Cap. 19

650 78 68
                                    

Narra Fargan

La llegada de Rubius es algo que nadie tenía previsto, personalmente pensé que no volvería hasta el aniversario de la organización o hasta que alguno de nosotros muriera, lo que pasara primero, hablando de aniversario, que bueno que lo recuerdo porque ya está cerca, ya tendremos que organizar eso después, ahora, volviendo al tema principal, jamás pensé que Rubius volvería de sorpresa, aunque eh de admitir que tampoco me causa gran sorpresa pues es algo que sin duda haría él.

Al terminar la cena los cuatro fuimos al despacho de Vegetta, donde continuamos la plática acompañados de uno de mis grandes tesoros, un vino tinto que eh estado guardando para ocasiones especiales, mi famoso "VINO TINTO MARQUES DE MURRIETA CASTILLO YGAY", el cual es parte de mi colección especial, una de la cual no sabe el cuervo, pues si se entera me la confiscaría y a mis bebes nadie los toca. 

-Gracias- exclame, luego de que Vegetta me sirviera una copa

-No puedo creer que esté tomando uno de tus tan preciados vinos- comento risueño Rubius

-La situación lo amerita- comente, elevando mi copa- ¿Hace cuánto que no te veíamos en persona?, ¿4 años?-

-5 Fargan, fueron 5 sin este idiota- respondió Auron, sentándose a su lado

-WoW, ¿Tanto tiempo?- nótese el sarcasmo del oso- Con razón los extrañaba mucho- empezó a reír

-Esto esta delicioso Fargan- comento Vegetta, haciendo referencia al vino

-Lo sé, es de mis cosechas favoritas- exclame orgulloso, dándole de nuevo un sorbo a mi copa- Pero ya no hablemos de mis bebes, Rubius, cuéntanos todo-

Los tres nos acomodamos en los asientos cercanos al oso para poder escuchar sus historias y anécdotas que sabemos se estaba guardando para nosotros, mientras más nos contaba, más nos emocionábamos de escuchar todas sus aventuras, porque la verdad es que los chicos y yo le teníamos un poco de envidia al oso, era inevitable, el a diferencia de nosotros puede salir a donde quiera sin temor alguno, sin complicaciones o trabajo, puede pasarla de fiesta en fiesta en las mejores playas del mundo, puede ir a cualquier lugar sin miedo.

Cosa, que nosotros no, al salir no podemos evitar pensar en todo el trabajo y el riesgo que hay, no podemos saber si hay alguien afuera de la puerta esperando para matarnos. Por eso nos gustaba escuchar sus historias, era bonito conocer más, aunque sea a través de las vivencias de alguien más.

Ja, es curioso, estoy seguro que miles de personas en el mundo deben de creer que personas como nosotros tenemos una vida de ensueño con todo nuestro dinero, lo cual podría ser un poco cierto, aunque también creen que compramos putas y salimos de viaje a muchos paises cada vez que queremos, lo cual si esta fuera de la realidad, tenemos trabajo aunque no lo parezca y no podemos salir cada que se nos de la gana, imposible, no solo nos arriesgamos a nosotros, también a la organización y a nuestras familias. 

Como dije antes, nadie garantiza que no este alguien a la vuelta de la esquina esperando por atravesar tu cabeza con una bala. 

-Ah y ahora que recuerdo- el oso se levantó de su asiento, su repentino movimiento me saco de mis pensamientos- Ahora vengo, no se me vallan- dijo, antes de salir corriendo

Los tres nos miramos entre nosotros, sabíamos que era lo que pasaba, normalmente Rubius y Willy, que son los únicos del grupo que viajan sin problemas, acostumbran mandarnos regalos, desde hace años Rubius nos lo ha estado mandando, mientras que Willy nos los daba personalmente.

.

.

Unos minutos después llego el oso, con unas bolsitas que tenían la inicial de todos, a mí me entrego una bolsita negra con la "D", a Auron con la "R" y a Vegetta con la "S", pues el en realidad tiene la mala costumbre de usar nuestros verdaderos nombres, cosa que nos ah traído problemas, pero bueno, así es el.

Perro de Caza (Farcus) {Omegavers}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora