Cap. 6: Permiso

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Hitoshi volvió a enderezar nerviosamente el papel mientras él y Midoriya caminaban hacia su hogar de acogida. No es que el papel fuera tan valioso. Habían usado la impresora en la biblioteca para hacer algunas copias de la exención de permiso para el ejercicio de capacitación de UA, por lo que imprimir otra no sería un gran problema ni nada, pero el papel se sentía valioso solo por lo que representaba. Si ambos pudieran convencer a sus padres, bueno, en el caso de Hitoshi, sus tutores, para aprobarlo, entonces no solo podrían practicar todas las estrategias que estaban aprendiendo, sino ver cómo encajaban en una lucha real contra los estudiantes de la UA. No estaba seguro de qué tan lejos llegarían, obviamente, ya que los estudiantes de la UA tendrían mucho más entrenamiento que ellos dos, pero Midoriya tenía razón, sería una buena manera de dar a conocer sus nombres y ponerse de pie entre las decenas de miles de otros niños que intentarían participar en el curso de héroes el próximo año. 

Suponiendo que realmente pudieran convencer a sus tutores de que lo firmen. 

Sostuvo la puerta abierta para Midoriya y esperó a que se quitara los zapatos antes de llevarlo de regreso a la cocina. Sus padres adoptivos deberían estar en casa ahora y aunque estarían cansados ​​del trabajo, probablemente no había un mejor momento para tener esta conversación. Sin embargo, eso no significaba que Hitoshi no estuviera tentado a darse la vuelta y correr en la otra dirección en lugar de arriesgarse a meterse en problemas. 

Su padre adoptivo estaba sentado a la mesa leyendo un periódico mientras su madre adoptiva preparaba la cena, pero ninguno de los dos vio entrar a los dos. Hitoshi raspó el piso con el talón, haciendo el ruido no vocal suficiente para llamar a su padre adoptivo y que levante la vista de su periódico. El estómago de Hitoshi se hundió cuando hizo una doble toma entre Hitoshi y Midoriya antes de que su rostro se endureciera en una expresión claramente disgustada, "Hitoshi, no nos dijiste que traerías a un amigo."

"¡Oh, lo siento!" Midoriya tenía una expresión de culpa inocente en su rostro. "Insistí un poco en venir en el último minuto y estaba totalmente hablando a Shinso, así que realmente no tuvo tiempo de enviarle un mensaje de texto. Um, cierto, probablemente te estés preguntando ... ¡mi nombre es Izuku Midoriya! Ustedes dos deben ser los padres de Shinso ".

El padre adoptivo frunció el ceño, pero parecía mucho menos enojado que antes, lo que hizo que Hitoshi se relajara un poco. Que Midoriya asumiera la culpa de una visita de último minuto parecía que había sido un buen plan, aunque la verdad era que lo habían planeado, pero a sus padres adoptivos no les gustaba que hablara con ellos en absoluto, a pesar de que él ya había intentado decirles que su peculiaridad no funcionaba con los mensajes de texto. Midoriya, sin embargo, estaba lo suficientemente enérgico como para que ambos decidieran que eso podría pasar por un accidente. 

"¿Entonces vas a la escuela con Hitoshi?" Preguntó mamá adoptiva. 

"¡No, nos conocimos un día después de la escuela!" Midoriya respondió alegremente. "A los niños de mi propia escuela no les agrado mucho ..."

Hitoshi captó un brillo de satisfacción en los ojos de Midoriya cuando su madre adoptiva frunció el ceño con lástima, "Oh, lamento oír eso".

Midoriya se encogió de hombros, pero no respondió. Para tener la mayor posibilidad de éxito, necesitaban encajar en la narrativa que sus padres adoptivos ya creían saber, que Hitoshi era peligroso y que nadie estaría dispuesto a ser amigo de él. Serían más propensos a creer que Midoriya estaba pasando el rato con él porque carecía de mejores opciones y era más seguro que ellos pensando que Hitoshi lo estaba manipulando de alguna manera, o peor, lavándole el cerebro para que fueran amigos. De ahí la cautelosa desgana, que parecía funcionar a la perfección. 

Shadows: Héroes de terrorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora