Cap. 17

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Narra Focus

Estaba tan concentrado observando a mi jefe que no me percaté de que Pablo me estaba ofreciendo un café, si no fuera porque me jalo de la camisa con su manita, no hubiera reaccionado.

-¿Umm?- mire al chico, quien me ofrecía el café- Oh, gracias- le dedique una sonrisa y agarre la taza

El chico sonrió y se fue corriendo a la cocina, supongo a traer el café para los demás, y como si estuviera hechizado, volví mi vista a Fargan. No podía evitar pensar en sus palabras de antes, ni en la cicatriz que tenía en su cuerpo, era imposible no hacerme miles de preguntas y teorías teniendo aquellas experiencias. 

Porque, no le encontraba lógica, el hombre era poderoso, tenía todo lo que quería gracias a su trabajo, entonces, ¿Por qué decir que los odiaba?, ¿Se odiaba a sí mismo?, porque le vi, sus ojos no mentían, en ese momento estaba siendo completamente honesto, no lo estaba haciendo para ganarse la confianza de los chicos.

-Se ve que lo amas mucho- dijo la señora, quien ya había bajado todos los platos y vasos que íbamos a ocupar

-¿Disculpe?- estaba tan distraído que no le había escuchado claramente

-Que se nota que lo amas mucho y que te preocupas por el- con un leve movimiento de cabeza señalo a la dirección donde seguían Fargan y el señor

-Ah...- fingí una sonrisa- Si, lo amo mucho- decir aquello me estaba causando nauseas

-Se nota- con todas mis fuerzas evite hacer una mueca de desagrado a la señora- Dime, ¿Qué pensaste la primera vez que lo viste?- pregunto la señora, curiosa por la respuesta

Pero claramente no le podía decir que cuando lo vi pensé que era un idiota por habérmela mentado en la calle, y que después cuando le vi en la entrevista seguí pensando lo mismo. Lamentablemente esa historia no cuadra con "El lindo matrimonio amoroso" que se supone tenemos, por lo que se me ocurrió algo mejor.

-Al inicio, cuando le vi pensé que era alguien genial, recuerdo que en ese entonces estaba jugando con sus amigos en sus patinetas y yo simplemente no pude apartar la vista de él, era... es alguien que brillaba por si solo y que iluminaba todo a su paso, no pude evitar sentirme emocionado ante su presencia- decidí contarle lo que sentí cuando conocí a mi verdadero amor, Yun Kalahari.

-Qué bonito hablas de el- al parecer la mujer se lo había creído, bueno, después de todo le estaba diciendo la verdad, eso es lo que sentí la primera vez cuando conocí al hombre de mi vida, aun recuerdo aquel día en el que nuestros destinos se cruzaron. 

-¿Y usted?- interrogue, tomando un trago de mi café- ¿Qué pensó cuando conoció a su esposo?- pregunte

-Que era un idiota- empezó a reír

-¿Qué?- no pude evitar reír- ¿Cómo así?- pregunte entre risas

-Sí, veras...-

De camino a la cocina, la señora comenzó a contarme el como conoció a su esposo, me contó que se conocieron a los 13 años en la feria del pueblo, en ese entonces el señor no era de familia adinerada, todo lo contrario, su padre era el mozo de una señora rica y su madre costurera, apenas si tenían para cubrir las necesidades básicas, ella dice que aquella vez él estaba jugando con sus amigos, estaba corriendo por los puestos sin siquiera poner atención a donde iba, y que paso lo que tenía que pasar, el chico choco con ella, tirando así el halado que ella se había comprado, ella le hizo de emoción aquella situación, ahí fue cuando me dijo que si bien ella tampoco venia de una familia adinerada si era cierto que tenía más recursos que el señor, por lo que de cierta manera se sentía superior a él, claro que esto cambio cuando el señor no se dejó rebajar y pues desde ese momento se decidió aquella pequeña guerra que ambos tuvieron por años.

Perro de Caza (Farcus) {Omegavers}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora