Nada Es Perfecto - Bakutodo

El homicidio de Katsuki Bakugou

Estaban tan concentrados dándose atención mutuamente que siquiera notaron cuando Izuku llego para dormir.
Simplemente mientras se estaban arrebatando almohadas entre ellos jugando, vieron al peliverde dormido plácidamente en su camilla, como si todo fuera silencio o paz.

Luego de ello se quedaron platicando sobre las clases que hubieron en UA, llegando a tocar el tema de las castas en los estudiantes.

-¿Enserio? Wow... ¿Tu que eres? - pregunta el bicolor con total curiosidad mientras abrazaba una almohada. Katsuki estaba sentado a su lado de coligue, mirando a la dirección contraria de su compañero, teniendo una almohada entre las piernas.

-Ah... ¿Eso de que te sirve de saber?.

- Si no quieres hablarlo no hay problema...- Pudo notar la incomodidad de el bicolor, quizá en su  gesto y su lenguaje corporal. Eso le causó ternura al ceniza, sin embargo decidió jugarle una pequeña broma.
Decayó su mirada, bajando su vista.

-Soy Omega.. - Su rostro cayó entre sus propias manos, luego comenzó a sollozar casi silenciosamente, es un sollozo real, aun que la intención no.

Shōto alcanzó a alarmarse, pronto lo tomó entre sus brazos y Katsuki rodeó su cuello con fuerza, sollozando en su cuello.
El bicolor no sabe que hacer, no sabe que decir o como reaccionar sin hacerlo sentir peor.
Katsuki pronto comienza a reir soltandolo, su risa se vuelve una carcajada, alejando su rostro de su cuello para limpiar sus ojos.

- No estaba llorando enserio, lo siento por preocuparte.

-Dios, voy a matarte - Ríe vagamente y un tanto aliviado, suspirando. Ciertamente los omegas no tenían muy buena fama. Se los daba por débiles, sensibles, poco inteligentes, dependientes y sobre todo como putas, las mas vulgares putas habidas por haber. Eso generaba lastima a cada persona que hablara con un omega, sin embargo el otro lado de su reputación es total servicialidad, amor y familia, ama de casa y lo mejor que puede existir como esposa de un alpha.  -No sabia como reaccionar...- 

-No seas tonto. - Se burlo en su rostro, provocando una sonrisa que pronto fue compartida. - ¿Vas a matarme?-

-Voy a hacerlo.- Ambos transforman su sonrisa en algo coqueto.

-¿Ah si?, ¿Y de que forma, bastardo?- Inclina un tanto su torso hacia el bicolor, sin cambiar su sonrisa.

-Hay muchas formas de hacerlo.-

-Mencioname una.- Esto se esta poniendo interesante. Por un momento los segundos se detienen en el mundo de Katsuki, eternizando el tiempo entre su orden y la respuesta ajena. Su corazón late a no mas poder, esta nervioso y  ansioso por oírlo, y eso que solo pasaron dos segundos de la ultima vez que hablo.

-Puedo ahogarte con la almohada mientras duermes.- Si, Katsuki ríe por su propia desilucion, sin embargo no le molesta que la respuesta no sea la que esperaba, le parece lo suficientemente tierno.

- Asesino serial te dicen.-  

-El mas peligroso de todos.-

-Stain teme de ti.-

-La liga huye cuando me ve.-

Ambos compartieron una carcajada, que pronto redujeron al recordar que tenían compañía, riendo bajo por ello.

-Es tarde,hay que dormir...-

-¿Que eres, mi madre? No quiero dormir.-

-Eres como un niño pequeño, yo si quiero dormir.-

El ceniza gruñe, levantandose a regañadientes. 
Sostiene la almohada bajo su brazo mirando con firmeza al bicolor.
La estaba pasando bien a su lado, no quería dormir, quería seguir acompañandolo.

-Descansa abuelita.-

-¿Porque el apodo?-

-Las abuelas duermen temprano.-

-Te recuerdo que..-

-Callate, descansa idiota.-

-Descansa Bakugou...-

Katsuki se acerca al interruptor, y lo ultimo que ve el heterocromatico es la sonrisa que le dedica el ceniza.
Todo queda a oscuras, y pronto Shoto sonríe tontamente, acomodandose en su cama.

El ojirubie se recuesta, dejando la almohada que traía bajo el brazo, ahora debajo de su cabeza.
Su sonrisa se filtra en la oscuridad de la noche.
Era una madrugada de luna a negra, por lo que no se hallaba un brillo que ilumine la habitación mediante los ventanales.
Quiza bakugou estaba feliz, Shoto en cierta parte lo estaba, pero solamente una muy pequeña.

Hasta hace una noche atrás el se encontraba atado, herido y drogado en un húmedo, hediondo y frió calabozo. No es algo de superar de una noche a otra, Apenas lo sobrellevo cuando estaba pasando su tiempo con su amigo, luego de eso los recuerdos invadían la mente de Shoto tomándola por suya, era aterrador ello, no podía estar un segundo sin pensar en ello.

Los recuerdos revoloteaban en su cabeza dando vueltas en una circunferencia sin principio ni fin, solamente era una secuencia de escenas repetitivas e infinitivas que distorsionaban cualquier buen pensamiento que quisiera meter en su cabeza para distraerse, asimilándose con su antigua situación, sin dejar algo bueno en su memoria e imaginación.

El tiempo paso, mientras la noche se alargaba para la mente de Shoto. No sabia cuanto tiempo había pasado, la noción era algo que había perdido hace tiempo y ahora le era imposible conciliarla. 
Tampoco era como si tuviese muchas ganas de levantarse a buscar hora en la habitación, el televisor estaba apagado y no quería cegar a sus compañeros con el brillo, no tenia teléfono ni se atrevía a tomar el teléfono de algunos de sus amigos y ni un solo reloj hallaba en el cuarto.

No tenia sueño. No comprendía porque ya no tenia sueño, quizas sus agobiantes pensamientos habían  ahuyentado su sueño, no conocía específicamente que sea, solo el exacto momento cuando la luz fue apagada por Katsuki.

#. Hola, quería disculparme por las faltas ortográficas o desentendimientos de expresión, ademas de dar poco contenido en un capitulo..

se que posiblemente ignoren esto dado que aun no tengo mucho apoyo en mi historia, pero queria agradecer a aquellos que votan y siguen este humilde Au<3los tqm, dejen sus votos, si quieren opinar o corregir algo sean libres de hacerlo y ayúdenme dando apoyo, si les gusta la historia y sepan de alguien que quizá pueda gustarles, porfis recomiendenla, eso me ayudaría mucho, nos vemos.