Shadows: Héroes de terror

Cap. 32: Moralidad

En algún momento, las cosas en la sala muerta se habían convertido en una gran noche de cine. Había montones de mantas esparcidas por el suelo y algunos tazones de palomitas de maíz que todos habían olvidado mientras estaban sentados, con los ojos pegados a la pantalla y viendo cómo los planes de respaldo de Shadow fallaban uno por uno. Fue la cosa más llena de suspenso que Electra jamás había visto, ya que una y otra vez, Midoriya tuvo que luchar para idear nuevos planes sobre la marcha y de alguna manera hacerlos funcionar.

Honestamente, la parte más impresionante de todo fue que el niño aún no se había dado por vencido. Electra había conocido a mucha gente, incluso a muchos héroes, que se habrían dado por vencidos después del primer o segundo plan fallido. Era parte de lo que hacía factible el trabajo de un héroe, después de todo. Haz que un villano esté lo suficientemente acorralado y se entregará o vendrá en silencio. Sin embargo, los que eran como Midoriya eran los más aterradores, simplemente porque nunca se daban por vencidos.

Cuando los villanos como él eran acorralados, se defendían.

Todos estaban tan absortos mirando la pantalla que no habían notado que la puerta se abría hasta que una nueva voz jadeó "Espera, ¿podemos vernos morir? ¡Bien!"

La habitación entera saltó colectivamente y giró para mirar hacia la puerta. Todos habían estado tan absortos en lo que aparecía en la pantalla que nadie se había dado cuenta de que tres cuerpos nuevos entraban en la habitación. Electra miró hacia la pantalla y, efectivamente, las tres personas frente a ella estaban ocupadas en la pantalla, dirigiéndose directamente a una trampa que obviamente había tenido éxito si su presencia aquí era una indicación.

Los dos villanos inmediatamente comenzaron a abrirse camino a través del laberinto de mantas y sofás, sonriendo mientras se unían al grupo. El héroe, sin embargo, rondaba por la puerta. Después de unos minutos, algunos de los otros estudiantes héroes muertos fueron a consolarla y Electra miró por última vez la pantalla antes de unirse a ellos. La había tomado completamente por sorpresa cuando Shadows la había matado, y por lo que parecía, esta chica estaba más o menos en el mismo barco. En realidad, ahora que lo pensaba, la mayoría de ellos lo estaban.

Puso suavemente su brazo alrededor del hombro de la niña, como solía hacer cuando consolaba a la víctima de un ataque de villano, "Oye, ¿cómo te sientes?"

"Entumecida." La niña levantó los ojos para mirar la pantalla. "Y enojada."

"Fue ese niño verde, ¿no?" El niño con cabeza de tiburón gruñó. "Él es el que me mató también".

La chica negó con la cabeza, "No estoy enfadada por lo que hizo, necesariamente. Estoy enojas porque le creyeron".

Ignoró las miradas confundidas de todos, empujándolos para sentarse en el sofá y Electra se quedó mirándola. ¿Qué había hecho Shadows?

Todos volvieron su atención a la pantalla y las vibraciones en la habitación rápidamente pasaron de una acogedora noche de cine a un juego deportivo de campeonato mientras veían a Midoriya llevar a cabo el plan absolutamente más loco que jamás habían visto. Pero no importaba cuánto gritaran a la pantalla, los jugadores aún no podían escucharlos.

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La mitad de las mandíbulas de los profesores todavía estaban en el suelo mientras observaban a sus alumnos llevar a uno de los villanos directamente a su base de operaciones, todo mientras el niño absorbía la comodidad y la atención debido a la muerte de un héroe. Un héroe que él mismo había matado. Los estudiantes iban a tener tantos problemas de confianza.

"Tiene que haber algo mal con el niño, ¿verdad?" Present Mic hizo un gesto hacia Midoriya en la pantalla. "Como psicológicamente. Ningún niño normal haría algo así".