Pude ver su vista perdida entre el fuego de la chimenea, su cara que tenía la más hermosa sonrisa que había visto en mi vida ahora se veía pálida y esquelética
-Agatha, mi amor- aquella giró su cabeza pero su vista seguía en el ardiente fuego, tomé...
Nota autora Holaaa! Después de tanto tiempo por fin puedo actualizar, lamento muchísimo haber tardado, he estado de vacaciones aunque ya estemos de nuevo en horario laboral 😜😜 En fin, aquí os dejo nuevo capítulo.
Aviso: Este capítulo va a estar picoso 🔥🔥 (probablemente esto haya quedado súper raro, nunca he escrito nada así y menos tan especifico como es un tema como el sexo)
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Pd: Este capítulo fue escrito el 18/01/23
Agatha:
Ya habían pasado algunos días después de ese encuentro tan agridulce con mis padres y Toni, él estaba mejor pero no podría ocultar el sentirse mal por ello.
Me levante al escuchar que a mi móvil lo estaban explotando en notificaciones, gruñí molesta por aquello, encendí mi móvil y pude ver que todas eran de Instagram y Twitter, me metí confusa, al ver de que se trataba tal escándalo suspire y me pase fuertemente las manos por la cara.
Eran fotos de una marca de revistas; Caras, en las cuales salía yo en un restaurante al cual había ido con Toni
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Me sentí molesta por ello, yo aún no quería formalizar mi relación públicamente con Toni y le pedí a él que no lo hiciera. Me mordí el labio inferior al pensar que ya todo el mundo lo sabía, pero lo que más me molestaba era por la manera en la que se hizo viral, putos paparazzis.
Giré mi cabeza para ver a Toni pero él estaba ausente, alcé una ceja pero supuse que estaba en el salón, me dirigí al baño y me cepillé los dientes, al ir al salón no le vi, me dirigí a la cocina y vi una notita en la nevera:
Linda, he ido a entrenar, no te he despertado por que te veías muy mona durmiendo y me daba pena levantarte, si quieres algo tómalo sin miedo, si vas a salir avísame por favor. Un besito, TK8
Sonreí al leerla, me encantaba que me llamase 'linda' o 'mi vida', deje la notita en el mesón y me senté en el sofá.
Me quede viendo a la nada, pensando en todo, pensando en cómo por idiota conocí al amor de mi vida, pensando en cómo con él pude opacar todo mi antiguo dolor.
Me levante del sofá y fui a una de las habitaciones que había en la casa, al entrar vi una especie de oficina, nunca había tenido el impulso de entrar, era pequeña pero muy agradable, me adentré un poco más y pude ver un pequeño escritorio con un ordenador, a su lado izquierdo había una estantería con carpetas, libros entre otras cosas, busqué entre esos libros alguno que me llamara la atención, la verdad, me encantaba leer, después de mirar unos cuantos encontré uno; "Esperando al diluvio" Dolores Redondo. Tanto como su portada y su sinopsis me llamaron la atención.
Me senté de nuevo en el sofá y me perdí del mundo real en aquel maravilloso libro, tanto la mañana como la tarde se me pasaron volando, había perdido totalmente la noción del tiempo, sin darme cuenta, Toni ya estaba de nuevo en casa.
-Hola mi vida- dijo al entrar, tirando sus cosas del entrenamiento al lado del sofá y tirándose en él, apoyando su cabeza en mi piernas -¿Qué lees?
-Hola- le respondí agachando un poco mi cabeza para besar su nariz y después hacer como que la mordía, él esbozó una hermosa sonrisa y yo reí -Estoy leyendo un libro que encontré en tu pequeña oficina, "Esperando al diluvio" se llama, espero que no te moleste que haya entrado allí sin tu permiso-
-No, para nada, yo te di la libertad de coger lo que quisieras- Toni cerró sus ojos agotado y yo comencé a peinar su cabello -¿Has desayunado ya algo?
-No, me perdí en el libro- él abrió sus ojos rápidamente y me miro con seriedad -¿Qué?
-Quedamos en que comerías por lo menos una fruta por la mañana, tienes que desayunar algo- era cierto, era nuestro trato
-Si, lo siento, lo olvide- respondí avergonzada acomodando algunos mechones sueltos detrás de mi oreja. La conversación sobre mi alimentación corto ahí.
Me levante del sofá, dejando a Toni acostado sobre él, camine lentamente hacia la habitación de él quitándome la camisa de igual manera.
-¿A donde vas?-
-A bañarme- le respondí ya con la camisa fuera y ahora quitándome el short -¿Por?- mire atrás y él me miraba embobado
-Por... nada- reí internamente y seguí caminando hacia el baño de su habitación, estaba a punto de cerrar la puerta pero un brazo la detuvo -Yo también me tengo que bañar- explico rápidamente, volví a reír dejándole pasar y apoyándome en la puerta para cerrarla.
Él comenzó a quitar su camisa de entrenamiento rápidamente y yo me quede viéndole mientras me mordía el labio inferior y sonreía, me acerqué a él y pase mis manos por sus hombros, acariciando su cuello y espalda, de repente sentí como el broche de mi sostén se soltaba
-Que rápido, ¿no?- él me sonrió pícaramente y termine de quitarme la prenda dejando mis pechos al aire.
Me pegue aún más a él y lo bese, ambos estábamos prácticamente desnudos, él me cogió por el culo y me alzó mientras nos seguíamos besando, enrollé mis piernas alrededor de su cintura y él comenzó a quitar mi braga lentamente acariciando mis piernas, por fin estábamos ambos del todo desnudos, él se introdujo a la ducha aún conmigo encima, cerró la fina puerta de cristal y abrió la llave haciendo que el agua cayera directo a mi cabeza con la temperatura perfecta.
Me separé del beso y comencé a acariciar su cabello, él se acercó a mi cuello y lo comenzó a besar haciendo que un escalofrío recorriera mi cuerpo, me pego bruscamente contra la pared aún besando mi cuello pasando sus manos por mi pechos, jadeé ante eso y coloqué las mías en su marcado abdomen, se separó de mi cuello y me miro a lo ojos -Dios mío Agatha Jozić, eres hermosa- sonreí ante ese cumplido.
Toni:
Ella se bajo rápidamente de mis brazos y salió de la ducha, la mire confusa mientras se secaba el cabello y el cuerpo -¿Te iras ya?- le pregunte cerrando la llave aún mirándola, ella se giró y pude ver una sonrisa de lado pintada en su cara
-Sí, pero quiero que vengas conmigo- salió del baño, yo salí de la ducha para secarme rápidamente, salí del baño y la vi ahí acostada en la cama, me acerqué lo más rápido que pudiese, las ganas de estar con ella me mataban, me puse encima de ella y comencé a besar sus labios desesperadamente mientras acariciaba mi cabello. -Kroos, quiero que me hagas la mujer más deseada del mundo- rogó, y eso iba a hacer, iba a cumplir sus ordenes, pase mis manos de nuevo por sus pechos masajeándolos haciendo que ella jadeara.
Después de ello me introduje en ella haciendo que un agudo gemido saliera de ella, las embestidas eran lentas para procurar de no lastimarla, pero en ocasiones me pidió que fuera más rápido, sentía como sus uñas rasgaban mi espalda o simplemente se clavaban en ella.
Salí de ella haciéndola producir un fuerte quejido, pase mis manos por sus suaves y corvadas cinturas húmedas por el sudor que el choque de nuestros cuerpos había producido.
-Dios mío Toni, me haces tan feliz, disfruto demasiado del sexo contigo-
-Me alegra escuchar eso, te amo, meine liebe- sonreí al ver su cara confusa intentando descifrar lo que aquello significaba
-No sé que significará eso, pero, yo también- me acoste a su lado y la acurruque, ambos habíamos quedado exhaustos por culpa de la actividad haciendo que ella fácilmente se durmiera entre mis brazos
