el aula entera se formó un silencio inmediato.
De todas formas, quien peor parecía estar era el que llegó tarde, ya que se mostraba asustado por las palabras de la profesora-Que no vuelva a ocurrir, tome asiento -Cedió a regañadientes la profesora, y el alumno no lo dudó ni un segundo, tomó asiento en el primer lugar que vió
Frená acá.
¿¡Se estaba dirigiendo a él!?
¿¡¡Iba a tener que hablarle!!!?Lo había olvidado, el no se sentaba con nadie, por lo cual era obvio que si solo faltaba un alumno, sobre un solo asiento.
Intentó disimular sus nervios mirando a otro lado y con mirada de desinteres, mientras que el contrario tomaba asiento en el lugar.Agustín odiaba conocer gente nueva, siempre hacía algo malo y terminaba siendo objeto de burla de todos los demás, así que para ahorrarse eso, simplemente no le hablaba a nadie.
La profesora siguió con la clase, y Agustín siguió intentando prestarle atención a lo que decía la profesora, aunque en realidad no anotaba nada y tampoco estaba muy concentrado en escucharla.
-Che
Escuchó como le susurraba su compañero de banco, giró su cabeza discretamente para verlo y levantó levemente sus cejas, esperando a que el otro le siga hablando
-¿Que materia es esta?
La pregunta lo tomó por sorpresa, pero una vez que pensó bien tenía sentido, por lo visto nadie del curso sabía el horario aún y el había llegado tarde, por lo que todavía andaba un poco perdido
-Historia
Respondió con la mayor simpleza posible en un pequeño susurro, para que solo el le pudiera escuchar, vió como el contrario le regaló una linda y simple sonrisa como agradecimiento, para luego centrarse en escribir lo que la profesora decía.
Pocos minutos despues el timbre sonó, y el recreo empezó.
ESTÁS LEYENDO
Nuevo amigo (LGBT) (+18)
RandomLa última dictadura cívico-militar en Argentina ocurrió desde el año 1976 hasta 1983. Daniel llega a su nuevo colegio y conoce a Agustin. Pegan amistad rápido. Pero solamente amistad.