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— ¡¡No vuelvas a desaparecer así Mugman!! –grito la taza mayor mientras abrazaba de forma sobreprotectora a la taza azul–

Después de haber buscado por un pequeño periodo de tiempo los tres amigos al fin habían dado con el paradero de Cuphead quien no se había percatado de su presencia si no fue hasta que Hilda le tocó la cabeza y allí solto un grito de lo más "masculino" que hizo reír mucho al clavel y a su hermano menor la chica también soltó una risa pero intento disimularlo fingiendo toser, la taza roja se cruzó de brazos y desvío su mirada a otra parte intentando evitar que los demás notaran que en sus mejillas un pequeño color carmín hacia acto de presencia por la vergüenza que acaba de pasar aunque después cayó en cuenta que su hermanito estaba allí y corrió a abrazarlo con fuerza haciendo que el otro parará de reír y correspondiera al abrazo

— Perdón Cuppy te prometo que no volverá a pasar –se disculpo bajando un poco la mirada–

— Eso espero no quiero que algo malo te pase –dejo de abrazar al menor y se separó de el–

— Sabía que ibas a necesitar ayuda para buscarlo –hablo la chica acercándose a las tazas–

— Claro que no Hilda yo podía buscarlo solo

— Nisiquiera un "gracias chicos por encontrar a mi hermano" taza mal agradecida –Cagney intento imitar la voz de Cuphead lo que hizo que la taza roja lo mirara con fastidio–

— Gracias Hilda por encontrar a Mugman –queria resaltar el nombre de la chica para hacer molestar a la flor–

— Si fueras tu el que se perdiera en el bosque o en cualquier lado no movería ni una hoja para encontrarte

— Cómo si quisiera que TU me encontrarás maleza

— Cómo me llamaste enano –Se acerco encarando a la taza roja–

— Cómo escuchaste o quieres que te lo diga más lento para que entiendas –respondio de forma hostil–

— B-bueno –interrumpio la taza azul la discusión que pronto comenzaría– Ya está oscuro así que hay que regresar a casa Cuphead

— Tienes razón Mugsy así que adiós Hilda y maleza –comenzo a caminar hacia su casa–

— Adiós chicos nos vemos otro día –sonrio cómo siempre al despedirse de sus amigos y se fue al lado de su hermano–

— Que suerte tiene de que ya no sea un villano de lo contrario lo atraparía con mis raíces y lo arrastraría hasta enterrarlo vivo –miraba como la taza roja y azul se iba alejando de dónde estaban ellos–

—  No seas tonto Cagney si lo hicieras su hermanito se molestaría mucho contigo –miro de forma burlona a su contrario–

— Aún me preguntó cómo es posible que sean gemelos nisiquiera se parecen Mugman es un ángel comparado a Cuphead –se dió media vuelta y se fue camino a su casa–

— Eso es algo que nunca sabremos con exactitud vamonos rápido con suerte alcanzamos a ver los últimos episodios

— ¿Los últimos?... ya nos habremos perdido las mejores partes a la próxima dejamos que un oso devore a Cuphead

— Jaja muy gracioso señor Cagney

Así fue como cada quien se fue a su casa las tazas apenas llegaron se dividieron pues el menor se fue a preparar la cena mientras que el mayor se fue a tomar una pequeña ducha antes de comer, mientras Mugman cocinaba miraba la pulsera y luego volteaba a ver su bolsillo sabiendo que allí estaba la carta pensaba que tenía que encontrar un lugar donde guardar todas las cartas porque de algo estaba seguro y es que no serían pocas las que llegaría a recibir de su administrad@r secret@ y el otro problema era su hermano mayor el sabía de sobra que no podía dejar que las encontrará porque nada bueno saldría si eso pasaba no le gustaba guardar le secretos pero esto era algo que no sentía que su hermano lo tomaría de buena manera ya que en ocasiones llegaba a ser un poco (muy) sobreprotector con el y eso en algunos momentos era una molestia

Después de cenar los hermanos se fueron a ver la televisión un rato antes de que finalmente el reloj marcará las 10 de la noche por lo cual se fueron hacia su habitación se pusieron sus pijamas y finalmente se acostaron en su cama y las luces se apagaron Cuphead no tardó tanto para dormirse profundamente en cambio Mugman sin importar lo que hiciera no conseguía conciliar el sueño por lo que se levanto de la cama y salió de la casa a tomar un poco de aire fresco se sentó en el suelo y levanto la mirada hacia el cielo podía ver cómo las estrellas, la luna brillaban y una suave brisa le llegaba a dar justo en el rostro haciendo que se sintiera más relajado después de un rato mirando las estrellas bajo la mirada para volver a leer las cartas que había recibido días atrás con cada palabra que leía sentía un agradable calor en el pecho además de tener un brillo especial en sus ojos y una sonrisa que dejaba a la vista que se encontraba enamorado (aunque esté aún no lo sabía)

— no sé quién seas pero..... Gracias por tan bellas palabras espero poder conocerte algún día –Se levanto del suelo sin soltar en ningún momento las cartas–

Con eso dicho abrazo las cartas contra su pecho sintiendo que su corazón latía con fuerza tenía esperanzas de poder conocer al autor en algún momento que sin darse cuenta comenzaba a surgir un sentimiento que el no había sentido antes por lo que no sabía lo que era pero estaba más que dispuesto a averiguar lo

— Todo a su tiempo mi tacita aún es muy pronto para que te enteres que esas cartas te las escribo yo

Devil habia tomado la forma de un pajarito que se encontraba en una rama mirando lo que Mugman asia y decía el sabía que antes de presentarse ante el primero debía ganarse su corazón no quería que el pequeño azul creyera que solo quería burlarse de él o algo parecido sus intenciones eran demostrarle sus verdaderos sentimientos a través de las cartas y de momento su plan estaba saliendo bastante bien lo que provocaba que hiciera algo que nadie se esperaría del mismísimo rey del infierno y que incluso los diablillos no podían evitar mirarlo con sorpresa cuando aveces lo encontraban perdido en sus pensamientos

Sonreír de forma sincera

Quien se hubiera imaginado que Devil caería completamente enamorado por aquella tacita que un día junto a su molesto y avaricioso hermano mayor lo derrotaron nisiquiera el sabía cuando todo el odio y rencor que sentía en su momento se convirtió en otra cosa pero bueno ahora su objetivo cambio lo único que deseaba ahora era poder ser la razón por la cual Mugman sonriera de esa manera tan especial y sus ojos brillarán cuando lo viera llegar deseaba tantas cosas y una parte de el estaba un poco preocupado por como terminarían las cosas pero quería confiar en que las cosas funcionarían















































∆ Continuará ∆

Cartas Para Mugsy Donde viven las historias. Descúbrelo ahora