Nuestro niño - [Felix, Chan, Hyunjin]

Chapter 10

[Contenido sexual⚠️‼️]

¿Cuándo había pasado esto de ser una venganza a un experimento para aclarar mis dudas sexuales?

Hyunjin agarraba una de mis mejillas con su mano mientras llevaba la otra hacia mi cabello enredando sus dedos en este. Juraba que podía sentir vibraciones dentro de mí, no había experimentado este sentimiento nunca antes, no se trataba de excitación, ni de adrenalina, no sé qué era pero me encantaba, me volvía jodidamente loco.

Traté de ser el que controlara la situación y agarré al pelirrojo de las caderas para tumbarlo en la cama y quedar yo encima. Hyun era un poco más alto que yo pero eso no fue un problema para mí ya que conseguí acomodarme sobre él con éxito.

Hyunjin succionaba mi labio inferior con sensualidad, lamía, mordía y trataba mis labios como quería, estaba claro que él no era ningún novato. Quedamos por unos minutos jugando con nuestras lenguas con las respiraciones entrecortadas, mi pecho subía y bajaba debido a la falta de aire que esos besos me causaban. Quise seguir así por más tiempo ya que los labios del contrario me atraían mucho, unos labios gruesos y sexys decorados por dos trozos de metal. Sin embargo, no tardamos mucho en la misma posición ya que Hyunjin decidió dar la vuelta, ahora era yo el que se encontraba abajo, no estaba acostumbrado a esto.

Entre esos besos sonaba ‘Do it for me’ de Rosenfeld, una canción perfecta para la ocasión. Quería ser yo el que controlase todo, no quería que Hyunjin se pensara que estaba desesperado por acostarme con él, aunque sí fuese así, pero no podía moverme.

Hyunjin siguió los besos mientras sus manos recorrían sin vergüenza todo mi cuerpo, desde mis piernas hasta mi abdomen o mi rostro. Se hizo hueco entre mis piernas para poder acomodarse mejor, sin embargo no esperaba que su pierna subiera para sobar mi miembro con su rodilla.

—Mierda…— suspiré cuando lo noté, cuando noté el bulto en mis pantalones.

El pelirrojo se separó unos milímetros cuando aún nuestros labios se rozaban y con una lasciva sonrisa llevó una de sus manos hacia la cremallera de mi pantalón para después bajarla.

—Bokkie, desnúdate ¿si?— me ordenó con voz ronca aún hablándome desde tan cerca haciendo que todo mi ser temblara por dentro y me volviera loco.

Obedecí y me acomodé para quitarme la sudadera que llevaba dejando mi torso al descubierto. Había perdido el control de la situación, y quizás era lo mejor, mi experiencia era nula en el sexo con hombres, por lo que debía obedecer a Hyunjin para ser guiado.

El pelirrojo, tras haberse deshecho de su ropa quedándose simplemente con sus bóxers, descendió una de sus manos hasta mi miembro para acariciarlo suavemente mientras con la otra me atraía hacia él para besarnos de nuevo. Mientras yo tironeaba del cabello del mayor, él se dedicó a descender lentamente dejando besos por todas partes; marcó mi cuello repetidas veces, repitiendo la misma acción también mi clavícula, hizo una parada para lamer, morder y chupar mis pezones a su antojo haciendo que mi cuerpo se estremeciera y que mis pantalones apretaran por culpa de mi ahora dolorosa erección. De nuevo, retomó su camino pasando su lengua por mi abdomen dejando un rastro de saliva, si no estuviera caliente diría que es asqueroso pero me pareció lo mas sexy y excitante del mundo. Noté la frialdad de su piercing contra mi marcado abdomen hasta llegar al tiro de mi pantalón.

A estas alturas yo estaba sudando, mi rubio cabello se encontraba húmedo al igual que mis boxers por culpa de mi erección. Hyunjin desabrochó mi pantalón y alzó la cabeza para darme una sonrisa de lado. Entre besos, caricias, chupones y demás, nos deshicimos de mi ropa, incluso de mis boxers quedándome completamente desnudo ante el pelirrojo, este se incorporó un poco apoyando sus manos a mis costados y dejando caer su peso en estos para echarme un rápido vistazo.