"Encontrar a ese alguien es complicado, tenerlo por fin en tu vida es lo mejor que puedes tener...el amor que ambos tenian era tan hermoso...lastima que el amor es como una flor... En cualquier momento menos inesperado puede fallecer... "
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Los ciudadanos de todo el reino entre las frias montañas se encontraban reunidos en lo que todos conocían como "la sagrada capilla" en donde en esta se encuentran lo que fuesen los antiguos dragones divinos que separan el día y la noche del lugar
Estos estaban en silencio, absolutamente podría decirse que hasta el sonido del viento se escuchaba en aquel momento, mientras que en frente de todos se encontraban dos personas que llamaban completamente toda la atención de aquellos ciudadanos
Más que nada era el porque él que estaba enfrente era el que gobernaba aquella nación, era su rey junto a la que ahora se convertiría en su actual esposa
Todos escucharon como el sacerdote estaba diciendo las últimas palabras que todos esperaban "ahora puede besar a la novia" ... Después de aquellas palabras todos aplaudieron de alegría excepto una persona que estaba viendo todo desde la parte de atrás, este vestía con una capa de color cafés que llegaba incluso a cubrir su rostro pero se lograba ver un poco de su cabellera la cual era rubia
No tardó mucho para que lentamente este se empezará a tocar una de sus manos, más específicamente un dedo... Dedo en el que antes estaba un hermoso anillo de color doraro con una preciosa joya azul...aquel que ahora mismo le pertenecía a aquella mujer , así que en silencio y sin llamar la atención este se retiro
P. Vainilla: ... No debi creer en tus palabras... Dark Cacao...
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Pero como fue que llegamos a esto? Que paso exactamente para que alguien que estaba dispuesto a dar su vida fuera engañado y traicionado por la misma persona que tanto amo?
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Era una mañana tranquila en ese tiempo, los ciudadanos estaban ocupados como siempre, más que nada ocupados construyendo lo que sería una muralla para proteger su hogar, mientras que el gobernante estaba siendo curado por uno de los nuevos sanadores del lugar
D. Cacao: He escuchado que eres nuevo recluta entre los sanadores y curanderos -dijo para que el ambiente no fuera incómodo-
X: Así es su majestad -dijo mientras le ponía algunas vendas-
D. Cacao: Y veo que no eres de aquí cierto?