Comienza la venganza

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-Leva  , pensé que jamás te volvería a ver-Will saltó abrazándome, temblaba


-Aggg  , dejen sus cursilerías para tarde-Ágata habló y cruzo de brazos.


-No hables, nadie quiere tu opinión-burlé y se enojó.


-Divierte lo que quieres roba chicos, algún día lo lamentarás-se alejó ella


-Continuaremos con el tour y ustedes dos regresarán a su habitación-gritó la maestra y nos apuntó con su dedo índice.


Al rato caminamos Scott y yo al hotel hasta llegar a su cuarto, sentándonos en un gran sofá café que combinaban perfectamente con las paredes de la habitación, dos literas, un velador color blanco casi del  color del piso, pero este ya estaba algo sucio, un baño con una regadera, un lavamanos y claro, el retrete.

-¿Y ahora que haremos?-preguntó Scott mirándome pícara mente moviendo sus gruesas cejas color igual al de su cabello.


-Qué tal si hacemos nuestro propio tour, nos escabulliremos de los guardias, claro, usando una máscara de protección


-Cuidado con los lobos y zorros sueltos por ahí-bromeó.

Salimos por la ventana amarrando algunas sábanas a la cama y fuera abajo, sentía tanta adrenalina que tal vez explotaría. Llegamos donde los guardias, todos con su arma listos para una situación cualquiera. Las calles de esa cuidad estaban repletas de ceniza, al parecer los estragos de la ciudad aún no contaban sus días, entramos a una vieja escuela, ventanas rotas, pasillos sucios, varios murales estropeados, las encimeras donde los niños colocaban sus cuadernos para ir a estudiar estaban caídas, pupitres oxidados al igual que las puertas y varios hoyos en las paredes con moho.


-Este lugar me aterra-se asustó tomando mi brazo apurado, de pronto escuchamos un ruido proveniente de uno de los salones deshabitados.


-¿Escuchaste eso Scott?-lo miré y me miró y caminamos asustados hasta aquel lugar, nos separamos tocando cada pupitre por curiosidad hasta que uno llamó mi atención, tenía incrustado mi segundo apellido Panettiere como si lo hubieran hecho con las uñas.


-Scott, ven, mira esto-dije seria y él se acercó, miré su cara y se conmocionó mucho al borde de decir ''vayámonos ya'' tomando mi mano pero antes de eso,la puerta se cerró y brincamos asustados.


-¡Ustedes no se irán de aquí!-susurró una voz aguda,me parecía haberla escuchado antes.


-Carajo, que es lo que quieren de nosotros ahora-exclamó furioso


Ambos regresamos a ver al escritorio con mi apellido, divisamos una vieja fotografía y nos acercamos de qué trataba.


-Son antiguos estudiantes de esta escuela-habló mi novio sosteniéndola.


-¡Esa es mi abuela!, me la indicó cuando era una niña-me asusté y él me miró muy sorprendido.


-¿Pero si tu abuela te mostró esa foto, qué hace aquí?


-No lo sé, la niña de aquí-puse mi dedo en la foto al lado izquierdo de ella, mi abuela era una niña flacucha junto al resto de la clase, se veía triste


-Deberíamos irnos-sugirió el muchacho -tomando mi mano de nuevo pero ya casi al salir, del escritorio  donde encontramos la fotografía, se abrió


-Espera-dije con tono quebradizo, me acerqué a mirar lo que había dentro, sangre y el piso se llenó completamente. Scott me abrazó y se agachó a recoger la fotografía de mi abuela, observamos una grieta en la cara de la abuela, como si la hubieran rasgado con alguna clase de instrumento corto punzante.


Dirigimos nuestros cuerpos a la puerta que de inmediato se abrió, logrando así escapar corriendo a nuestro hotel, por suerte, nuestros compañeros aún no regresaban.

-Por qué me suceden estas cosas, no lo entiendo


-Quizá tu abuela pueda.............-extendió su brazo y me mostró la antigua foto de ella y sus compañeras.


-Tienes razón, cuando regresemos a Nueva Orleans le pediré explicaciones


-No te agobies mi amor, estaré siempre contigo-nos abrazamos y besamos.


-Pero antes, esta noche planearemos la venganza contra Will-reí

Ya en la noche, tomé mi móvil marcando a Will.


-Hola amor


-¿Estarás ocupado esta noche?-coqueteé


-Para ti nunca estaré ocupado, ¿Qué tienes planeado para mí?


-Lo que piensas, te veo en mi habitación a las 9.00 en punto, adiós amor-colgué y del baño salió la rubia oxigenada, había tomado una ducha y su pelo lo tenía envuelto en una toalla blanca.


-No puedes salir, si eso es lo que piensas Roberts-se sentó en  su cama y comenzó a secar su cabello.


-Ese no es tu problema Taylor y claro, puedes decirle a la maestra no tengo ningún inconveniente-le sonreí sarcásticamente y tomé mi bolso sin nada especial dentro ,solo mi móvil y la llave que tenía incrustada como nombre llave de tinta que había encontrado hace mucho tiempo.


-Cuando lleguemos a la escuela, te verás en serios problemas muñeca-sonrió y se levantó de su cama dirigiéndose a la puerta de la habitación.

Salí muy decidida, tomé mi móvil marcando el número de Scott y le avisé que nos veríamos en mi habitación para vengarnos de Will por lo que nos hizo. Al rato, apareció el susodicho con una risa en su rostro, se acercó a besarme el cual acepté, pensándolo bien, debería ser actriz de Hollywood.


-Will ,mi amor, ponte esto-estiré mi mano teniendo una bandana color negro y  el  aceptó confuso.


-¿Para que quieres que me la ponga?-preguntó mirándola


-Tontito,es una sorpresa-el rió y se la puso muy contento

MALVADA GEMELA ♥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora