S T A R G I R L, Pablo Gavi ²

EIGHT: the past

| OCHO: El pasado |

Omnisciente

Venecia y João tuvieron una cena agradable, la verdad es que después de conocerse en un partido hablaban algunas veces cuando el portugués le respondía algunas historias.

João la acompaño hasta la puerta de su departamento.

—Acuérdate que mañana es mi partido, y quiero que vayas— João hablo

—Ahí estaré Felix, pero no tengo tu camiseta— ella hizo puchero

—Tranquila, cuando vayas te doy una— dijo él y ella sonrió —Me la pase genial— el dijo

—Yo también— ella sonrió mirandolo a los ojos y luego bajo a sus labios

—Siento que si hago esto es muy pronto— João se iba acercando

—Hazlo— ella dijo

El beso sus labios y ella le siguió, el beso era tranquilo y el morocho pudo sentir el sabor a frutilla de los labios de Venecia.

El beso iba bien hasta que se tuvieron que separar porque la puerta del departamento de Venecia se abrió con fuerza.

Ambos se dieron la vuelta y vieron a Pablo salir de allí—Que haces aquí?— Venecia hablo

Cuando vio al sevillano lo vio con los ojos rojos —Ahora no, Venecia— el dijo entrando a su departamento

—Si bueno, creo que debería irme— hablo João

—Esta bien— Vene contesto pero aún seguía pendiente al sevillano, que al parecer había estado llorando

—Nos vemos mañana— saludo João

—Si claro, acuérdate de la camiseta—ella le dijo por fin mirandolo

El le dio un pico y se fue por las escaleras, ella entró sonriendo y se apoyo en la puerta, nuevamente Pedri y Olivia estaban en el sillón.

—Que pasó con Pablo?— Venecia pregunto al instante

—Vene...— se levantó Olivia

—Pablo no va a casarse— dijo Pedri

—Que?— respondió ella confundida pero también sorprendida

Ninguno de los chicos dijo nada, —Y como esta el? Que pasó?— Venecia iba a abrir la puerta para salir

—No creo que sea el buen momento Vene— Pedri la agarro del brazo

—Por que?— ella lo miró

—Te vio con João— Olivia hablo

—Si? Y yo lo vi con prometida, así que no me venga con sus jueguitos— Venecia abrió la puerta y salió de alli

Empezó a golpear la puerta, hasta que escucho una voz del otro lado —Venecia no quiero hablar— el grito

—No soy Venecia, soy Batman— ella cambio la voz

El abrió con una media sonrisa y los ojos aún rojos —Sabes que me gusta más spiderman— contesto haciéndose a un lado y la dejo pasar.

Pablo se encontraba de unos pantalones holgados y sin remera, para Venecia era normal verlo así, pero no iba a negar que un poco le saltaba la térmica.

Pablo fue directo a su habitación a acostarse, y Venecia lo siguió hasta allí.
—Que pasó Pablo?...— ella pregunto sentándose a su lado

—Cuando conocí a Juliett, creí que ella iba a ser la persona con la que iba a olvidarte—el comenzó. —Créeme que se que no tengo que usar las personas para eso, pero después la empecé a querer, enserio—