Cuando termino de llamar Quackity dio un suspiro y guardo el teléfono dirigiéndose a donde estaban los dos chicos. Tenía una expresión triste bastante notable que solo el chico de pelo castaño se dio cuenta.
— ¿Quackity estás bien?— Rápidamente se acercó a él y le tomó de la mejilla mirándolo preocupado.— ¿Hay algo que quieras hablar?
— Yo.. es que.. verás..— Alguien le interrumpió.
— Vamos a ver aquí no hay nada que explicar— dijo separándolos poniéndose en medio mirando frente a frente a Luzu.— Que hacías con MI pato.
— Rub...!— volvió a ser interrumpido
— Cállate Quackity, nadie quiere tu opinión— Le interrumpió.
— Mira osito de mierda, ¿como que nadie quiere su opinión y que se calle? A Quackity no se le trata así— dijo mientras le estiraba de la corbata.
— oh ya veo..— empezó a reír.— ¿Crees que tú serías mejor novio? Quackity se mio, y nadie me lo quitará— volvió a reír.
— ¿Así..?— sacó una baraja de billetes de aproximadamente medio millón de euros.— Apostemos
"Dios mío este chico esta loco, lo amo" pensó Quackity.
— ¿Así que quieres apostar..? Esta bien.. quien gane.. se llevará el premio— dio una pausa para hablar.— Quackity.. Quackity será el premio...
Yo!?
Yo el premio?
Me están vendiendo?
No...
No....
No quiero porfavor otra vez no!