Parte 3

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Katsuki Bakugo estaba en su habitación, haciendo los deberes "pacíficamente" (porque en verdad estaba gritándole a la hoja, culpándola de que él fuera incapaz de hacer los ejercicios), cuando, de repente, alguien llamó a la puerta.

-- ¿Quién es? -Dijo con desgana el joven-. Está abierta, aunque no lo parece. Pasa.

Una cabecita con el pelo verde y estufado asomó por la puerta del cuarto. 

-- ¿Deku? .-Dio por sentado el rubio-.

-- Sip .-Aclaró el otro chico-. Acertado, Kacchan.

-- ¿Qué demonios quieres ahora?

-- Me aburro... ¿Y si imitamos una escena de Titanic?

Eso fue bastante repentino y muy por la cara para el rubio, que miraba a Deku, preguntándose si seguiría con resaca.

-- ¿Cual? .-Preguntó curioso-. La que salen los protagonistas agarrados de la mano y...

Fue interrumpido.

-- No, no me refiero a esa... Me refiero a donde salen follando, Kacchan. .-Dijo el peliverde, con una mueca pícara-. Qué inocente eres...

Katsuki notó que se le subía el color a sus mejillas, nunca había escuchado una palabra tan fuerte salir de la boca de Izuku  y se había quedado sorprendido y, además, para postre, estaba sonrojado. Odiaba que la gente lo viera así, le pasaba muy poco en público, pero con Deku... Era diferente. Trató de hablar, pero tan solo le salieron unos tartamudeos ininteligibles. Izuku rio.

-- Ja,ja,ja,ja... Uyyy... Parece que a alguien se le ha parado la respiración y no puede hablar bien... .-Dijo Izuku sin dejar de reír-.

-- D-d-d-d-déjame... N-n-n-no se me ha parado nada...

Después de pronunciar esa frase con doble sentido, Katsuki vio a sus muertos que lo iban a buscar. No literalmente, pues claro, pero su cara pasó de roja a blanca como el papel. Izuku podía parecer inocente, pero tenía una mente más sucia que un vertedero y unas maneras de ser el dominante en las relaciones que podían dejar boquiabierto a cualquiera.

-- Uuuh... "No se te ha parado nada", ¿eh? .-Rio Deku-. ¿Seguro? -Echó una mirada a los pantalones del chico y comprobó que no había ningún bulto visible en ellos-. Pues que pena... A mí hace rato que sí.

Después de la declaración del chico de pelo verde, a Bakugo se le vio visiblemente sonrojado de nuevo. ¿Quién era ese? y, ¿Qué habían hecho con su Dekusito? Deku nunca hablaba así de sucio, a no ser que estuviera borracho o... O muy excitado. No parecía estar ebrio, así que... Podía ser que hubiese ido a su cuarto sólo para complacer su deseo sexual creciente.

Para la sorpresa del rubio, cuando se giró para ver a su compañero, lo encontró en su cama, masturbándose.

-- Q-q-q-qué demonios... ¡Deku! 

Antes de poder decir nada, Izuku se corrió y terminó por caer encima de la cama, exhausto. Después de eso, quedó dormido. Bakugo notaba que esa visión lo había excitado, y, para despertar a Deku de su sueño, empezó a montarlo suavemente, hasta que despertó, contrariado. Empezó a ir más rápido, más rápido, hasta que... Terminaron por correrse y durmieron entre los fluidos de los dos.


                                                   FIN DEL CAPÍTULO 3

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