MR. INSANITY

7.7

La habitación se sentía demasiado cálida, claramente en está se presenciaba tranquilidad y paz, algo que claramente hace años no sentía, a veces la extrañaba pero su ángel lo había mantenido en una oscuridad que más que traer tranquilidad, al pasar los años eran una costumbre que era monotonía.

En su rostro comenzó a sentir algo cálido, eran los rayos de sol que entraban en una pequeña abertura de unas cortinas color café de un gran ventanal , que se encontraba a algunos metros de él. Sus ojos se comenzaban a abrir poco a poco, su cabeza le punzaba de una forma poco soportable , sus ojos se abrieron por fin mirando directo al techo notando que era de color blanco con una lampara . Miro a su alrededor noto que claramente no era la habitación en la que estaba acostumbrado a pasar las noches desde su llegada a los Ángeles, observo que la habitación era de paredes beige, con una foto que colgaba de una de ellas, lo primero que se le vino a la mente fue con que mujer esta vez había pasado la noche. Miro al otro lado de la cama y noto que se encontraba vacía, soltó un suspiró de tranquilidad, agacho la mirada y noto que se encontraba con una camiseta color gris y unos pantalones de cuadros que ni él mismo sabía como había llegado ahí.

Decidió estirar su mano , para buscar su teléfono, pero al momento de moverse una voz femenina lo sorprendió, que provenía de detrás de una puerta color café que se encontraba a unos metros enfrente de la cama.

-¿Así que ya despertaste Insanity?- dijo una mujer mientras se iba empujando la puerta y poco a poco se acercaba al pelinegro- Tu teléfono esta en el otro buro,- dirigiendo la mirada al lado contrario de la cama- Toma esto, te ayudara con el dolor de cabeza- dijo mientras colocaba una pastilla en la mano del pelinegro y en la otra le ofrecía un vaso de agua .

-Gracias - Christian estaba demasiado sorprendido, ya que la persona que se encontraba con el en ese momento era nada más y nada menos que Olivia la chica de cabellos castaños y mechones rojos estaba frente a él, aquella mujer que lo atendía cada mañana o tarde que regresaba a Devil's para satisfacer su necesidad humana.

-Disculpa se que va a sonar estúpido pero, ¿donde carajos estoy?- dijo mientras miraba a la castaña que se encontraba sentada en un costado de la cama, y se quedaba contemplando sus ojos cafés y un mechón color rojo que cubría parte de su ojo izquierdo.

- Se que sonara raro pero te encuentras en mi departamento- comento al pelinegro quien se sobresalto y se ruborizo en ese momento- ¡No! ¡no!, no creas que hicimos algo ni nada por el estilo , terminaste aquí porque te encontré en la entrada de Devil's, súper ebrio, además estaba lloviendo demasiado fuerte , estabas completamente empapado, por lo cual decidí traerte a casa con ayuda de Dabin, pero hablando de ello, ¿y cómo te sientes?- lo interrumpió de su transe haciendo que regresara a su realidad- Es que ayer estas muy mal, estabas muriendo lentamente- la chica lo miró mientras el terminaba de beber el agua que contenía el vaso.

Christian contemplo un segundo más aquellos ojos cafés que reflejaban preocupación y aquel peculiar mechón rojo que adornaba uno de sus ojos - Si, solo es el dolor de cabeza y que mi ataque de ansiedad no regrese, la verdad necesito mi teléfono urgentemente- dijo mientras dejaba el vaso en uno de los buros, y regresaba su mirada a los ojos de la castaña- Necesito hablar con urgencia- dijo mientras estiraba su brazo para alcanzarlo- De hecho voy a.... ¿que mierda?- dijo exaltando, al encender su teléfono-

-O por cierto se me olvido decirte que toda la noche vibro tu teléfono, eran llamadas y mensajes de un tal Scott, no quise contestar ninguna porque pues no sabía quien era jsj- dijo mientras cerraba sus ojos y se rascaba la nuca- Te recomiendo que le contestes, para que te diga que le dijiste, recuerda que ayer estabas muy ebrio, bueno yo me voy a terminar unas cosas y voy a trabajar, te veo al rato como a las 5 hoy salgo temprano del trabajo- la castaña se levantó del borde- Le diré a Dabin que has despertado, tu ropa se esta secando y puedes quedarte lo que necesites. Bye - dijo saliendo de la habitación pero antes de que cerrara la puerta la voz del pelinegro la detuvo