Shuumatsu no Valkyrie: Reacciones, one-shots, escenarios, types of

Uno rápido - Raiden x Parvati | Pedido

Pedido por: sigurd-sedric

Gracias por el pedido, espero que te haya gustado. Si tienes otra idea o lo que sea, déjamelo por aquí :)

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Advertencias: +18, NSFW, smut, palabras malsonantes.

Todos los personajes mencionados son mayores de edad.

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Minutos antes del quinto combate, Raiden se pasea tranquilamente por los pasillos del lugar, buscando algo con lo que entretenerse. Podrían ser las ansias de combate, pero se sentía muy caliente. Fue entonces cuando vio a una mujer caminando, probablemente hacia las gradas de los dioses, pues la reconoció: era Parvati, primera esposa de Shiva, su rival. Ciertamente era muy hermosa y se decía que era muy buena en la cama. Supuso que lo rechazaría, pero en sus tiempos era famoso con las mujeres, así que quiso intentarlo.

–Ey, ¿te apetece pasar el rato? –preguntó. Realmente no tenía mucha idea de ligar, a pesar de que era famoso entre las mujeres, no se lanzó muchas veces y menos tuvo que ligar con ellas.

–¿Y tú eres? –al menos no estaba perdido todavía.

–Raiden Tameemon, encantado, guapa –ella rechazó su saludo..

–Concursante de parte de los humanos, ¿eh? No, no quiero nada –quiso retomar su camino, pero se volvió cuando él insistió.

–Venga, mujer, solo serán unos minutos... –realmente quería mojar un momento– Mira, tengo una propuesta para tí –echó su última carta, improvisada en ese mismo momento.

Parvati se giró. Realmente era fiel, pero este hombre no estaba nada mal. Y había tenido la valentía de insinuársele a ella, la mismísima diosa de la fertilidad, el amor y la belleza.

–Continúa –y tampoco es que le disgustara una follada rápida.

–Dame un minuto, si te gusta, te quedas; sino, te vas. Sin explicaciones, sin preguntas. No pierdes nada

Se lo pensó durante unos segundos– Está bien. Aunque yo soy algo dominante, no sé si eso entra en tus planes –objetó.

–Sin preguntas, he dicho. Actuaré según tú lo hagas

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Entraron a un cuarto de limpieza y colocaron una silla en el pomo. Parvati echó todos los utensilios que estaban en el suelo a un lado y ambos se empezaron a quitar la ropa. Raiden juntó sus labios en un beso con mordidas de ambas partes mientras se desvestían. Se separaron para sacarse la parte de arriba y ella lo sentó en el suelo mientras Raiden se pajeaba con rapidez. Para cuando la diosa le tanteó el miembro, este ya estaba levantado. Y, sin ningún tipo de preocupación, ella introdujo su miembro en su coño. Apoyó su peso sobre los hombros del contrario lista para bombear, mientras que él colocaba sus manos alrededor de la cintura de la otra, rozando sus pieles calientes y ayudándola con los movimientos.

Ni un segundo pasó para que Raiden se excitara y soltase suspiros. Parvati tardó unos segundos, intentando que en cada subida y bajada ambos abdómenes rozaran completamente. El ambiente estaba caliente y el éxtasis notándose, lo que hizo que él echase el cuerpo hacia atrás. Ella aprovechó para tumbarlo en el frío suelo, el cual provocó el contraste necesario para que aumentase la velocidad.

Era una posición complicada, y, queriendo más fricción, Raiden la ayudaba a pesar de que le costara evitar centrar su atención en admirar sus sexys movimientos de torso y los lindos rebotes de sus pechos. Parvati comenzó también a estimular su abdomen bajo, haciendo más lentas las subidas y bajadas y excitando aún más al contrario que, dada la cercanía del orgasmo, movía las caderas, necesitado.

Parvati ya ni pensaba en la propuesta, solo quería correrse; y él no lo hacía nada mal. Dejó el cuidadoso y fresa bombeo y comenzó uno mucho más rápido y excitante que la dejaba sin aliento al ser tan estocante. Y, justo cuando se iba a quedar sin aire, se corrió, al mismo tiempo que el otro. Se separó rápidamente y se quedaron unos segundos recuperando el aliento.

Al despedirse, lo hicieron con un beso en la boca y se dispusieron al baño determinado con prisa.

–¡El próximo combate lo disputarán Shiva, por parte de los dioses; y Raiden Tameemon, por parte de los humanos! ¡Estamos ansiosos por ver cómo termina este quinto combate! –se escucha al comentarista desde la lejanía.

–Qué casualidad —suelta irónica Parvati, mientras dejaba ir los fluidos restantes.