Caso Piltover

Un curioso reencuentro

- Despierta.

 Una voz femenina lo llamaba de forma suave mientras acariciaba ligeramente su rostro.

- Kai - se escucho nuevamente - despierta dormilón.

 Kai lentamente comenzó a abrir los ojos, el sol resplandecía atravez de las ventanas, y las sabanas se sentían cálidas y acogedoras, pero lo que mas le causaba comodidad era sentir el tacto de aquella mano que tiernamente le acariciaba la mejilla.

 Al momento en el cual sus ojos comenzaron a enfocar mejor el ambiente, lo primero que vio fue aquel cabello negro que relucía a la luz del sol.  El general poso su mano en su mejilla tomando la mano de la mujer que tenia en frente, el tacto era suave y el aroma que trasmitía su piel era de lo mas agradable.

- Ivana - dijo Kai.

 La mencionada sonrió al escuchar el leve susurro y acerco su rostro para quedar a centímetros con el de Kai, este al ver aquel gesto se acomodo mejor en la cama para estar frente a frente con ella. Al momento de acomodarse ambos no tardaron en besarse mutuamente, los labios de Ivana eran cálidos y se sentían como el cielo en la tierra.

- No deberíamos hacer esto - dijo Kai entre jadeos sin despegarse de su amada sintiendo su torso desnudo con sus manos y saboreando aquellos labios húmedos.

- Shhh - corto Ivana - nadie nos va a interrumpir. Aprovechemos el tiempo ahora que estamos solos.  

   Ivana corto el beso entre los dos, al momento de separar sus labios una pequeña linea de saliva sobresalió de ambos. La pelinegra se levanto para poder observar a Kai de mejor manera, este en cambio la contemplaba sin mas, aquella piel blanca, esos ojos que adornaban aquel bello rostro que lo embobada, todo de ella era perfecto. 

 Sin embargo, al momento de separarse Kai noto como una ligera linea de sangre  caía lentamente por la nariz de la pelinegra. 

- ¿Ivana? - al parecer ella no se daba cuenta de aquello, pero al momento en el que Kai le hablo ella pareció no reaccionar.

 El ambiente parecía volverse cada vez mas pesado, a Kai le costaba el respirar y por si no fuera poco no podía moverse, era como si estuviera atado. Todo comenzaba a volverse extraño.

- ¿Qué esta pasando?- se preguntaba Kai mientras luchaba por moverse pero aquello era inútil.

" 3, 24, 20, 12, 19, 17, 17, 22, 19, 23, 19, 4, 0, 7, 6, 7, 19, 10, 12, 16, 17, 6, 14".

 Kai observaba a su alrededor de manera desesperada intentando descubrir de donde provenían aquellos números pero no logro nada. Su vista se volvió a posarse en Ivana y al momento de volver a verla se percato de que su rostro poco a poco comenzaba a ensangrentarse con distintas heridas y cortes en el mismo, sin embargo ella no se percataba de nada y continuaba con su vista fija hacia el.

- No me dejes - se escucho de ella resonando en la cabeza de Kai, pero en ningún momento ella movió la boca  - todos deben morir.    

 "4, 3, 17, 24, 20, 13, 24, 8, 16, 17, 1, 24, 9, 21, 15, 0, 5, 15, 4, 4, 23, 6, 11, 25".

 El corazón de Kai comenzaba a acelerarse a medida que continuaba escuchando aquellos números y el sudor comenzó a impregnar su cuerpo, no entendía lo que estaba ocurriendo. De pronto noto como una sombra de un negro espeso se alzaba detrás de Ivana, tenia forma humanoide y comenzó a alterar a un mas el ambiente. 

 "14, 4, 20, 4, 9, 14, 18, 12, 8, 7, 21, 6, 4, 21, 7, 21, 4, 2, 14, 3, 14, 7, 18, 0".

- Ivana - dijo Kai, intentando vanamente que su amada reaccionara pero fue inútil - ¿Qué ocurre? - decía con temor mientras observaba como aquella figura comenzaba a levantar su brazo como si fuera a dar un golpe, un golpe directo a la cabeza de Ivana - no - comenzó a decir Kai desesperado - ¡No! - aquella sombra comenzó a bajar su brazo dispuesto a golpear la cabeza de Ivana - ¡NO!.