—No, no. Esto no es divertido. ¡Fuera de aquí! — Grité, aún estando en shock.
No entiendo el porqué decidieron venir conmigo.
—Akira. Lo sentimos, pero... ¿Podemos pasar? — Preguntó el peliverde con una voz bastante suave y calmada.
Acaban de salir en las noticias, ¿cómo es posible que estén tan tranquilos? Y... Después de haber.... Matado a alguien.
—¿Q-qué? ¡No! ¡¿Qué mierda les pa-?! — El rubio me tapó la boca y no me dejó terminar.
Traté de gritar, de quitar su mano, pero no dió resultados. Los tres hombres entraron a mi casa y cerraron la puerta. Bakugo me soltó.
—Voy a llamar a la policía si no se van, ¡no estoy jugando!
Midoriya se arrodilló ante mí y tomó mis manos.
—Akira, por favor. Déjanos estar aquí, al menos por hoy. Te prometo que te explicaremos todo. No podemos estar allá afuera.
¿Por qué yo? ¿Por qué a mí? ¿Por qué? No podía pensar con claridad, no podía hablar. Comencé a temblar y a balbucear.
—Yo- Ahm- Es que- ¿Por qué? Izuku, explícame por qué.
El bicolor por fin habló.
—Te lo explicaremos, preciosa. Cuando estés lista. — Puso sus manos en mis hombros y me miró a los ojos. — Respira, tranquilizate y cuando estés bien, te lo contaremos todo, te lo prometo.
—¡Sí, hazle caso! Siéntate ahí y descansa. — Dijo Bakugo, apuntando al sofá.
Me costaba, pero lo intenté. Respiré no una ni dos, más de tres veces y por fin logré calmarme. Los miré a los tres nuevamente.
Suspiré.
—Bien, ¿me dirán que pasa? ¿Y por qué están aquí? Quiero saberlo todo.
—Te lo contaremos. Todo comienza cuando...
[...]
Mierda...
—¿E-entonces es verdad? Son mafiosos... Hay mafiosos en MI casa.
Comenzaba otra vez, el ataque volvió. Las ganas de golpearlos, golpearme y golpear todo se hacían cada vez más grandes.
—¡HEY, YA! Tranquilizate, Akira. Ven aquí. — Dijo el rubio para después abrazarme.
Ya ni si quiera podía razonar bien, todo a mi alrededor estaba borroso. Correspondí a su abrazo.
Él se acercó más a mi oído y susurró.
—No te haremos daño, bonita, jamás. No tienes porqué tenernos miedo, tranquila.
Esas palabras... en este momento suenan tan reales.
Yo seguía sollozando y soltando lágrimas pero ya eran menos, logré calmarme por fin.
[...]
Al día siguientePor alguna razón, terminé aceptando su estancia en mi hogar. Puse algunas reglas, como: No tocar mis cosas ni entrar a mi habitación sin permiso, y cosas básicas para nuestra convivencia. Bakugo se ofreció a cocinar todos los días para nosotros, mientras que Izuku, se ofreció para mantener la casa limpia, y Shoto... bueno, me parece que Todoroki estará aquí de a gratis.
Honestamente, jamás esperé tener a 3 chicos tan apuestos en mi hogar algún día. Era algo irreal, algo inesperado y en ocasiones incómodo.
En fin, hoy Todoroki y yo hemos decidido que iríamos de compras, ya que, siendo sincera, yo jamás cociné. No porque no quisiera, en realidad nunca supe hacerlo, y no mentiré, prefiero pedir por alguna app del teléfono.
—Entonces, ¿ya les quedó claro? Shoto, ¿ya? — Preguntaba Bakugo, apunto de explotarnos a ambos.
Es gracioso como alguien pueda llegar a explotar a otra persona por no saber diferenciar el perejil del cilantro, Bakugo es el alguien.
—Ya, padre. Ya nos quedó claro, ¿ya podemos irnos? — Contestó el bicolor con un tono sarcástico.
—Recuerda no quitarte el maldito gorro ni el cubrebocas, nadie puede vernos por ahora.
—Sí, Shoto. Por favor, ten cuidado. Podrías poner en peligro a Akira. — Mencionó Izuku.
—No la pondría así en peligro, lo saben. ¿Ya podemos irnos?
—Vámonos, ni que necesitaramos permiso. — Lo tomé el brazo y lo arrastré conmigo hacia mi auto.
[...]
—Akira. — Me miró con preocupación. — ¿Cuál es el cilantro que tenemos que llevar? Je. — Me mostró un cilantro y un perejil.
Mierda, no recuerdo. Sólo fingía prestarle atención a Bakugo para poder salir de una vez.
—¿Es en serio? Eres un irresponsable, Todoroki. ¿No le pusiste atención al gruñón?
—Lo siento, se me olvidó. Pero tú lo sabes, ¿no? ¿cuál es? — Preguntó.
—Mhm. Bien, no sé, no le puse atención, llevemos el que sea. Que la suerte nos acompañe. Supongo.
Tomé uno al azar y nos dirigimos a pagar, nos llevó una hora entera encontrar todo lo que había pedido el rubio explosivo.
Al pagar, salimos con las bolsas llenas y pesadas. Todoroki me ayudó a guardarlas en la parte trasera del auto.
—Oye, Akira.
—¿Mhm?
—Vayamos a otra parte. Tengamos una cita...
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VAMOOOH, CITA CON TODOROKI!!! Esperen el próximo cap! Muchas gracias por leer, espero le haya gustado, si votan me ayudarían bastante.
keralynmha en Tiktok! Subo actualizaciones y edits!
Una cosita más, me ayudarían bastante si recomiendan el fic a más gente, xfi y gracias, tomen una manzanita, besos!! 🍏
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#𝗦𝗘𝗗𝗨𝗖𝗘𝗗 𝗕𝗬 𝗧𝗛𝗘 𝗠𝗔𝗙𝗜𝗔 ; Mha.
FanfictionAkira, una joven actriz, se ve envuelta en un drama desde que tres guapos mafiosos se interesan en ella. ¿Podrá decidirse por uno de ellos? ¿Podrá salir con vida después de meterse con un grupo de este tipo?