Luck Ra| Calladas | • 𝟐𝟎𝟐𝟑

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Bueno, mi teoría de que las calladas del Salón son las más hermosas, está comprobado. Tenía a Maia sentada sobre mi mientras nos comíamos la boca mutuamente y ella daba vueltas en círculos.

¿Por qué me hacen esto? mis papás llegaron, y tuvimos que separarnos para seguir con el inservible trabajo.

—Linda, ¿querés quedarte a comer?—Preguntó mi mamá, me puse rojo. Por los últimos diez días, no habla más de qué tengo que conseguir novia. Maia me miró.

—Claro.

Carajooooooo.

Mientras comíamos se me vino a la mente la escena que anteriormente tuve con Maia. Y como le tengo unas ganas tremendas, también quiero jugar un poco con ella. Así que, con mi mano, rocé su muslo.

Creo que pensó que fue sin querer, porque no dijo nada. Así que está vez, puse completamente mi mano ahí, apretando un poco. Ella me miró nerviosa.

—¿Y cómo te va la escuela, Mai?—Preguntó mi mamá, la chica estaba tan nerviosa que no podía si quiera formular una palabra bien.

—Bien, nada me male sal.—Dijo estúpidamente, mi mamá me miró con una sonrisa, y ambos reímos. Ella estaba roja.

Ella lentamente, puso su mano sobre la mía, y apretó mi mano. —Basta...—Dijo suplicante y la miré divertido.

—¿Y sí no quiero?—Pregunté en un susurró.

—¿Dijiste algo, hijo?

—Maia quiere más, le da vergüenza pedir.—La chica junto a mi me miró molesta, yo le guiñé un ojo divertido. Solté su muslo. Para que no se quedará comiendo sola me serví más aunque no quería.

—Ya terminaron—dijo mi mamá—, vayan a la pieza Facu, yo lavó los platos.

—¿Le ayudo?—Preguntó Maia, era seguro que no quería estar conmigo a solas de nuevo. Por suerte, mi mamá se negó rotundamente ante la propuesta de la chica.

Subimos a mi cuarto, donde rápidamente cerré la puerta con seguro y la acorralé en la misma.

—¿Por qué hiciste eso?—Preguntó enojada.

—¿el qué?

—Me tocaste, y tu madre estaba en frente nuestro Facundo, ¿estás loco?—Dijo. Me acerqué a ella sonriente.

—Por vos, beba.—Y le planté tremendo beso, sinceramente tenía ganas de esto hace bastante. Aunque me cueste admitirlo, la veo en secreto en los recreos para ahorrarme cargadas.

Poco a poco, subímos la intensidad del beso, yo manosaba su cintura y ella puso sus manos en mi pelo acariciando, me vuelve loco. Nos separamos para tomar aire, y volver a lo mismo. Cuando estaba por sacarle la remera, me paró. -Espera, no.-.

—¿Te incomodé? discúlpame.—Me separé avergonzado.

—No bobo.—Se sacó la remera y me tiró en la cama poniéndose sobre mí.

—No sabía que eras así.—Confesé, es re atrevida y me encanta que sea así. Ella sonrió levantando los hombros, y volvió a besarme. Me sacó la camisa y quedé en jeans, ella quedó en tanga. Yo ya estaba atacando sus pechos con mi boca, eran enormes.

Los golpes en la puerta nos irrumpieron, me sobre salté.

—¡Facu! vino el padre de Maia a buscarla, bajen.—Rápidamente nos cambiamos, y bajamos. El padre de Maia me veía con molestia, se ve que se enteró que estuve con su hija en la pieza, cerrada y solos.

—Nos vemos, Facu.—Me dió un beso en la mejilla y se fue con el padre en el auto.

Me tiré en la cama, de verdad quería que algo pasará. Mi celular sonó.

«Dejé mi carpeta en tu casa, mañana nos vemos de nuevo, Facundo. ♥» Está mina me va a volar la cabeza, dioooossss.

𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 || LUCK RA FANFICTION. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora