El calendario por fin marcaba viernes y Kevin estaba terminando de poner unos detalles en la carta.
Por alguna razón se sentía más nervioso de lo normal, como si ahora tuviera miedo de que Lainez lo atrapará y se decep
decepcionara de quien era el que estaba detrás de todo.Álvarez salió lentamente de su hogar, los nervios no lo dejaban en paz y estaba empezando a desesperarse. Sentía que iba a vomitar.
Estuvo todo el camino conduciendo con la misma sensación, por lo que cuando llegó al lugar se dirigió hacia los vestidores para poder acabar rápido.
No le tomó ni diez minutos para poder dejar la carta en su lugar he irse aunque hizo lo mismo de siempre, sus nervios lo hicieron descuidarse y ya había llamado la atención de una persona.
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Por otro lado, Lainez ya se esperaba esa carta que había encontrado de nuevo en su chaqueta mal acomodada.
Poco a poco se estaba acostumbrando a recibir cartas de amor de aquel extraño que lo hacía sentir querido, era tranquilizante saber que siempre habría alguien que lo amara, pero el problema recaía en que no sabía quién era el autor detrás de todo.
Salió con calma de los vestidores y se encontró con sus amigos, para que una vez más leyeran la nueva carta que reposaba en las manos del centrocampista.
- ¿Cuando se revelará el autor? - Inicio la conversación Edson. - La curiosidad me consume.
- Supongo que tenemos que tener paciencia. - Habló el portero.
- Bueno, ¿Memo no quieres leer la carta? - Interrumpió Lainez la platica.
- Claro.
Después de esa breve conversación, Diego le entregó la carta a Ochoa para que pudiera apaciguar la curiosidad de los otros dos.
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Querido Diego:
Por un beso de tu boca y caricias de tus manos, yo mataría. Lamentablemente no me puedo animar a revelar quien soy, por el miedo que me provoca tu rechazo.
¿Te molesta eso? Cada vez que te observo, te encuentro buscandome con la mirada.
¿Acaso es que me quieres conocer? Me gustaría saber si es que tengo una oportunidad.
No puedo evitar este sentimientio cada vez que te veo, siento como si miles de mariposas estuvieran volando en mi estomago mientras solo estamos nosotros en el mundo.
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Ochoa quería llorar, la carta describía de una forma muy hermosa el amor que el chico sentía por Lainez. No lo podía creer, el chico que estaba escribiendo estaba cartas realmente amaba con intensidad a su Dieguito.
Por otro lado, Diego sentía su cara caliente. Lainez deseaba poder saber quien era el autor pero igual sentía nervios, ¿que tal si no cumplía con lo que el escritor quería?
- Yo digo que pensemos sobre esto después. - Rompió el silencio Edson. - Ya es tarde y todavia tenemos que llevarte a tu departamento.
Dicho esto se dirigieron al departamento de Lainez, el ambiente en el carro era tranquilo y relajante que Diego ya casi se quedaba dormido en los asientos traseros.
- Llegamos dieguito. - Dijo Ochoa.
Lainez estaba fuera de si en ese momento que simplemente no recuerda como fue que llegó a su cama, no podía negar que sentía que el sueño le ganaba. Estaba apunto de caer profundamente dormido cuando escucho el tono de llamada de su celular.
Empezaba a sentirse molesto, quien era tan bobo para llamarle a esa hora. Pensamientos insultando al mundo inundaron la cabeza del jugador hasta que vio quien era el responsable de la interrupción.
Los ojos del pobre jugador, se abrieron como si se fueran a salir de su lugar. Kevin Álvarez le estaba llamando, a él, al muchacho que estaba hecho un manojo de nervios con solo ver ese nombre.
Diego agarro seguridad y contesto con su mano temblorosa.
- ¿Hola? - Habló el centrocampista al momento de contestar a la llamada.
- Buenas noches Diego, soy Kevin. - Se escuchó una nueva voz por el celular. - Lamento molestat a esta hora, pero se me ocurrió ahora preguntarte si es que podemos encontrarnos mañana. - Prosiguió hablando Álvarez.
- Oh Kevin, no te preocupes.- Contestó un tanto nervioso Lainez. - De todos modos no es como si estuviera a punto de dormirme ni nada por el estilo. - Soltó el chico con nerviosismo. - Y ¿cuál sería la razón del encuentro?
- Pues, si te soy sincero tenia pensado que pudiéramos platicar más y conocernos pues la última vez no pudimos hablar muy bien que digamos.
- Entonces, claro que sí. Todos los demás detalles los hablamos por mensaje ¿te parece? Es solo que estoy empezando a sentir sueño y no me gustaría dejarte hablando solo. - Respondió el centrocampista reprimiendo sus ganas de ponerse a gritar de la felicidad en ese momento.
Lainez no iba a mentir al no aceptar el hecho de que Álvarez le parecía interesante y sin dudarlo guapo. Parecía ser alguien con quien vale la pena convivir y por alguna razón su presencia provocaba un sentimiento indescriptible en Diego, quien sin siquiera notarlo se ponía nervioso.
- Esta bien Diego, espero tengas dulces sueños y descansa. - Se escuchó la voz de Kevin antes de que la llamada fuera finalizada.
Álvarez no podía creer que había tenido el suficiente valor para llamar a Lainez pero menos podía creer el hecho de que Lainez hubiera aceptado su propuesta (la cual se le había ocurrido minutos antes de la llamada), quería saltar de la alegría que sentía. Tal vez así podría acercarse más al centrocampista.
Ambos sin entender muy bien lo que sentían decidieron irse a dormir y pensar con más claridad al día siguiente por la mañana, sin tener alguna sospecha de los sentimientos que estaban a punto de surgir.
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POR FIN
Les juro que pasaron tantas cosas en mi vida que retrasaron tanto esto y les quiero pedir una disculpa enorme 😭
Tratare lo posible para poder sacar el siguiente capítulo lo más pronto como una muestra de agradecimiento por su espera 🫶🏻
Muchas gracias por apoyar esto personitas, les quiero mucho.
No olviden su voto y dejar comentarios 💋
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love letters | Diego X Kevin
RomanceSin falta, todos los viernes después de sus entrenamientos, Diego encuentra cartas de amor en los bolsillos de su chamarra. La curiosidad empezaba a surgir, ¿quién era la persona detrás de tales confesiones de amor? Diego Lainez x Kevin Álvarez Un p...